Málaga rebaja 6.747 parados en su mejor mayo y crea cerca de 10.000 empleos con el fin del estado de alarma

El fin del estado de alarma, el avance del proceso de vacunación y la progresiva reactivación del sector servicios han permitido a Málaga anotarse en mayo un notable descenso del paro, el tercero mensual consecutivo, y mirar al verano con ciertas esperanzas, pese a que la pandemia mantiene el desempleo en cifras todavía altísimas. La provincia registró el pasado mes una caída de 6.747 parados que deja el total en 192.268, según los datos publicados este miércoles por el Ministerio de Trabajo y Economía Social. Esta bajada es la más alta que se recuerda con la actual serie estadística para un mes de mayo (en años normales de buen ciclo económico suele ser estar entre los 5.000 y los 5.600) aunque también viene condicionada por el alto número de parados del que se viene por causa de la pandemia.

Málaga cuenta ahora con 1.524 parados más que a cierre de mayo de 2020, cuando se había comenzado la desescalada del primer estado de alarma y el desconfinamento de la población. Quizá la comparativa más adecuada sea con febrero de ese año, antes de que el Covid irrumpiera: el paro ha subido en 39.000 personas, es decir, que se mantiene un incremento del 25%. El actual nivel de desempleo es el más alto para un mes de mayo desde 2014, cuando se empezaba a dejar atrás lo peor de la anterior crisis económica.

La bajada del desempleo de este pasado mes estuvo centrada en el sector de los servicios, con 5.824 parados menos, seguido de la construcción (-319), la agricultura (-280) y la industria (-223). El colectivo de personas sin empleo anterior, que incluye a los jóvenes que buscan su primer trabajo, se incrementó en 101 desempleados.

La cifra de afiliados a la Seguridad Social, por su parte, subió en mayo en 9.977 personas, un aumento muy considerable que deja a Málaga con 612.259 cotizantes, según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. En relación a hace un año, el volumen aumenta en 29.304 (un 5% más), aunque teniendo en cuenta que los resultados de mayo de 2020 fueron pésimos por el impacto que dejaba en esos momentos la pandemia en el mercado laboral, con mucha actividad bajo mínimos. Cabe recordar que la provincia tenía en febrero del año pasado, antes del estallido de la pandemia, casi 620.000 empleos y que en mayo, tres meses después, se habían perdidos unos 38.000 afiliados, habiendo bajando a los 582.000.

Respecto a los afectados por ERTE, la cifra en Málaga se sitúa en 24.626 (unos 5.000 menos que el mes pasado), lo que confirma que las empresas continúan reincorporando en la medida de lo posible a trabajadores tras el fin del estado de alarma. Si en marzo eran 8.588 las empresas malagueñas con ERTE y en abril 7.044, ahora en mayo son 6.257.

En mayo se firmaron 54.886 contratos, cifra que duplica los 27.200 del mismo mes del año anterior, cuando el mercado de trabajo comenzaba a reactivarse tras el confinamiento. Sólo 4.353 de las altas de este pasado mes fueron indefinidas.

La secretaria de Empleo y Formación de CCOO de Málaga, María José Prados, ha celebrado la bajada del paro pero cree que la actividad económica en la provincia está viviendo una recuperación "muy lenta", y eso afecta principalmente a los trabajadores temporales.

"Su contratación está siendo pausada, y además las empresas siguen utilizando la reforma laboral para llevar a cabo modificaciones sustanciales de las condiciones de trabajo" afirma.

UGT, por su parte, ha recordado que hay 92.516 parados mayores de 45 años (un 47% del total) y 124.686 desempleados de larga duración.

"Si bien los datos mejoran no son suficientes, cada vez que se publican nuevos datos relativos a la evolución del sector turístico durante la pandemia, seguimos comprobando la debilidad del mercado laboral y recordando que el sector servicios general el 86% de los puestos de trabajo que se han recuperado este mes en la provincia", ha apuntado la secretaria de Empleo de UGT, Leonor Gálvez.

La Confederación de Empresarios de Málaga (CEM) cree que la mejoría del mercado de trabajo se debe a las perspectivas favorables de incremento de la actividad productiva por el fin del estado de alarma y la llegada del periodo estival.

"No obstante, la cifra de desempleados continúa siendo muy alta, y se debe tener también en cuenta el alto número de empresas y trabajadores afectados por los ERTE", ha reconocido la patronal.