El Gobierno central se niega a quitar el peaje en la Costa del Sol

El Gobierno central se ha negado por escrito a quitar el peaje de la autopista AP-7 en la Costa del Sol para atenuar los problemas de movilidad que se están produciendo en el litoral occidental de la provincia, entre Málaga y Estepona. En respuesta a una pregunta parlamentaria del PP, el Ejecutivo nacional de Pedro Sánchez se acoge para fundamentar su negativa a lo contemplado en las distintas leyes que regulan la explotación de autopistas en régimen de concesión. 

Y, a este respecto, se señala que no se cumplen actualmente ninguna de las causas -guerra, destrucción de la autopista o motivos recogidos en el pliego- "que permitirían la suspensión de la concesión". Y se insiste en que "ninguna de ellas" se da para "las dos concesiones existentes en la AP-7 entre Benalmádena y Estepona y entre Estepona y Guadiaro". 

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Asimismo, se añade que en la ley reguladora del contrato de concesión de obras públicas "no se contempla la posibilidad de suspender el cobro de peajes". O, igualmente, se apunta que "a la fecha" no se ha determinado que concurran "las condiciones para obligar al desvío de la circulación por una autopista de peaje en régimen de concesión".   

La pregunta a la que respondió el Ejecutivo nacional el pasado 17 de abril fue formulada por el senador del PP y alcalde de Nerja, José Alberto Armijo, quien aludió al plantearla a "los serios problemas de movilidad en la Costa del Sol, entre Málaga y Estepona" y al "sentir favorable" a esta reclamación de "los partidos políticos e instituciones de Málaga". 

Reivindicación del PP

De forma paralela a la petición de una infraestructura ferroviaria para la Costa del Sol que llegue hasta el Campo de Gibraltar, el PP de Málaga está insistiendo en la reivindicación de la suspensión o bonificación del peaje hasta que se ejecute ese nuevo medio de transporte. Y su petición llegó a ser trasladada por unanimidad al Gobierno central por el Pleno de la Diputación Provincial de Málaga, incluso con los votos a favor del PSOE, a finales de febrero de este año.

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En cambio, los socialistas se abstuvieron sobre esta misma cuestión cuando se abordó el pasado 11 de abril en el Parlamento de Andalucía, a pesar de que en esa misma cámara autonómica sí apoyaron el impulso del tren litoral. Tanto en el debate de la Diputación como en el del Parlamento, el PSOE le afeó a los populares que se opusieran a la gratuidad de la misma autopista -en una votación de la Diputación de Málaga- cuando quien gobernaba España era su partido con Mariano Rajoy al frente. 

"Agravio a Málaga"

Las reticencias para la suspensión o el abaratamiento del peaje fueron criticadas por la presidenta provincial del PP, Patricia Navarro, quien lo vinculó "al agravio del Gobierno a Málaga, al negarse a bonificar la autopista de la Costa del Sol mientras compensa el uso de otros peajes".

Navarro lamentó que "el Ministerio afirme en su respuesta parlamentaria que no se cumple ninguna causa prevista por la Ley 8/1972 para suspender la concesión de la AP-7 entre Málaga, Estepona y Guadiaro, siendo dichas causas la guerra, la destrucción de la autopista o los motivos previstos en el pliego de condiciones". “Desde el PP de Málaga no planteamos la suspensión de la concesión, sino la suspensión o bonificación del peaje dentro de un acuerdo entre la Administración y la concesionaria, y eso es algo que sí permite la Ley”, matizó. 

Además, Navarro indicó que “la respuesta también señala que no se ha dado ningún supuesto de los previstos en la Ley de Carreteras de 2015 para obligar al desvío del tráfico a una autopista de peaje en régimen de concesión”, y lo rebatió asegurando que “esto no es verdad, ya que sí se puede desviar el tráfico compensando a la concesionaria”. 

"La citada Ley expone, en su artículo 28, que cuando las condiciones, situaciones, exigencias técnicas o seguridad viaria o la adecuada explotación de las carreteras del Estado lo requieran se podrá desviar el tráfico a la autopista previo informe del Ministerio de Hacienda y audiencia del concesionario, fijando las condiciones y estableciendo una compensación a la empresa concesionaria", agregó. 

En este sentido, la presidenta del PP de Málaga aludió a "las medidas aplicadas por el Gobierno desde 2021 en la autopista AP-9 gallega, contemplando en los Presupuestos Generales del Estado hasta 55 millones de euros al año para compensar esas bonificaciones, con un coste que alcanzará los 2.300 millones en 2048". 

"Entre estos descuentos, el Ejecutivo prevé incluso la gratuidad para todos los trayectos de vuelta que se realicen en un plazo máximo de 24 horas, contemplando una bonificación adicional del 50% en tramos de ida para los usuarios que realicen dos recorridos iguales el mismo día y de sentido contrario, así como un descuento del 20% del importe del peaje en todos los recorridos para vehículos pesados", expuso Navarro.

A renglón seguido, recordó que “el peaje de la Costa del Sol es un peaje de residentes, trabajadores y estudiantes” y que "el recorrido entre Málaga y Estepona de lunes a viernes supera los 389 euros al mes, alcanzando los 248 euros con el bono de usuario habitual". “No es una cuestión legal ni jurídica, sino de voluntad política y de desidia por parte de este Gobierno", enfatizó. 

Competencia de Portugal

La dirigente del PP no perdió de vista que "el Algarve es un destino competidor de la Costa del Sol" y apuntó que es “injusto y discriminatorio” que "Málaga y los malagueños cuenten con la única autopista del sur de la Península de pago, siendo además la más cara por kilómetro, después de que Portugal haya decidido eliminar los peajes en varias autopistas, entre ellas las que conectan Huelva con el Algarve".

“La desidia y el pasotismo del Ejecutivo de Sánchez para mejorar la movilidad de la Costa del Sol sitúa a la provincia y a la comunidad autónoma en una clara posición de desventaja en términos turísticos, empresariales y de infraestructuras”, subrayó Navarro.