Málaga pide al Gobierno un año más para desplegar la Zona de Bajas Emisiones

El Ayuntamiento de Málaga ha pedido al Gobierno, en concreto al Ministerio para la Transición Ecológica, una prórroga de un año para el despliegue de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE), una restricción al tráfico contaminante que, según la Ley de Cambio Climático, tenía que haberse implantado "antes de 2023" en las ciudades de más de 50.000 habitantes.

El consistorio argumenta la petición de esta moratoria a un retraso en la recepción de los materiales necesarios para el despliegue técnico de esta limitación de la circulación de vehículos contaminantes, según fuentes municipales, debido a la "gran demanda de todas las ciudades obligadas a implementar la ZBE", por lo que la empresa adjudicataria está buscando ya nuevos proveedores.

Ese retraso en los envíos de materiales afectan principalmente a la iluminación de las cámaras para la lectura de matrículas, lo que impide que se desarrollen las pruebas y ensayos pertinentes de la plataforma de software desarrollada y que gestionara la ZBE. "Asimismo, los trabajos de obra civil previstos inicialmente se han visto alterados por la necesidad de modificar y ampliar las instalaciones previamente existentes cuyo uso y mejora son necesarios para la correcta implementación de las nuevas instalaciones de elementos de control de acceso y comunicación con el centro de procesamiento de datos".

Aluden también a la dilación en el "desarrollo de los ficheros definitivos de datos necesarios de otros organismos, como la DGT", que ha generado un retraso en el desarrollo del software.

Así, el ayuntamiento defiende que la prórroga obedece a "causas ajenas" aunque al mismo tiempo reconoce que no está cerrada la normativa jurídica que regulará la ZBE, en base al reglamento aprobado por Transición Ecológica en diciembre de 2022. El próximo trámite que, aseguran, iniciarán de forma "inminente" es el período de participación ciudadana.

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Hasta diciembre de 2024

Por otro lado, el Ayuntamiento de Málaga considera que sí cumple y está dentro del plazo que recoge la Ley de Cambio Climático porque aprobó su Plan de Movilidad Urbana Sostenible en junio de 2021 y en él ya se recogía la necesidad de crear una Zona de Bajas Emisiones.

En cualquier caso, el consistorio ha solicitado una ampliación del contrato hasta el 31 de diciembre de 2024, aunque sostiene que no agotará este nuevo plazo, ya que los trabajos se encuentran ejecutados al 80%.

El contrato incluye, entre otros aspectos, la ampliación de los controles de acceso, la gestión de eventos con colaboración entre entidades o el análisis del tráfico en base a matrices de origen y destino.