Memorias de Málaga

El Cine Moderno y el Excélsior

Los cines se encontraban en la calle Juan de Austria y en Cristo de la Epidemia, respectivamente. El Moderno abrió sus puertas en 1913 y cerró el último día de 1968. El Excélsior se inauguró en 1932 y se clausuró en 1969

El Cine Moderno estaba en la calle Juan de Austria.

El Cine Moderno estaba en la calle Juan de Austria. / L. O.

Guillermo Jiménez Smerdou

Guillermo Jiménez Smerdou

Hoy, en la serie dedicada a los cines de Málaga desaparecidos, toca contar algo de dos locales que no merecieron el calificativo malagueño de ‘cine de barrio’, aunque estuvieran ubicados en dos barrios, en La Trinidad (en la calle Juan de Austria) y Capuchinos (en la calle Cristo de la Epidemia). Me refiero al Moderno y al Excélsior, respectivamente.

Con respecto al primero, recordar que fue uno de los primeros que se inauguró en Málaga. Abrió sus puertas en marzo de 1913. Seguramente de ahí viene la elección de Moderno, porque todavía no se habían construido ni el Victoria, ni el Petit Palais, ni el Goya, ni el Echegaray… ni otros que poblaron nuestra ciudad de locales para la proyección de películas. Cuando se inauguró el Moderno en la calle Juan de Austria, los locales que alternaban las funciones de teatro, películas y variedades eran el Principal, Cervantes, Lara y Vital Aza.

El único dedicado a cine era el famoso Pascualini en la calle Córdoba, que entonces se denominaba Carlos Haes, en memoria del pintor belga que a la edad de nueve años se instaló en Málaga, donde se educó. (La costumbre de cambiar los nombres de las calles de Málaga no es de ahora. La primera denominación de la actual calle Córdoba fue avenida de Carlos Haes. Por qué se cambió el nombre no lo sé. Estará en algún libro de Paco Percheles o Domingo Mérida).

María Pepa Lara, en sus documentados libros sobre los cines de Málaga, relata la historia de su construcción, arquitecto, empresarios, incendio, cierre por falta de rentabilidad, reapertura en 1930 y 1932 respectivamente, funcionamiento, precios de las localidades, varietés… incluso su conversión en cine sonoro.

El Cine moderno y el excélsior

El cine Excélsior, en la calle Cristo de la Epidemia. / Guillermo Jiménez Smerdou

Películas y estrenos

Empecé a frecuentar el Moderno en 1945, cuatro años antes de ingresar en Radio Nacional. Iba a ver películas de cierto rango o interés para mi formación cinematográfica. De ese período recuerdo, entre otras, ‘Pánico en la banca’, ‘Boda en el infierno’, ‘La espía número 13’, ‘Abandono’, ‘El expreso de Bucarest’ y dos españolas clásicas, como ‘La aldea maldita’ y ‘Don Juan Tenorio’. Entre 1947 y 1949, ‘La aventurera del piso de arriba’, italiana, las norteamericanas ‘Plaga mortal’ y ‘El crimen secreto’, y ‘La muralla invisible’, una de las pocas películas suecas que llegaban a España y que fue la primera que vi de esta procedencia.

A partir de 1949 fui como crítico de cine a ver las películas de estreno que no tuvieron cabida en la programación de los cines del Centro por el exceso de oferta. La primera fue ‘La montaña misteriosa’, en dos episodios. En 1950 se estrenaron ‘El mercado de esclavas’ y ‘La puerta del cielo’, ambas italianas, y en 1951, por sorpresa, se proyectó por primera vez en Málaga una de las mejores películas del cine francés, rodada en 1947, y que aparece entre los títulos más celebrados de la época. Los empresarios de los cines del Centro la dejaron escapar; curiosamente en el título de la película aparecía el verbo escapar: ‘Se escapó la suerte’, dirigida por Jacques Becker.

Jacques Becker figura entre los más destacados realizadores franceses, y su película ‘Se escapó la suerte’, está en algunas antologías. Por cierto, que convencí a mi compañero de crítica cine en el diario Sur (Juan Antonio Rando) a que fuera a verla, porque él se limitaba a los estrenos del Goya, Echegaray y otras salas de estreno.

Me agradeció el consejo porque fue al Moderno, la vio y le gustó.

Aunque el Moderno no era un cine de estreno, a las citadas en los párrafos anteriores, agrego ‘La sombra iluminada’, española de 1952; ‘La tienda de antigüedades’, de 1953. Dos películas en 1954, una en 1955, tres en 1958… El Moderno cerró sus puertas el 31 de diciembre de 1968; según María Pepa Lara, con las películas ‘Rebelión apache’ y ‘Siete espías en la trampa’.

El Cine moderno y el excélsior

El Cine moderno y el excélsior / Guillermo Jiménez Smerdou

El Excélsior

La historia del cine Excélsior es curiosa, y la primera curiosidad fue la elección del nombre: Excélsior. Es algo así como sublime, exquisito… Mucho para un cinematógrafo. Quizás tras el nombre del promotor del proyecto y primer propietario esté la justificación de tan rimbombante nombre. Fue construido por encargo de don Antonio Ahumada y Quero, marqués de Ahumada.

María Pepa Lara (Historia de los cines de Málaga, página 127) reproduce el anuncio que apareció en el periódico de Málaga El Cronista: «Excélsior. Cine sonoro. El más amplio salón de Málaga. Hoy inauguración con la grandiosa producción de estreno en Málaga, ‘Nacida para amar’, suprema creación de Constance Bennet. Desde las 5 de la tarde. Tranvías y autobuses continuamente». La inauguración fue el 29 de septiembre de 1932.

No tengo datos de los posibles estrenos que el Excélsior ofreciera en el curso de los meses siguientes.

Pese a la espectacular inauguración, los asientos eran de madera. El Echegaray, inaugurado el mismo año, ya disponía de asientos tapizados. Como espectador, la primera película que vi en el nuevo cine fue en 1944, inglesa, titulada ‘Usted recordará’.

Acudí algunas veces para ver las películas de reestreno, como ‘Vidas cruzadas’, ‘A las 9 lección de química’ (fue el descubrimiento de la actriz italiana Alida Valli, protagonista de numerosas películas en Italia y España), ‘La rueda de la vida’, ‘Eloísa está debajo de un almendro’…

Entre 1944 y 1969, año en que cerró, no estrenó ninguna película, solo reposiciones. El cierre fue con la cinta ‘Emboscada a Matt Helm’, protagonizada por Dean Martin.

Cinema del soldado

Aunque María Pepa Lara lo cuenta con la estupenda documentación que ha utilizado en sus libros dedicados a los cines de Málaga, la conversión del Excélsior en 1937 en Cinema del Soldado la recuerdo muy bien, porque fue un acontecimiento en la vida malagueña de entonces.

El cambio provisional de nombre se produjo porque el propietario (entonces el marqués de Montealto), decidió unirse al bando nacional de la Guerra Civil (1936-1939) facilitando la entrada gratuita a los soldados. Los niños de entonces (yo era uno de ellos) queríamos ser soldados para ir gratis al cine.

Canción española y flamenco

Como el negocio cinematográfico no iba muy bien, el Excélsior se convirtió en teatro, no para representaciones de comedias y dramas, sino para ofrecer al público espectáculos de flamenco y cancionero español. A las figuras de la época, como Manolo Caracol, Pepe Pinto y otros famosos del género, se unieron otros más modestos. Todas las jóvenes malagueñas que tenían posibilidades de triunfar en el género de la canción española y el baile tuvieron su oportunidad en el escenario del Excélsior, que permitió a las aspirantes ingresar en el mundo de la farándula a darse a conocer. En estos años (nunca fui a los citados espectáculos porque el cine y la radio ocupaban todo mi tiempo), el cine alternó la proyección de películas de reestreno y los citados espectáculos. Como apunté en anteriores líneas, el 27 de abril de 1969 el Excélsior cerró sus puertas.