Reconocimiento

Málaga se une a la petición para premiar a los niños por la pandemia

Docentes malagueños y rostros conocidos apoyan la campaña del profesor Francisco Cid para que se conceda a los menores el Premio Princesa de Asturias de la Concordia 2022

Alumnos de Infantil en la escuela rural El Peñón de Alhaurín de la Torre.

Alumnos de Infantil en la escuela rural El Peñón de Alhaurín de la Torre. / L. O.

El objetivo es ambicioso pero ellos se lo merecen. Así opina la maestra de Infantil Sonia Rubio, promotora en Málaga de la petición para que se conceda el premio Princesa de Asturias de la Concordia 2022 a los niños y niñas de todo el mundo por ser los «héroes anónimos» durante la pandemia.

La iniciativa partió a finales del curso pasado de la mano del profesor y escritor gaditano Francisco Cid Fornell, que creó una petición en la plataforma Change.org para recoger firmas y ya ha sumado a docentes de toda España y tiene el apoyo de numerosos rostros conocidos que, como él, creen que «hay que devolver a la infancia el lugar que merece».

Para contextualizar la petición, este maestro y defensor de la infancia alude a un estudio de Save of Children que indica que «1 de 4 niños sufre o ha padecido un estado de angustia y ansiedad severo debido a la pandemia», «cifras similares a lo que acontece en lugares con conflicto bélico». Además, apunta que la fundación ANAR ha comunicado que durante el confinamiento en el hogar, el número de llamadas de menores maltratados pidiendo auxilio se duplicó.

Pese a haberles «robado» la infancia al impedirles jugar en los parques, ver a sus abuelos y acudir al colegio presencialmente durante varios meses, Francisco Cid cree que hay que aplaudir a los menores por haber aguantado estoicamente, muchas veces incluso mejor que los mayores.

Y recuerda también como volvieron a las clases presenciales con mascarillas, ventanas abiertas pese al frío o el calor, «zonas delimitadas en los patios como si de presos se tratasen» y sin poder tocarse y jugar con libertad, algo fundamental en la infancia.

Su petición va camino de las 1.000 firmas pero sobre todo está recibiendo el apoyo de muchos profesores como la malagueña Sonia Rubio que están haciendo campaña en sus respectivas provincias. «Se están perdiendo muchas cosas que se viven en la infancia que solo pasan en esas edades y ya no se recuperan. Se ha perdido el abrazo. Los niños pequeños necesitan el abrazo en el colegio pero ellos mismos me dicen que no se pueden dar besos. Son así de responsables», explica esta maestra de Infantil de la escuela rural El Peñón de la Fundación Victoria.

Asegura que cuando volvieron a las aulas tras el confinamiento duro de los primeros meses de pandemia, lo que más les preocupaba a los docentes «era como vendrían a nivel emocional». Y se encontraron una sorpresa, la ilusión por regresar a las aulas fue mayor que el miedo.

El desarrollo del curso pasado demostró igualmente la responsabilidad de todos con un índice de contagios en los colegios muchísimo menor del esperado. «Se han hecho las cosas muy bien en el cole, se han cumplido las entradas, las salidas, los grupos burbuja, las mascarillas...», explica esta maestra que es la coordinadora Covid en su centro.

Campaña en Málaga

Además de buscar el apoyo de otros compañeros malagueños, Sonia está inundando los comercios y negocios malagueños con carteles con la petición al Premio Princesa de Asturias de que incluyen un código QR para firmarla.

No obstante, las redes sociales están siendo claves para difundir la propuesta. En Facebook se ha creado la página ‘Premio Princesa de Asturias para los niños y niñas’ donde tanto docentes como rostros conocidos y anónimos o instituciones están dejando muestras de apoyo. En clave malagueña, el actor Antonio de la Torre ha sido uno de los últimos en respaldar la candidatura, que cuenta también con el periodista Domi del Postigo.

Igualmente, la iniciativa tiene ya su propio canal de YouTube y vídeos de apoyo en TikTok.

Ahora queda todo un curso por delante, no sólo para volver a demostrar que los colegios son seguros por la responsabilidad de los menores, sino también para seguir recogiendo apoyos y que el Princesa de Asturias de la Concordia sea para ellos.