Provincia

El Día de la Provincia se regodea en una alegría fronteriza

Un antiguo convento carmelita de Gaucín fue el escenario en el que se materializó la concesión de la Medalla de Oro de la Provincia al cocinero Miguel Ángel Herrera, el Aeropuerto de Málaga, la cantante Maria Peláe, la Liga de Jábegas y el expresidente de la institución provincial Elías Bendodo

Cristóbal G. Montilla

Cristóbal G. Montilla

Esa alegría itinerante que reparte el Día de la Provincia hizo este martes su parada anual en un antiguo convento carmelita de Gaucín. Con los miedos inherentes a la pandemia notablemente alejados, la fiesta por antonomasia de la Diputación Provincial de Málaga se mimetizó con ese enclave fronterizo, ebrio de cierto horizonte africano y bohemio, que representa esta localidad malagueña vecina al Campo de Gibraltar. Cerca de la montaña, en el Valle del Genal y con la costa en el horizonte, el balcón de la Serranía de Ronda fue el escenario en el que se materializó la concesión de la Medalla de Oro de la Provincia al cocinero y empresario Miguel Ángel Herrera, el Aeropuerto de Málaga, la cantante Maria Peláe, la Liga de Jábegas y el expresidente de la institución provincial Elías Bendodo

Todos ellos rebosaron una alegría fronteriza, bajo esa atmósfera todavía extraña que transmiten ahora los eventos en los que no manda la mascarilla. Eso sí, antes de que los homenajeados irrumpieran en sus felices tarimas, la gala de la Diputación lanzó un guiño que transitó por la triste actualidad a través de un homenaje al pueblo ucraniano, que sufre desde hace dos meses la invasión bélica de Rusia. La cónsul de Ucrania en Málaga, Svitlana Kramarenko, recibió un pergamino que simbolizaba el reconocimiento de la geografía malagueña y miró a su Ucrania natal con emoción: "Hoy me doy cuenta que el mayor orgullo de mi vida es ser compatriota de los defensores de la libertad de Europa, no puede haber paz sin la libertad", apuntó la cónsul ucraniana antes de encomendarse al legado de la filósofa veleña María Zambrano.  

La cónsul de Ucrania en Málaga, Svitlana Kramarenko, recibió un pergamino que simbolizaba el reconocimiento de la geografía malagueña

En la antesala, el alcalde Gaucín, Pedro Godino, también glosó el amor "a la historia, la cultura y las tradiciones" de su pueblo y lo reflejó sobre la recuperación del convento que acogía la celebración del Día de la Provincia. 

A partir de tales discursos, empezaron a sucederse los restantes tributos programados. El primero de ellos fue para un gaditano de Algodonales, afincado en Ronda, que ha impulsado iniciativas solidarias en la pandemia o ha situado a un invidente al frente de su escuela de hostelería El Golimbreo. El chef Miguel Ángel Herrera destacó "el privilegio" de vivir en su provincia adoptiva y, en un claro guiño a su oficio, le pidió a todos los presentes que se alimentaran "bien".

A continuación, el director del Aeropuerto de Málaga, Pedro Bendala, agradeció la medalla en nombre de "toda la comunidad aeroportuaria" y las múltiples ocupaciones que hacen posible el funcionamiento del recinto aeroportuario: "Todos los trabajadores son necesarios para que el aeropuerto funcionen, ellos trabajan para darle un servicio a Málaga y conectarla con cuatro continente, 33 países y 123 ciudades", señaló Bendala.

Todos los trabajadores son necesarios para que el aeropuerto funcionen

Justo después, el imparable talento de Maria Peláe explosionó con palabras en las que invocó el desparpajo que le caracteriza y se recordó paseando con su guitarra por calle Granada, como una muchacha del Puerto de la Torre a la que le apasiona tomarse un pitufo de zurrapa. María Peláe proclamó que "al mundo le hace falta una manita de verde y morao" después de perjurar que ha adoctrinado "a una alicantina para que diga 'to perita' y a un gallego psara que diga no vea vieho". "Aunque viva en Madrid, nunca me he ido de Málaga; soy más malagueña que un boquerón, un ajoblanco y un caldo de pintarroja un día de resaca", añadió sin perder de vistas aquellos primeros conciertos en La Botica o El Harén en los que eran pocos "pero graciosos".

La tradición perfumada de salitre hizo luego su irrupción con la entrega de otro premnio ante el que se corroboró, como decía Jean Cocteau, que «Málaga nos mira por el ojo egipcio de sus jábegas». El presidente de la Liga de Jábegas, José Luis Ramos, recordó al fallecido Javier Imbroda y su cita de que "el talento sin esfuerzo solo sirve para divertirse". "Nuestro esfuerzo nos ha hecho pasar de una sola regata a catorce, de medio centenar de participantes a casi un millar, históricamente era un deporte masculino y ahora es un deporte con muchas mujeres, se ha rescatado del olvido a través del deporte a la embarcación milenaria de Málaga", enfatizó Ramos.      

Foto de familia de los premiados con el presidente provincial Francisco Salado y el alcalde de Gaucín, Pedro Godino.

Foto de familia de los premiados con el presidente provincial Francisco Salado y el alcalde de Gaucín, Pedro Godino. / L. O.

El último de los premiados, el expresidente de la Diputación y portavoz del mismo Gobierno andaluz que horas antes convocó elecciones, Elías Bendodo, se rebeló contra el manido dicho de que 'nadie es profeta en su tierra': "Me siento honrado y reconocido por recibir esta distinción, me corresponde simplemente dar las gracias, no pueden imaginarse lo que me ilusiona recibir la medalla de oro de la provincia que me vio nacer", apuntó antes de glosar como "ilusionantes y fructíferos" la etapa como presidente de la Diputación entre 2011 y 2019 en la que presidió siete galas del Día de la Provincia.

Bendodo rememoró que presidió en siete ocasiones el Día de la Provincia hasta que cesó al aceptar "el gran reto" de acompañar a Juanma Moreno "en el Gobierno andaluz del cambio". ·"Hoy estoy al otro lado, en el lado de los reconocidos, estoy junto a personas e instituciones que representan a la Málaga pujante que es nuestra provincia hoy; los años que estuve al frente del gobierno provincial fueron años ilusionantes y fructíferos, una parte de mi equipo sigue aquí en el Gobierno de la Diputación, eso significa que el presidente ha sido inteligente y los matienene", apunto el coordinador general del nuevo PP de Feijóo

Asimismo, reivindicó el sentido de las instituciones provinciales: "Soy un municipalista convencido y, pese a lo que se ha dicho muchas veces, si las diputaciones no existieran, habría que inventarlas", indicó en una intervención que también se detuvo en "los compañeros de la oposición que nos ayudaron a construir una mejor provincia".

Incluso, Bendodo recurrió a una frase del expresidente socialista de la Diputación Salvador Pendón: "Cuando descubrieron el cuadro con su retrato, él dijo que el objetivo de todos los políticos debe ser entenderse en los temas importantes; no le faltaba razón y es lo que hemos hecho desde el Gobierno de Andalucía, la gente quiere que los políticos no nos tiremos los trastos a la cabeza y nos entendamos".  

Salado y Bendodo.

Salado y Bendodo.

Al repasar el periplo como presidente que justifica la Medalla de Oro que también recibieron sus antecesores, Bendodo dijo que "las personas pasan pero las obras permanecen" y citó proyectos como El Caminito del Rey, la Senda Litoral, La Térmica o La Noria: "Yo destacaría que me fui y la Diputación no debía ni un duro a nadie, dejamos la deuda a cero, los bancos no estaban contentos con nosotros porque no les pedíamos ningún préstamo", espetó con una afirmación que se produce días después de que el Gobierno provincial haya aprobado, precisamente, en su última sesión plenaria la adjudicación de un préstamo. Eso sí, Bendodo ensalzó "la buena gestión de Salado y su saber estar con todos los pueblos durante la pandemia".  

Su discurso fue replicado, en la intervención final, por su sucesor en el ente provincial, un Francisco Salado que arrancó en tono bromista: "Por una vez, le gano 100 a cero a mi amigo Elías Bendodo". Enseguida, Salado se entregó a su discurso real al insistir en que "esta provincia lo tiene todo y, sin duda, nuestro mejor patrimonio es la gente". "Hoy, toca reflexionar sobre el camino recorrido y los retos del presente y el futuro; no es casualidad que celebremos en Gaucín este acto, todavía nos duele el corazón por el incendio que tuvo lugar en Sierra Bermeja", apuntó Salado antes de destacar que "el Valle del Genal pudo salvarse en buena medida" y de tener un recuerdo para el bombero fallecido Carlos Martínez.

Todavía nos duele el corazón por el incendio que tuvo lugar en Sierra Bermeja

Salado sostuvo que “a pesar de todas las adversidades, Málaga se ha consolidado como un destino seguro no sólo para descansar y para vivir, sino también para emprender, para invertir y para trabajar".

"En los últimos años, Málaga se ha convertido en una provincia líder, más allá de las cifras, gracias a nuestro despegue cultural, tecnológico, y nuestra potencia turística y empresarial", afirmó.

A juicio del presidente provincial, "nos espera un futuro brillante, cargado de esperanza". "Y el destino no debe ser otro que el lugar donde se cumplan nuestros sueños. Muchas gracias a todos, enhorabuena a los premiados y Feliz Día de la Provincia ¡Viva Málaga!", agregó Salado cuando esta fiesta de la alegría fronteriza se aproximaba a su epílogo y la pertinente foto de familia.