MÁLAGA DE UN VISTAZO

El cinema y la práctica procesal

Ignacio Hernández

Ignacio Hernández

La simbología del guarismo 14 en la numerología se asocia con la energía de la independencia, la libertad y la creatividad, características éstas que han definido desde sus inicios al Ciclo Cine y Derecho, organizado por Abogacía de Málaga, bajo la dirección y coordinación de los acreditados letrados Francisco Javier Fernández Zurita, Carlos Font Feliu y el equipo asesor perteneciente a esta ilustre corporación.

Este ciclo clausura mañana, jueves 27 de abril, en la sala de siempre: el cine Albéniz, su decimocuarta edición con el mismo éxito de crítica y público que ha ido cosechando desde sus orígenes. El certamen, firmemente consolidado tras estos catorce años, se ha convertido en el «decano a nivel nacional de estas muestras de Cine y Derecho», comenta Fernández Zurita. Tal prestigio viene generado por el acertado formato adoptado: el clásico de cine-club; la selección de los ponentes – no elegidos por su poder mediático, sino por el amor al cine- y a través de la excelsa labor de su consejo consultor el cual proyecta el mismo entusiasmo desde su preludio. Este equilibrado triángulo ha logrado, después de este dilatado periplo, entreverar la gran pantalla con el orbe jurídico, adecuando el lenguaje del cine para transmitir cuánto está en el quid de la Justicia a un público misceláneo, no sólo delimitado al mundo judicial sino que ha sabido calar en la sociedad malagueña desde el rigor, la calidad, el conocimiento de la realidad social y de las funciones que el Derecho puede y debe desempeñar entre los ciudadanos. Tras las proyecciones de ‘La costilla de Adán’ (George Cukor), ‘Nader y Simin, una separación’ (Asghar Farhadi), la exhibición finaliza con ‘El sargento negro’ (John Ford). Una vez más, este ciclo ha conseguido dictar su alegato: el análisis y divulgación del Derecho por medio de la relación seductora entre el cinema y la práctica procesal. Enhorabuena.