Cronista de la ciudad

La memoria arqueológica

En Marbella contamos con un importante patrimonio arqueológico al que nunca se le ha dado el valor que realmente merece... ¿Para cuándo un museo arqueológico y un arqueólogo municipal en Marbella?

La memoria arqueológica

La memoria arqueológica / Francisco Moyano

Francisco Moyano

Francisco Moyano

Es humano sentir cierto grado de envidia (sana, se acostumbra a decir) cuando se presencia alguna realidad que nos sitúa crudamente ante determinada carencia cronificada. Eso me ocurrió hace unos días, visitando la bella ciudad cordobesa de Cabra; algo más de 20.000 habitantes, según las cifras oficiales. Resultó impresionante comprobar la excelencia del Museo Arqueológico Municipal, situado en pleno centro histórico, con una estructuración didáctica muy acertada y abastecido con los yacimientos de Villa del Mitra y La Veleña. La comparación, por muy odiosa que pueda resultar, aparece recurrente: una ciudad con más de 150.000 habitantes y con proyección mundial, un patrimonio arqueológico muy considerable y presupuestos anuales millonarios, de nombre Marbella, carece de museo arqueológico y de arqueólogo municipal.

Es cierto que un elevadísimo porcentaje de tan abultado presupuesto se encuentra «secuestrado» por el asfixiante peso de las nóminas de los trabajadores del Consistorio. Pero, si hacemos un recorrido por la provincia de Málaga, sin agotar la posible relación, nos encontramos con el Museo Arqueológico Municipal de Estepona, situado en la Casa del Aljibe, en la plaza de Blas Infante, donde también estuvo el Ayuntamiento. Más hacia occidente, el Museo de Manilva (15.000 habitantes), instalado en el Castillo de la Duquesa. Algo más de 3.000 vecinos posee Frigiliana y cuenta con su museo arqueológico. Lo mismo ocurre con Cuevas de San Marcos, con un peso demográfico de 3.700 habitantes. Mención especial merece el Museo Morisco de Sayalonga (1.700 habitantes) y el Museo Histórico de Teba, con los yacimientos del Castillo de la Estrella y la necrópolis megalítica de La Lentejuela. Mijas igualmente tiene un museo histórico.

En Marbella contamos con un importante patrimonio arqueológico al que nunca se le ha dado el valor que realmente merece y sigue siendo una faceta del término municipal al que no se le saca partido desde una perspectiva turística. No es «carne» de Fitur, por ejemplo. Menos mal que cierto interés existe, lo que demuestra la continuidad de la Asociación Cilniana para la defensa del patrimonio. Precisamente el actual presidente de la asociación, Javier Soto, es el máximo conocedor en restos prehistóricos de los periodos paleolítico, neolítico y de los metales, con yacimientos como Coto Correa, en Las Chapas, o las cuevas de Pecho Redondo y Puerto Rico, donde aparecieron cerámicas, brazaletes, collares y algunas pinturas rupestres.

De tiempos históricos nos encontramos con la Villa Romana de Río Verde, descubierta por Carlos Posac Mon y Fernando Alcalá Marín en 1960 y difundido su conocimiento desde 1963, cuando fue objeto del VIII Congreso Nacional de Arqueología. Allí se encuentra el mosaico de la Medusa, expoliado hace unos años. También el Gargoneion y una amplia serie de mosaicos conteniendo motivos geométricos, marítimos, culinarios y objetos de cocina y de la vida cotidiana como las sandalias.

Mosaico de Medusa

Mosaico de Medusa / Academia de San Telmo

En la zona de San Pedro Alcántara, entre el río Guadalmina y el arroyo del Chopo, se ubican Las Bóvedas, propicias para la especulación sobre los restos de Cilniana. Importantísimo monumento es la Basílica de Vega de Mar, con una singular pila bautismal. Pero los hallazgos se suceden arrojando más luz sobre el pasado de la zona. Seguramente el monumento arqueológico central sea la Alcazaba medieval o Castillo, cuyos orígenes, tras una serie de catas efectuadas se remonta a la época romana. Actualmente se encuentra sometido a un proceso de restauración y consolidación de la muralla que da a la zona de la antigua Barbacana, donde en una antigua y desafortunada restauración se colocaron una serie de almenas. Se invierten 500.000 euros procedentes de las administraciones central y local.

En 2021, un fortísimo temporal dejó al descubierto en las playas de San Pedro Alcántara los restos de dos hornos romanos. En 2020, con motivo de obras en el antiguo hotel La Fonda, en calle Ancha, se encontró una necrópolis y la iglesia de San Sebastián. Igualmente afloró otra necrópolis en las actuales obras del hotel El Fuerte. En Río Real se encuentra un yacimiento fenicio, en parte destruido en los años noventa del pasado siglo. Interesante resultan los hallazgos de ánforas romanas en Marbella, un capítulo de nuestra Historia que fue estudiado por la historiadora María Teresa Rivera Valderrama. Cabe formular, una vez más, la eterna pregunta : ¿Para cuándo un museo arqueológico y un arqueólogo municipal en Marbella?