­220 plazas de profesores para toda Andalucía. Si se repiten los registros de hace dos años (oposiciones que, por cierto, fueron recurridas por el Ministerio de Educación, provocando una gran polémica) solo habría una plaza por cada 164 aspirantes. Los sindicatos dicen que se trata de una convocatoria ridícula. La Junta lamenta que es lo máximo que permite el Ministerio de Educación de José Ignacio Wert.

Así que el número de plazas previstas por la Consejería corresponden a la estricta aplicación de la tasa de reposición fijada por el Gobierno central para aplicar este año. El consejero, Luciano Alonso, explicó ayer que aunque no comparte el tope del 10% en la tasa de reposición, no quiere ser «insumiso ante la Ley» a fin de que no se produzca ninguna incertidumbre ni recurso sobre la nueva convocatoria, como hace un par de años. «Convocamos lo que nos dejan, no lo que queremos», admitía.

Andalucía convocará plazas de cinco especialidades de carácter instrumental: 50 para Matemáticas, 50 para Lengua y Literatura, 50 para Geografía e Historia, 50 para Inglés y 20 para Música. Algo es algo, pensará más de uno, sobre todo teniendo en cuenta que comunidades autónomas como Murcia y Castilla La Mancha ya han anunciado que este año no celebrarán oposiciones.

Esta situación, a juicio de Ramoni Ruiz, presidenta del sindicato de enseñanza de CSIF en Málaga, «provocará que nuestros opositores tengan aún menos opciones», ya que intuye una avalancha de aspirantes de las regiones cercanas. «La gente está muy desesperada», reconoce.

Alonso comparte este diagnóstico. Durante su intervención, subrayó que la Junta es consciente de que este número de plazas no es suficiente para atender las necesidades de un sistema educativo como el andaluz que está en crecimiento, no da respuesta a los miles de profesores y opositores que desean trabajar en la escuela pública y que va a producir un efecto llamada a opositores de otras comunidades autónomas. No obstante, la Consejería está tomando las decisiones más beneficiosas para consolidar el empleo público en el sector educativo, a pesar de que sería deseable un volumen mayor de plazas.

Junto a esta «imposición» del Ministerio, el consejero destacó que la Junta se encontró, además, con una nueva limitación a la hora de encontrar alternativas para aumentar la oferta y es que el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2014 impide que las tasas de reposición de otros sectores que no se vayan a cubrir se unan para dar respuesta a otro sector con mayores necesidades, es decir, «para Educación solo se puede convocar una tasa de reposición del 10% de las plazas vacantes», aseguró.

Por parte de CCOO, la secretaria general de Enseñanza Pública, Yolanda Gamero, expresó también su contrariedad y señaló que se trata de una oferta de plazas insuficiente. «La actitud del consejero es servil y así consideramos que está siendo cómplice con las políticas educativas del Gobierno», acusó Gamero.

Recordó además que los interinos están obligados a presentarse a las oposiciones y a pagar las correspondientes tasas, que ascienden a unos 75 euros. «Es una estafa», dijo la representante de CCOO, que puso como ejemplo la bolsa de Matemáticas, «muy numerosa para sólo 50 plazas». «Esto es un ataque a la calidad de la educación pública», dijo.