Sanidad

El Hospital de Benalmádena atiende 250 urgencias al día

El Sindicato Médico exige una reorganización de los profesionales, que se plantean renunciar a sus contratos

El Sindicato Médico denuncia el agotamiento de los facultativos. | L.O

El Sindicato Médico denuncia el agotamiento de los facultativos. | L.O / la opinión. málaga

La Opinión

El Sindicato Médico de Málaga (SMM) denunció ayer el agotamiento que sufren los médicos de Urgencias del Hospital de Alta Resolución de Benalmádena (HARE), que atienden entre 200 y 250 pacientes diarios en lo que va de verano, una situación que además ha desembocado en una demora asistencial para los ciudadanos.

«En verano de 2020, la sobrecarga de trabajo fue asumible y a principios de este año, viendo la baja asistencia, se decidió por parte de los gestores del centro hospitalario prescindir del refuerzo necesario de facultativos tanto de noche como de día a pesar de la apertura del perímetro y la presumible llegada en masa de más enfermos debido a la disminución de casos y el comienzo de la vacuna. Una medida que fue advertida por los facultativos», subraya el SMM. Los facultativos denuncian que en caso de incidencia en el área de consultas y de vacunación, «el facultativo de guardia debía acudir para asistencia urgente en caso necesario. Además, se ha observado que se mantenía el refuerzo de los demás estamentos de urgencias, lo cual no criticamos, pero no nos parece que el colectivo que lleve el peso de la asistencia esté infradotado con un desgaste continuo».

Por ello, el sindicato cree que «se gestionó tarde y mal» la contratación de facultativos para el verano; considera que «se intentó un proceso de selección quizá retrasado con la mayoría de los médicos ya contratados en otros centros y no se supo atraer ni incentivar a los futuros profesionales de urgencias que optaron por otras ofertas de trabajo temporalmente más cortas pero quizá más atractivas». Por tanto, el SMM exige una reorganización de los profesionales, que se encuentran «agotados» y se están planteando renunciar a los contratos en vigor o no renovar cuando llegue el momento.