Espectáculo

'Castañuelas rosas', un espectáculo flamenco para mujeres con cáncer y enfermedades crónicas

El proyecto de la Fundación El Pimpi pretende utilizar el folclore como instrumento de ayuda para mejorar la salud física y emocional de sus 30 alumnas

Ángela Téllez

La Fundación El Pimpi ha puesto en marcha el proyecto 'Castañuelas rosas', para ayudar a mujeres con cáncer y fibromialgia a recuperar la alegría después de que les detecten estas enfermedades. Desde la Fundación 'El Pimpi', Luis Merino, comenta que "en su afán por perpetuar y proteger nuestras tradiciones como la danza española hemos pensado en realizar este proyecto". Además, asegura que quieren "ayudar a la cultura como acto de solidaridad para buscar la sonrisa, que es lo que nos hace mejorar como personas".

Las enfermedades crónicas como el cáncer, la fibromialgia, el lupus o el párkinson limitan la vida de las personas en la mayoría de los caos por el gran dolor que sufren las personas que las padecen. Además, dificultan la posibilidad de seguir realizando actividades cotidianas, lo que causa en la mayoría de los casos, pérdida de la alegría y el autoestima. Alicia Vicario, la cual está diagnosticada de fibromialgia, ha sido la encargada de llevar este proyecto a cabo. Es licenciada en pedagogía de la danza española y el flamenco y es miembro del consejo internacional de la danza Unesco, lo que hace que pueda transmitir sus conocimientos de manera muy cercana a las alumnas.

"Llevan 2 meses preparando esto y nunca he visto personas con tanta ilusión y tantas ganas", contaba Alicia. "Pensé en ellas porque cuando a una persona le detectan una enfermedad y su vida pega un parón hay dos camino: hundirte o sacar fuerza de donde no la hay. Y esa fuerza la demuestran día a día".

"Estoy emocionada desde que fui a veros y solo en dos semanas habían logrado muchísimo", decía Rocío González, gerente de la Fundación. "En un solo fin de semana se llenaron las plazas y fue increíble. No nos esperábamos esto ni que hubiese tanta necesidad. Hemos creado un proyecto muy bonito".

La escuela ha tenido el apoyo de asociaciones como la Asociación Española contra el Cáncer de Málaga (AECC), la Asociación de atención a las mujeres operadas de cáncer (ASAMMA) y APAFIMA, la Asociación de pacientes de fibromialgia y síndrome de fatiga crónica de Málaga.

"Gracias por hacerme vivir y sentirme participe de proyectos como este", decía Jesús Gutiérrez, director de SANAMAR. "Estamos orgulloso de SANAMAR porque es rentable y porque tratan bien a sus personas y trabajadores". "Sois un ejemplo de vida y de que a veces, aunque no controlemos lo que nos pasa, sí que podemos elegir como afrontarlo", decía dirigiéndose a las alumnas de la escuela.

La escuela está totalmente adaptada al ritmo de las alumnas y desarrolla su actividad en el espacio que el Ayuntamiento de Málaga les ha cedido a través de Teresa Porras, ensayando durante dos días a la semana en el Edificio Rafael González, en el barrio de Carranque. Explica que "siempre han podido contar con ella y ahora con más motivo aún".

"Hay mucho arte de ese que se lleva dentro y que es innato. Estoy encantada y orgullosa de este proyecto", afirma Teresa Porras. "Cuando me comentaron este proyecto siempre me ha gustado apoyar este tipo de enfermedades y esto da vida a la gente que por su enfermedad no quiere o no puede salir a la calle", concluye.