Inauguración

Días de mar y letras: comienza la Feria del Libro

Hasta el 14 de noviembre, la Plaza de la Marina se estrena como sede de la cita literaria por excelencia de nuestra capital. Un nuevo emplazamiento en el que editores y libreros confían para generar un ambiente que atraiga a más y más lectores. La vuelta a la casi absoluta normalidad tras la pandemia del coronavirus pasa también por comprar libros en los 47 stands desplegados por la organización. Optimismo en el sector y ganas entre los clientes resumen las primeras sensaciones de la convocatoria, que celebra en esta edición más de cinco décadas de amor a las letras

Imagen de la primera jornada de la Feria del Libro, en la Plaza de la Marina; a la derecha, Cercas y Martín Cuenca, durante el pregón

Imagen de la primera jornada de la Feria del Libro, en la Plaza de la Marina; a la derecha, Cercas y Martín Cuenca, durante el pregón / ÁLEX ZEA

Arancha Tejero

La Feria del Libro de Málaga da el pistoletazo de salida y todas las miradas se sitúan en la Plaza de la Marina, el nuevo emplazamiento en el que tiene lugar, desde ayer, la cita más esperada del año por parte de los lectores malagueños. Hasta el 14 de noviembre, la Feria del Libro de Málaga planea celebrar su cincuenta aniversario por todo lo alto. El encuentro literario aterriza con un programa cargado de actividades para público de todas las edades, con presentaciones, performances y alrededor de 300 firmas de autores.

En su 50 edición, la Feria del Libro de Málaga apuesta por un nuevo escenario y se muda a la Plaza de la Marina con 47 casetas. La mayoría de libreros y editores han acogido con gran alegría la nueva ubicación pues consideran que es un gran acierto.

«Me parece genial el nuevo emplazamiento de la Feria del libro. Es mucho más acogedor e íntimo, que es lo que buscamos dentro de las librerías», opina Alejandro Martin, de Comic Store. Los responsables de las casetas coinciden en que la nueva localización es mucho mejor que la Plaza de la Merced (antigua ubicación), ya que esta es una zona de tránsito en la que todas las casetas tienen mayor visibilidad.

Durante la mañana de inauguración, se pudo apreciar un ambiente animado y, poco a poco, la plaza se fue llenando de lectores curiosos en busca de nuevas adquisiciones. María Dolores, que se define a sí misma como una ávida lectora, acudió para conocer al escritor Roberh Cagio, que estaba firmando en la caseta 5. Cerca estaba Antonio Gonzalez, que venía en busca del libro Málaga Tecnológica, de Fundación Málaga, esperando aprovechar el descuento para adquirir algunos títulos nuevos, al igual que la mayoría de visitantes de la Feria.

Días de mar y letras: comienza la Feria del Libro

Días de mar y letras: comienza la Feria del Libro / arancha tejero. málaga

Buen ambiente

El deseo y presentimiento de que se den bien las ventas es compartido entre los editores y libreros. La mayoría de ellos viene de las recientes ferias del libro de Granada, Sevilla o Torremolinos, en las que, en general, la gente ha respondido muy bien, por lo que esperan que la buena acogida se repita en Málaga. «Por ahora, parece que hay muy buen ambiente y ganas de Feria del Libro», afirmó Paco Torres, responsable de EDA Libros, quien, además, cree que la cercanía al Puerto animará el ambiente.

Tras haberse visto obligados a permanecer alejados de sus lectores durante los meses de cuarentena y a vivir una 49 edición muy reducida y marcada por el coronavirus, en la editorial malagueña, Jákara Editores, afirman estar muy emocionados por regresar a la Feria y poder volver a estar en contacto con todos sus clientes. Como ellos, otros tantos editores y libreros. Acérquense a ellos, que son sus días grandes.. Y saluden (y compren) a los responsables de Proteo, la librería que trata de levantar el vuelo tras el devastador incendio que sufrió hace unos meses.

Apoyar la lectura

«Málaga como ciudad debe aspirar a tener una feria del libro de las más importantes de España, y con el paso de este año nos acercamos un poco más», declaró el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, uno de los primeros lectores en pasearse por la Feria. Tras recordar que el libro debe acompañarnos siempre y que hay que dar el máximo apoyo a los creadores, se acercó a las casetas, saludando y charlando con los editores y libreros de los que recibió varios libros de regalo. De la Torre aseguró que le encanta la lectura, sobre todo los temas de Historia, pero que lamenta tener muy poco tiempo para leer lo que que realmente es de su devoción.

La Feria del Libro ya está inmersa en su año 50, y lo hace redoblando sus ambiciones: ha aumentado su presupuesto en un 32 por ciento. Ahora nos toca responder a nosotros, los lectores.