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Sin fuerzas ni fortuna (1-0)

El Málaga dio la cara en Butarque, los pepineros se jugaban el play off y en el minuto 87 cerraron el partido con gol de Ibáñez

Mar Bianchi

Mar Bianchi

Ni las piernas ni la cabeza dan para más. El fin de temporada se le está haciendo eterno a un Málaga que encadena siete jornadas sin ganar y que visitaba a un Leganés que necesitaba sumar de tres para certificar su clasificación a la liguilla de ascenso. Dieron la cara los malaguistas, pero es complicado sacar de donde ya nos queda.

Sin Pellicer en el banquillo, pero con Manolo Sánchez con hilo directo con el de Nules, un Málaga sin presión pero con ambición salió en Butarque con ganas de llevar la iniciativa. Querían el balón los blanquiazules y en el arranque lo tuvieron, tanto que en el primer minuto de partido Jozabed tuvo una acción clarísima de gol, Yanis descargó el esférico y lo recogió el sevillano para rematar desde la frontal. Por unos centímetros, el disparo se marchó por el poste. Muy diferente era la situación para los de Asier Garitano, obligados a puntuar para asentarse en los puestos de play off

Pero los malacitanos salieron a hacer su partido, decididos y presionando. Jairo y Jozabed aportaban movilidad y verticalidad, aunque poco a poco fueron perdiendo fuelle y protagonismo. 

El Leganés empezó a ser superior y a desesquilibrar el partido por las bandas, teniendo alguna que opción peligrosa. En esos momentos, los malacitanos supieron responder con firmeza defensiva, bien posicionados y tapando huecos. Los madrileños tenían más que perder que el Málaga y ese nerviosismo empezó a notarse conforme iba corriendo el cronómetro, e incluso Erasco llegó a cometer una falta en ataque sobre Juande por ese afán de ganar metros hacia la portería de Juan Soriano. 

Al Málaga le quedó alguna que otra ocasión, primero Joaquín trató de buscar hueco entre los centrales pepineros, después Yanis. Pero los de Garitano también buscaron abrir el encuentro por mediación de Rubén Pérez o Silva. Una primera parte de ida y vuelta, con el Málaga algo desinflado después de un buen inicio, pero sin perder la marca y tapando las ocasiones del Lega.

En la reanudación el planteamiento siguió intacto: el Málaga no cedía, se acercaba al área de Riesgo, pero en cuanto perdía el balón el rival salía rápidamente en busca del gol pero se topaban con una defensa costasoleña bastante sólida. 

Tras una conducción de Pardo, Miguel de la Fuente remató con la derecha, ahí salió a relucir una providencial mano de Juan Soriano para echar por tierra la ilusión de los locales. Pero la ocasión activó a los de Garitano y encadenaron varias llegadas de enorme peligro. Después de De la Fuente lo intentó también Eraso, pero más clara fue la que tuvo Sergio González: remató de cabeza en el área pero volvió a toparse con los guantes de un Soriano descomunal. Poco después, y también con la testa, a González se le marchó desviado el tiro. La ofensiva del Leganés no cesó, Merino entró con decisión desde la banda, seguían acosando el área malaguista a balón parado... 

El Leganés no pudo mantener ese ritmo frenético en ataque y las ocasiones se fueron diluyendo. Seguían manteniendo la posesión frente a un Málaga en bloque. Pero como se ha visto en toda la temporada, el mínimo error penaliza, Silva llegó rápidamente por la banda y Rober Ibáñez remató para abrir el marcador. Minuto 87, el margen de maniobra era mínimo. Aún así, con el tiempo reglamentario cumplido, Yanis lanzó una falta que llegó directa a los guantes de Riesgo. 

No pudo ser. El Málaga se marchó de Butarque sin premio en un partido en el que no bajó los brazos, pero estuvo ante un rival superior en la clasificación, objetivos, presupuesto y ocasiones.