El consejero de la Presidencia y portavoz de la Junta de Andalucía, Elías Bendodo, aclaró este viernes que la media de toda la comunidad andaluza es de «nivel 4» de alerta sanitaria y que, por eso, se han decretado el cierre perimetral y las restricciones de movilidad en las provincias y distritos sanitarios más afectados. Ahora bien, explicó que eso no significa que «toda la comunidad esté en nivel 4, pues hay zonas en las que se baja a los niveles 2 y 3 y las medidas adoptadas son distintas». Es decir, no llegan a ser tan restrictivas como en las provincias de Granada, Sevilla y Jaén o en distritos sanitarios concretos, como el malagueño de la Vega de Antequera.

Bendodo explicó que «el nivel 4, el de máxima gravedad, se establece cuando se superan los 250 casos positivos de coronavirus por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días».

La media andaluza ha rondado en el último tramo de esta semana los 400 positivos por cada 100.00 habitantes e incluso los ha superado, «de manera que la situación es preocupante y hay que tomar medidas». El consejero reclamó «al conjunto de los andaluces comprensión porque la situación es muy difícil, pero el Gobierno andaluz estará a la altura y va a seguir tomando las medidas necesarias para preservar la salud de los ciudadanos».

lgualmente, expuso que «las tres provincias que nos preocupan ahora mismo por la presión de los ingresos hospitalarios son Sevilla, Granada y Jaén, como en la primera ola nos preocupó Málaga».

Asimismo, Bendodo subrayó que el mapa de niveles en Andalucía «no se actualizará hasta el 9 de noviembre», por lo que «esa foto es fija» y en esa fecha se evaluará la evolución de la pandemia para decidir si se mantienen las medidas o se endurecen.

Para controlar las restricciones de movilidad se han establecido quinientos controles de tráfico en un despliegue coordinado entre la comunidad andaluza, Extremadura y Castilla la Mancha y con las policías locales que funcionó con normalidad, según explicaron fuentes de la delegación del Gobierno en Andalucía. También se llevaron a cabo controles en las estaciones de trenes y de autobuses para supervisar la llegada y la salida de viajeros.

Estos primeros controles para evitar viajes injustificados se llevaron a cabo también en la provincia de Málaga.

Desde primera hora de ayer, agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil establecieron dispositivos de vigilancia en las principales carreteras de acceso a la provincia, así como en la estación María Zambrano, el puerto y el aeropuerto.

Quien viaje está obligado a justificar el motivo de su desplazamiento, si no, será propuesto para una sanción administrativa. Solo es posible coger un tren si se va a trabajar, a una cita con el médico o a cuidar de personas al cargo.

Desde primera hora de la mañana, coincidiendo con la salida del primer AVE, se llevaron a cabo estos controles. El ambiente daba a mentender que, además de para el resto de regiones, el 51% de Andalucía está cerrada por culpa de la pandemia de coronavirus. Y esto motivó que se dieran todo tipo de situaciones en los primeros controles de seguridad tras la entrada en vigor de las medidas.