Las asociaciones de mujeres mostraron ayer su indignación con la entrada, con doce diputados, de Vox en el Parlamento andaluz, una muestra de que «el patriarcado se rearma», y advirtieron al resto de partidos de que dirán no a la formación de ultraderecha pero también «a quien le acompañe».

Consultadas por Efe, las mujeres afirmaron que no solo supone un retroceso para ellas, sino también para los derechos civiles y las libertades públicas, tal y como alertó, asimismo, la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (Felgtb). La presidenta de Mujeres Juristas Themis, María Ángeles Jaime de Pablo, subrayó que la irrupción de Vox en el Parlamento andaluz «no es una buena noticia» y que ésta ha ocurrido porque en la sociedad aún existen creencias machistas.

Jaime de Pablo subrayó que la entrada de Vox obliga al resto de grupos parlamentarios a mostrar si se identifican con los postulados del partido de extrema derecha o si, por el contrario, «los niegan de plano».

«Desde luego, tomaremos buena nota de qué alianzas se forman entre el resto de grupos y partidos que teóricamente sí son combativos contra la violencia de género», señaló la presidenta de Themis.

Desde la Federación de Asociaciones de Mujeres Separadas y Divorciadas, su presidenta, Ana María Pérez del Campo, destacó que «las mujeres dirán no a Vox y a quien le acompañe» e hizo un llamamiento a la ciudadanía para que no vote a ningún partido que pacte con la formación de ultraderecha, porque significará tanto «como resucitar a Francisco Franco».

Las asociaciones de mujeres vienen anunciando desde hace mucho tiempo que se está retrocediendo «a pasos agigantados y ésta es la ultima demostración del retroceso; por lo tanto, se acabó la democracia porque el problema no solo es Vox, sino los que van a estar con Vox», consideró Pérez del Campo. Insistió en que es un partido «fascista, absolutamente xenófobo, machista», que se coloca en contra de todo «lo que huela a igualdad y democracia».

«El patriarcado se rearma», advirtió, por su parte, la presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro, quien explicó que los últimos años, con el avance de políticas de igualdad, se ha producido un contramovimiento al movimiento feminista. Desde su punto de vista, el sistema patriarcal reacciona «con virulencia» y, para sobrevivir, intenta «expulsar» todos los avance en materia de igualdad.

Besteiro también calificó de «gravísimo retroceso» la llegada de este partido de extrema derecha y recordó que en sus listas se encuentra el juez Francisco Serrano, «condenado por prevaricación y conocido por su misoginia».