Opinión | Zona Press

Orgulloso de vosotras

¿Quién nos iba a decir cuando acabó la primera vuelta y la clasificación nos situaba en cuarta posición, que terminaríamos líderes al final de la fase regular? Era evidente que había que cambiar alguna cosa. Y esperar a que llegara esa fase de asimilación a un método de trabajo que, por propia experiencia, sabíamos que iba hacer ‘click’ en nuestro juego en algún momento. Para acabar primeras era evidente que debíamos ganar todos los partidos de la segunda vuelta. Pero llegó ese ‘click’ que, unido a esa constancia e ilusión por progresar, hizo posible lo que parecía imposible.

Vuestra disposición a no dejaros ir cuando las cosas no iban como pensábamos, a seguir trabajando, a no fallar ningún día, os llevó a tener la opción de conseguir el objetivo. Y una vez que llegaron los partidos decisivos donde todo estaba en juego no fallasteis. No fallasteis hasta cuando jugamos mal.

En silencio, sin hacer ruido, habéis dejado mal a aquellos que decían que nos dejaríamos perder el último partido para beneficiarnos buscando la clasificación para la fase por el título gracias a una norma de las bases de competición. Es evidente que ellos no os conocen, no os ven entrenar y no saben que escuchar ese tipo de comentarios nos motiva aún más si cabe.

Acabar así como hicisteis el domingo pasado, me hace recordar todos esos esfuerzos que habéis hecho en estos meses. Esos momentos duros con las lesiones, esa ambición por cambiar detalles en vuestro juego, esos fines de semana, días de fiesta o puentes entrenando. Habéis entrenado un sábado a las 15.00 de la tarde. O incluso después de una guardia de 24 horas, ¿verdad, Sandra? Llegó vuestra recompensa a dar tanto por el equipo, por vosotras. Imposible olvidar a Desi, que fue muy importante para nosotras; a Cuchi, que le tocó jugar otro campeonato diferente pero que siempre está presente; a Chicho, que nos ayuda cada vez que puede; a Ana Parra, que gracias a ella hemos sido diez muchos días; y a la cantera del club personalizada en Paula Hijano, Noa, Zaira y Ainhoa.

Pero esto que habéis hecho, que ha sido la leche, no es suficiente. Pararse aquí y pensar que somos las mejores es de mediocres. Ahora empieza una competición totalmente diferente y que, por lo tanto, hay que afrontar de una manera diferente. El camino es largo todavía. Nos queda acoger a nuevas jugadoras que deben venir a hacer lo que haga falta por el equipo, como hacéis vosotras, porque esa es la fórmula para hacernos más fuertes. Y tener muy claro que tenemos margen de mejora, que hay detalles que podemos hacer mejor, detalles que vamos a perseguir y repetir para hacerlos perfecto. Ahora, es básico que no olvidemos que todas sois importantes para el equipo y que tenemos que prepararnos para jugar perfecto los minutos que toquen, porque sabéis que vais a entrar en rotación y que el equipo necesita que pongáis a su disposición vuestras cualidades, cada una las suyas porque todas son importantes.

El reto es difícil porque no es sencillo seguir preparándose y entrenar cada semana sabiendo que el sábado no hay partido. Pero no nos podemos relajar porque el tiempo pasa muy rápido y sin casi darnos cuenta volveremos a competir contra los mejores. Cuando llegue ese momento debemos estar listas para jugar un cruce de cuartos de final a ida y vuelta, en el que un mal partido puede hacerte perder ese play off. Pero es que, si tuviéramos la suerte de ganar ese cruce, jugaremos competiciones en formato final four en fin de semana jugando partidos días seguidos, otro reto para el que hay que prepararse.

Mejor no soñar con lo que vendrá y solo pensar en seguir progresando dejando muy lejos la relajación y pensar solo con la ambición por mejorar como equipo. Pero el hecho de que pensemos en seguir adelante nuestro camino no debe hacernos olvidar que lo que habéis hecho ha sido fantástico. Tenéis toda mi admiración y reconocimiento. ¡¡Enhorabuena, chicas!!