Y el público volvió al Carpena 139 días después

¡Qué ganas de baloncesto tiene la afición del Unicaja! ¡Qué mal lo está pasando la "Marea Verde", tantos meses alejada de su equipo! El club de Los Guindos anunció a primera hora de la tarde del lunes que las autoridades permitirían un aforo de 400 personas para ver en directo el Unicaja-AS Monaco de la última jornada del Top 16 de la Eurocup. La respuesta de la afición fue "tirarse" literalmente a Internet para conseguir una de las entradas. Un "pis pas", solo 18 minutos, duraron en el sitio web del club hasta agotarse.

El club decidió repartir el aforo total permitido en 150 entradas para sanitarios de centros públicos y privados de la ciudad, 50 personas de protocolo, 50 patrocinadores y 150 abonados. Todos ellos disfrutaron ¡por fin! de baloncesto en directo después de ya demasiados meses con el Carpena vacío.

Desde una hora antes del comienzo del partido, los afortunados aficionados con una entrada en su poder fueron accediendo progresivamente a las gradas del Carpena. Con la correspondiente distancia de seguridad, las mascarillas y sin opción para cambiar de asiento o moverse por la instalación (salvo en el espacio acotado para ellos), los 400 seguidores cajistas vivieron con intensidad un partido en el que no había nada en juego en lo deportivo, pero que pasará a la historia por lo "especial" de que fue el primero del año 2021 con público en las gradas.

Hacía exactamente 139 días que el silencio se había apoderado del Martín Carpena, concretamente desde el 21 de octubre del año pasado. Y es que hay que recordar que si bien es verdad que en la Liga Endesa no se ha permitido la entrada de aficionados en los partidos desde marzo de la temporada pasada, en la Eurocup sí hubo aficionados los tres primeros partidos de la primera fase de esta misma temporada, ante el Metropolitans francés, el KK Buducnost montenegrino y el Germani Brescia italiano. Por cierto, con tres victorias en esos tres partidos con público en las gradas.

Este martes, casi cinco meses después, las palmas volvieron a sonar para recibir al equipo, también durante la presentación, con cada canasta y con cada buena defensa. Para Fotis Katsikaris, por ejemplo, fue su primera vez en el Palacio con aficionados en las gradas y ha quedado claro por la respuesta de los seguidores hacia él que el heleno ha caído de pie en el club.

En los prolegómenos del partido se llevó a cabo el merecido homenaje previsto para los sanitarios que tan admirable labor están realizando durante la pandemia. El capitán del equipo, Carlos Suárez, entregó sendas camisetas del equipo a dos sanitarios del Hospital Virgen de la Victoria: Felipe Zavalgo López (encargado de turnos de celadores) y Ricardo Olivera Vázquez (supervisor de Urgencias) y a dos miembros del Hospital Regional Universitario: Ignacio Márquez Gómez (facultativo de enfermedades infecciosas) y Pilar Márquez Subires (auxiliar de enfermería de quirófano). Ellos fueron los representantes, sobre el parqué del Carpena, de todo el personal sanitario que lleva más de un año luchando contra la pandemia en primera línea.