Universidad

Ciencias de la Educación, compromiso con una formación humanística e innovadora

La apuesta por metodologías innovadoras conllevará la próxima creación de un aula experimental y otra exterior - La oferta académica se ampliará con el grado en ciencias de la actividad física y del deporte en el curso 2022-2023

Vestíbulo de la Facultad de Ciencias de la Educación.

Vestíbulo de la Facultad de Ciencias de la Educación. / L. O.

La educación es una de las principales preocupaciones para la sociedad, consciente de que el futuro depende de la formación desde los primeros años. Por ello, el interés por estos estudios no deja de aumentar y en este contexto la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Málaga se encuentro en un momento de crecimiento, tanto en la demanda por parte de los estudiantes como en una oferta académica y metodológica marcada por la innovación e incluso en una expansión física, al estar a un paso de dejar de compartir edificio con Psicología y Logopedia. Un impulso que no pierde de vista el priorizar la «vertiente humanística» de las titulaciones de grado y posgrado, como apunta la decana, Rosario Gutiérrez Pérez.

Una imagen del exterior de la facultad de Ciencias de la Educación.

Una imagen del exterior de la facultad de Ciencias de la Educación. / L. O.

«Hemos trabajado con ahínco en la formación que requieren nuestros estudiantes como futuros profesionales de la educación y, además, siempre pensando que lo más importante era y es formar personas», afirma Gutiérrez como balance de su primer mandato como decana y ya en su quinto curso al frente del equipo de gobierno tras haber sido reelegida.

De sus primeros cuatro años destaca, en el ámbito de la Ordenación Académica, la puesta en marcha de dos nuevas menciones -una en Audición y Lenguaje y otra en Lengua extranjera: francés-, que amplían la oferta formativa en el grado de Educación Primaria.

Educación dejará pronto de compartir espacio con Psicología.

Educación dejará pronto de compartir espacio con Psicología. / L. O.

Por otra parte, se ha organizado un grupo ‘pasarela’ para facilitar los estudios al alumnado que proviene del ciclo de técnico superior en Educación Infantil de FP y que quiere acceder al grado.

En el ámbito curricular, la Facultad de Ciencias de la Educación ha apostado como otras por los dobles grados y ofrece, junto a la Facultad de Filosofía y Letras, el de Educación Primaria y Estudios Ingleses, «que está ampliando las competencias y el horizonte profesional de nuestros egresados», afirma la decana confirmando que después de dos cursos de implantación está funcionando muy bien.

Otra de las grandes novedades de Ciencias de la Educación será el nuevo grado en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte, cuya puesta en marcha será en el curso 2022-2023 tras haberse aplazado a la espera de contar con la autorización definitiva por parte de la Junta, informa la decana y doctora en Ciencias de la Educación.

«Se trata de un grado que nace con una vocación europea, que apuesta por la internacionalización de los estudios y pretende atender necesidades emergentes de la sociedad como son los estilos de vida saludables», indica de estos estudios «muy demandados».

En cuanto a la oferta de posgrado, también es muy significativa y tiene una «altísima demanda». Entre ellos está el Máster en Políticas y Prácticas de Innovación Educativa. Además, Rosario Gutiérrez subraya el Máster en Psicopedagogía, que en su tercer curso de implantación «cubre un espacio formativo importante, no solo para los egresados de Ciencias de la Educación, sino también para los de Psicología y Logopedia». Cuando las posibilidades económicas lo permitan, ampliarán el catálogo de posgrado en ámbitos «sensibles» y de «gran interés» para el alumnado como la tecnología educativa.

Toda esta formación viene avalada por la calidad de los docentes, que se ha reforzado estos años con la coordinación entre el personal docente investigador (PDI) con una convocatoria para el desarrollo de proyectos de trabajo innovadores en los que prima la colaboración. Igualmente, se ha conseguido renovar con éxito todos los títulos de grado y máster.

Las metodologías docentes están así muy marcadas por la innovación y dirigidas a hacer a los alumnos «protagonistas de su propio aprendizaje». Además, Ciencias de la Educación busca «fomentar la autonomía profesional de nuestros egresados y su capacidad para la toma de decisiones, la investigación y la resolución de problemas», detalla Gutiérrez.

En este sentido, la clave es una teoría que sirve como «herramienta para diseñar la práctica» y se apuesta por establecer «periodos de alternancia entre la universidad y la escuela» y «contar con una red estable de centros de prácticas».

En un curso marcado por la pandemia, la decana destaca que las prácticas se han podido desarrollar «con total normalidad» y pone el acento en la colaboración de la Delegación de Educación, los centros, las demás entidades participantes y los tutores.

En cuanto a la labor investigadora, Ciencias de la Educación cuenta con 20 grupos de perfiles variados y ha crecido con la creación del Instituto de Investigación en Formación del Profesorado.

Aulas al servicio de los métodos

El crecimiento de estos estudios podrá visualizarse pronto también físicamente con el traslado de Psicología y Logopedia a su nuevo edificio. Además de acondicionar las aulas que quedarán libres, el decanato apuesta por crear nuevos espacios entre los que destaca el diseño y construcción de un «aula experimental». Además, en colaboración con el Vicerrectorado de Smart Campus, se hará un aula exterior con un huerto escolar y espacios docentes. Todo al servicio de las metodologías innovadoras que se aplican en las aulas, por las que se han transformado ya clases para hacerlas «más amables y coherentes» en este sentido.

Igualmente, se han ampliado la Biblioteca y el espacio del Servicio de Atención e Información al Usuario, gracias a Smart Campus.

Como el resto de facultades, en Ciencias de la Educación este curso se ha ido pasando de la actividad semipresencial a la online y viceversa en función de la incidencia del Covid-19. Sin embargo, «hemos hecho de la necesidad virtud y hemos crecido como facultad en todos los sentidos», afirma Rosario Gutiérrez destacando el trabajo de docentes, estudiantes y personal de administración y servicios.

Una implicación que evidencia el compromiso con la formación de los futuros docentes, tras entender que la educación se ha «revalorizado» a ojos de la ciudadanía. A lo que se une la vocación, el interés por «mejorar la vida de las personas» y el «perfil crítico» de los estudiantes que acceden a todos los grados.