Desayunos de La Opinión

Infraestructuras de Málaga y provincia: una radiografía con luces y sombras

Representantes institucionales, miembros de ayuntamientos de la provincia y cargos del staff de la constructora malagueña Sando acudieron a la llamada de La Opinión de Málaga para debatir sobre el estado real de las infraestructuras de la provincia. Los participantes coincidieron en subrayar la importancia de la planificación y la dificultad burocrática que supone, en muchos casos, llevarlas a ejecución

Invitados al desayuno de La Opinión.

Invitados al desayuno de La Opinión. / Álex Zea

Si hay algo que marca el progreso de un municipio, de una comarca, de una provincia, de una comunidad autónoma y un país, estamos hablando de infraestructuras. La infraestructura y el desarrollo económico de un país son aspectos que se vinculan directamente y tienen como objetivo una mejora para la sociedad y el progreso de la misma. Las infraestructuras son un elemento esencial para que la economía pueda aspirar a tasas de crecimiento más elevadas gracias a que a través de ellas se pueden transportar bienes y servicios que favorecen a personas y empresas.

La Opinión de Málaga reunió el pasado lunes 13 de diciembre a siete expertos que analizaron, entre otros aspectos, el estado actual de las infraestructuras en Málaga y provincia; sus fortalezas y debilidades; las dificultades administrativas a la hora de ejecutarlas; las nuevas obras basadas en conceptos más sostenibles; el papel de los ayuntamientos en la gestión de las mismas y los retos que se otean en un futuro a corto y medio plazo.

Intervinieron en el debate Carmen Casero Navarro, delegada territorial de Fomento, Infraestructuras, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico en Málaga de la Junta de Andalucía; Jaime Rodríguez Donelly, director general de construcción de Sando; Miguel Ángel Jiménez, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Rincón de la Victoria; Jesús Rojo González, director de la zona Sur de Sando; José Carlos Martín Torres, concejal de Obras e Infraestructuras del Ayuntamiento de Mijas; Jesús Sánchez Bueno, teniente de alcalde de Urbanismo y Vivienda del Ayuntamiento de Torrox y Enrique Delgado, jefe de estudios del área de conservación de Sando.

Los invitados hicieron un repaso en primera instancia de las fortalezas y debilidades en las infraestructuras de Málaga y provincia. El aeropuerto malagueño, el puerto de la ciudad, la red de Metro, el AVE y algunas carreteras salieron a la palestra como grandes aciertos en los últimos años. Para José Carlos Martín Torres, concejal de Obras e Infraestructuras del Ayuntamiento de Mijas, «Málaga tiene el aeropuerto, que es la joya de las infraestructuras malagueñas. Se planificó bien la segunda pista y es un motor fundamental en nuestra economía y el puerto cada vez tiene más peso y valor».

A los aciertos de la segunda pista del Aeropuerto, el Puerto de Málaga o la hiperronda hay que unir los «eternos problemas» en el saneamiento integral, la escasa inversión en recursos hídricos y en el tren litoral por la costa

La red de carreteras, a pesar del gran esfuerzo que se ha hecho en los últimos años, empieza a dar síntomas de agotamiento. «La A-7 lleva mucho tiempo sin recibir inversión. En Rincón tenemos reuniones pendientes sobre la Vía Perimetral que aliviaría las zonas este y oeste de la provincia», comentó Miguel Ángel Jiménez, concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de la localidad axárquica.

Jesús Rojo, director de la Zona Sur de Sando, valorizó el trabajo de la constructora malagueña en el último medio siglo e insistió en la idea de que algunas infraestructuras vitales de la provincia empiezan a colapsar porque fueron construidas ya hace décadas, por lo que se hace ineludible «que las infraestructuras del futuro se vayan planificando ya». Rojo apostó por mejorar las conexiones ferroviarias, a las que otorgó mucha importancia en el futuro desarrollo de la provincia.

Jesús Sánchez Bueno, concejal de Torrox, llevó el discurso hacia los recursos hídricos ante la prolongada sequía que se está padeciendo. «El agua es un problema muy serio, sobre todo en la zona de La Axarquía. El pantano de La Viñuela es insuficiente a todas luces para el consumo humano y para abastecer los riegos de los campos de aguacates y mango». Sánchez Bueno propuso la idea de conectar los distintos embalses de la provincia de Málaga con los de otras zonas como el Campo de Gibraltar o los de la sierra sur de Sierra Nevada para aumentar los recursos hídricos.

«Hay un problema importante de planificación de las infraestructuras», así de rotundo se mostró Jaime Rodríguez Donelly, director general de construcción de Sando, quien citó la construcción de la segunda pista del Aeropuerto de Málaga y la hiperronda como «ejemplos de planificación». Además, Martínez Donelly abogó por separar radicalmente «el debate político de la planificación de las diferentes infraestructuras». El director general de Sando también se mostró «muy preocupado» por la inexistencia de partidas presupuestarias para mejorar las obras hidráulicas de la Costa malagueña, polo de atración turística de millones de personas.

Enrique Delgado, jefe de estudios del Área de conservación de Sando, hizo hincapié precisamente en la conservación de las infraestructuras. «Es importante que se hagan -indicó- pero las que tenemos hay que conservarlas, y ese dinero, que hace mucha falta, nunca cala en la ciudadanía y tampoco luce políticamente».

El segundo bloque a debate trató la excesiva burocratización para poder llevar a cabo las diferentes obras y los sectores que necesitan más inversión. Carmen Casero, delegada territorial de Fomento, Infraestructuras, Ordenación del Territorio, Cultura y Patrimonio Histórico en Málaga de la Junta de Andalucía, tomó la palabra para indicar que «las grandes infraestructuras son complejas en la tramitación administrativa ya que llegan a tardar varios años». Para Casero, « la tramitación no tiene sesgo político» e indicó que cuando el Partido Popular se incorporó al gobierno, «tuvimos que rescindir contratos y replanificar y actualizar proyectos y eso lleva tiempo». Para Casero, la clave, ahora que están a punto de llegar los Fondos Next Generation, «está en redactar proyectos para poder captar esos fondos europeos». Por último, la delegada señaló la movilidad y el saneamiento como «los dos sectores que necesitan más inversión».

El exceso de informes de las diferentes áreas, los conflictos competenciales entre las instituciones, los «eternos plazos» en licitaciones y dotaciones presupuestarias ralentizan un sistema, que, según Jaime Rodríguez, «exige un profundo cambio de modelo de gestión». Jesús Sanchez, el edil torroxeño, cree que «si hay voluntad política del organismo que tiene la potestad de ejecutar la infraestructura, esta se puede llevar a cabo», y citó el caso reciente del espigón de Torrox.

El concejal mijeño José Carlos Martín Torres subrayó el estado crítico de las infraestructuras de saneamiento y transporte de agua: «La infraestructura está colapsada, ni se transporta ni se depura agua ni hay recursos hídricos. Los acuíferos están esquilmados. El abastecimiento de agua es el mayor problema si miramos al turismo».

La delegada de Fomento se mostró esperanzada en que la LISTA (Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía) «va a ser una herramienta fundamental para el desarrollo de los municipios. Habrá que reordenar los PGOU de muchos sitios porque es en ellos donde se generan las grandes infraestructuras».

La licitación electrónica ha sido para Enrique Delgado «un gran acierto» porque ha traído agilización a la tramitación de los proyectos

Por último, en referencia a este tema, Jesús Rojo, de Sando, indicó que Málaga, por su particular orografía, «necesita más que nunca el consenso entre administraciones para ejecutar unas infraestructuras que deben ser incluidas en una planificación global que contengan todos los sectores».

Tras el análisis, llegó el momento de las conclusiones. Para Jaime Rodríguez, se hace necesario más que nunca la figura de los Project Manager en cada uno de los proyectos para que no se diluyan en el tiempo. Unos proyectos que han de ser planificados «sin tener en cuenta los diferentes ciclos políticos». Rodríguez abogó por hacer servicios «de primera» para una ciudadanía a la que hay que educar para que no caigan «en debates estériles sobre si son caras o baratas las infraestructuras».

Para Miguel Ángel Jiménez, será muy importante el papel de la digitalización, la economía circular y la sostenibilidad en los futuros proyectos, «es la línea que nos impone Europa y la estrategia debe pasar por la redacción de muchos proyectos para optar a captar esos fondos», concluyó.

Jose Carlos Martín Torres se mostró contundente en sus conclusiones: «Hay que cambiar el modelo. Todas las administraciones tenemos que participar en diseñar uno nuevo, porque el actual se ha quedado completamente obsoleto», indicó. Por su parte, Enrique Delgado y Jesús Rojo siguieron optando por la conservación de las infraestructuras como clave para el futuro. Para Delgado, «hay que apostar por la digitalización para detectar los problemas antes; hay que fomentar un mantenimiento preventivo y no correctivo, que es mucho más caro». Por su parte, Rojo incidió en un «mantenimiento sostenible» para alargar la vida de las infraestructuras.

Problemas que se mantienen en el tiempo

Los participantes en el desayuno coincidieron en señalar la importancia de que haya una buena movilidad y conexión ferroviaria no solo para el presente sino también para el futuro. La infraestructura ferroviaria de Málaga no está acorde con el potencial económico que desarrolla la provincia. Las carencias están ahí desde hace muchos años.

Vertebrar la provincia por carretera también es fundamental. Hay que hacer un esfuerzo importante en el mantenimiento de las carreteras porque ya están dando claros síntomas de agotamiento sobre todo en época estival.

Las depuradoras funcionan bien en invierno y mal en verano, cuando las poblaciones costeras sufren los mayores aumentos de de población (las depuradoras se desbordan y una de las consecuencias son playas de nata y de suciedad). Adaptar la depuradora a ese periodo es difícil y muy costoso.