Plan de reconstrucción de la UE (II): su financiamiento

En el artículo anterior señalaba que los Planes del Next Generation EU alcanzarían un importe de 750.000 millones de euros, pero es también importante señalar que la cifra máxima de gasto de la UE-27 para el periodo 2021-2027 es de 1,074 billones de euros. Advertir que fuera del MFP existen algunos compromisos de gasto como la Reserva para la Solidaridad y Ayudas de emergencia, o las de Ajustes al Brexit entre otras, que suponen 20.106 millones de euros en el periodo.

¿Qué ha de financiarse en este periodo de 2021 a 2027? Las 7 Rúbricas establecidos en el MFP son, por orden de importancia económica, la de «Cohesión, resiliencia y valores» con 377.768 millones, «Recursos naturales y Medio Ambiente» con 356.374, «Mercado único, innovación y economía digital» con 132.781, «Vecindad y resto del mundo» con 98.419, «Administración pública europea» con 73.102, «Migración y gestión de fronteras» con 22.671 y «Seguridad y Defensa» con 13.185 millones de euros. Estas rubricas contienen innumerables programas definidos en el epígrafe «I de Gastos» del documento de Conclusiones del Consejo del día 21 de julio.

¿Cómo conseguirá esos millones de euros la UE para el periodo 2021-2027? Las fuentes financieras seleccionadas han sido el endeudamiento mancomunado, la aportación anual de los Estados miembros y la mejora de los recursos propios. De esta manera se recurrirá a:

1.-Los mercados de capitales endeudándose a través de eurobonos mancomunados, que debe ser reembolsado antes de finales del 2058.

2.- Las mayores aportaciones de 22 Estados por la reducción de las contribuciones de Dinamarca, Alemania, Países Bajos, Austria y Suecia a causa de los cheque de descuento para el periodo 2021-2027, que por un importe de 53.000 millones, ha sido aprobado por el Consejo.

3.- La posible subida de las «contribuciones relativas estatales» recogidas en el apartado A.10 del documento de «Conclusiones de la Reunión extraordinaria del Consejo.

4.- Los «nuevos recursos propios» que se pretenden crear, entre los que destaco los tributos sobre el plástico, las emisiones de carbono, actividades digitales o sobre transacciones financieras.

Centrando ahora el tema sobre el reembolso del endeudamiento mancomunado de los Estado miembros, este se programará de manera que se garantice una reducción constante y previsible de los pasivos hasta el 31 de diciembre de 2058 y con unos condicionantes establecidos en el Acuerdo del Consejo del día 21. Parece intención del Consejo que parte del endeudamiento pudiera ser amortizado con recursos propios, evitando, en lo posible incrementos en las aportaciones netas estatales, cuestión que parece difícil.

Si ahora analizamos el procedimiento de cómo obtener la financiación de los programas, planes o actividades de las distintas rubricas enunciadas anteriormente, los Estados miembros deben elaborar «Planes nacionales» para el período 2021-2023, y obligatoriamente deben recoger las «recomendaciones específicas que establezca el Consejo Europeo», revisándose estos Planes en 2022. Estos planes serán evaluados por la Comisión en un plazo de dos meses a partir de su presentación, para lo que se solicitará el oportuno informe al Comité Económico y Financiero de la UE, debiendo estos superar las pruebas, entre las que destacan las relativas a la transición ecológica y digital. Posteriormente el Consejo debatirá estos planes nacionales, y por mayoría cualificada, lo que significa que voten a favor 15 o más de los 27 Estados miembros, y que representen al menos el 65 % de la población total de la UE., adoptará una decisión respecto de estos en un plazo no superior a 4 semanas a partir de la propuesta, «debiendo estos cumplir con las metas y objetivos impuestos para obtener una calificación positiva». Si uno o más Estados del Consejo entienden que no se cumplen los objetivos, solicitará que se remita la cuestión al siguiente Consejo Europeo para su debate, paralizándose pues las ayudas a dichos Estados. Debe entenderse que las ayudas comenzarían a llegar en el segundo semestre del 2021, aunque se permite solicitar el 10% antes de la aprobación de cada Plan nacional conforme establece el punto 17 del apartado I. Next Generation EU del documento de Conclusiones de la reunión del 21 de julio del Consejo.

Por todo ello, debemos entender que el procedimiento es complejo y que los montantes aprobados deben ser aplicados por los Estados en los programas y planes recogidos en las rubricas antes indicadas.

Von der Leyen, Presidenta de la Comisión, resaltó el esfuerzo presupuestario de la UE para combatir los efectos de la crisis, recordando que sumando el presupuesto plurianual, el fondo de reconstrucción y la primera respuesta comunitaria que movilizó dinero del Mecanismo Europeo de Estabilidad, el Sure (Red de seguridad fundamental para la protección de los trabajadores y del empleo) y el Banco Europeo de Inversiones, la respuesta europea asciende a los 2,364 billones de euros, el 17% del PIB de la UE, mientras Estados Unidos ha aportado el 15,9% y China el 4% de su riqueza en Fondos de reconstrucción similares.

Finalizar señalando que la emisión de deuda mancomunada exige la aportación de los correspondientes avales en la parte alícuota de cada Estado miembro, y que los préstamos deben ser amortizados con las nuevas aportaciones que correspondan a cada Estado en los próximos presupuestos de la UE. Bernard Shaw decía que «Las deudas son como cualquier otra trampa en la que es muy fácil caer, pero de la que es dificilísimo salir».