El Málaga CF busca liderazgo y experiencia en el mercado

El Málaga CF se ha propuesto este verano aprender de los errores cometidos en el pasado. La necesidad de mejorar la temporada 21/22 lo exige y también lo hace una afición que estará al pie del cañón con su equipo, como siempre, pero que está ya cansada de tantos sinsabores. Todas las operaciones del mercado de verano van a estar vigiladas con lupa y lo cierto es que Manolo Gaspar ya ha definido los nuevos criterios en mayúsucula con los que fichar: experiencia y liderazgo.

El cierre del mercado estival de 2021 trajo grandes alegrías a la afición blanquiazul. El club parecía haber dejado atrás esa temporada de las 18 fichas y, después de afrontar una ventana con ilusión, todo era felicidad cuando entró ya el mes de septiembre. Sekou Gassama, Paulino, Brandon, el regreso de Antoñín... un perfil de jugadores con talento y que venía para marcar diferencias. Todo eran buenas noticias hasta que llegó el momento de la verdad y la felicidad desapareció por completo.

A pesar de toda ese júbilo inicial, siempre se había hablado de que la plantilla carecía de cierta experiencia para afrontar una Segunda División que cada vez es más dura. Que se lo digan al Eibar: toda la temporada en los puestos de arriba con el objetivo de estar solo un año en el «abismo», perdió el ascenso directo en la última jornada con un gol en el descuento del Alcorcón y ahora se va a quedar de nuevo en LaLiga SmartBank tras perder contra el Girona en el play off de ascenso durante el descuento.

No es el caso del Málaga CF, por desgracia, pero sí que demuestra que en esta categoría no hay que dar nada por sentado. Y de eso quieren aprender en «La Cueva» en esta nueva ventana de fichajes. Los objetivos ahora son totalmente distintos. Esta vez priman la experiencia y la capacidad de liderazgo por encima de la propia juventud o incluso de la calidad. La juventud la aportará la cantera. Los experimentos, y los posteriores comportamientos extradeportivos, ya han sido suficientes y el club de Martiricos ha marcado una clara línea roja.

El ejemplo más claro de la «nueva» realidad es Manolo Reina. El portero, que además es malagueño y cuenta con experiencia en el equipo y en las categorías inferiores, ha terminado contrato con el Mallorca y el Málaga CF, a falta de ser oficial, va a contar con su experiencia para tener más luces que sombras la próxima temporada. O al menos intentarlo. Además de su veteranía, será un jugador capital en el vestuario, ya que cumple otro de los grandes requisitos que buscan desde la secretaría deportiva blanquiazul: el liderazgo.

Manolo Reina se despide del Mallorca

Porque lo cierto es que más allá de contar con jugadores como Lombán (35 años), Dani Barrio (35) o Alberto Escassi (33), la plantilla 21/22 del Málaga CF ha pecado de juventud en los momentos en los que había que saber sufrir. Las pruebas son evidentes: una segunda vuelta, que por números habría colocado al equipo en el descenso, en la que los jugadores no supieron levantar la cabeza salvo en partidos muy puntuales. Ni tres entrenadores consiguieron reajustar una plantilla que parecía estar más centrada en lo que ocurría fuera del terreno de juego que en el propio fútbol. O así lo demostraron varios actos de indisciplina en el tramo decisivo de la temporada.

Todos los jugadores que se quedan, que tampoco van a ser demasiados con respecto a la temporada pasada, van a estar obligados a dar un paso adelante. La ausencia de Luis Muñoz durante tres cuartos de la temporada dejó a Escassi prácticamente solo en este asunto y a Lombán le ha faltado, quizás, algo de carácter siendo el capitán en muchos partidos.

Así que el rumbo de Manolo Gaspar en la búsqueda de nuevos futbolistas ha cambiado por completo con respecto al verano pasado: jugadores con varios años de experiencia en el fútbol español y en LaLiga SmartBank, líderes dentro y fuera del campo, y que sepan manejar la dureza de la Segunda División. Los nuevos objetivos están marcados desde el principio. Ahora «solo» hace falta acertar.

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