106-60: El Unicaja arrasa y brilla en el derbi frente al Betis

Victoria fundamental del Unicaja este domingo. Había que ganar, no solo para mejorar la clasificación en Liga Endesa, sino para ir sumando triunfos de cara a la próxima Copa del Rey. Y se hizo. El equipo de Ibon Navarro arrasó con todo lo que pudo y más al Betis en el Martín Carpena (106-60) con un ataque estelar y una defensa prácticamente inmejorable. Todo lo que pudo funcionar, funcionó. Y eso, en una competición tan apretada, es para ponerlo en valor.

El ataque había sido el talón de Aquiles de un equipo que había tenido que brillar en defensa para ganar sus partidos en Liga. Ocurrió frente al Gran Canaria (70 puntos), en la pista del Basquet Girona (73), pero este domingo brilló tanto el trabajo delante como también el de detrás. El Unicaja, que estaba siendo uno de los peores ataques de la ACB, se marchó con 53 puntos al descanso y culminó el partido con 106. Todo ello con la baja de Tyson Carter, uno de los más entonados en los últimos encuentros.

Más allá del resultado, el partido sirvió para coger sensaciones y mucha confianza. Esos jugadores que habían empezado la temporada con menos ritmo pudieron sumar muchos minutos este domingo. Jonathan Barreiro y Kendrick Perry -ya mucho más fresco de piernas- con 9 y 11 puntos, respectivamente, y mucho más participativos en el trabajo. Siete jugadores alcanzaron la decena de puntos este domingo, síntoma del excelso fondo de armario. No obstante, el que estuvo sobresaliente fue Melvin Ejim con una primera mitad para el recuerdo.

Lo cierto es que el inicio del Unicaja fue mucho más consistente y sostenido de lo que se había visto antes. Buenos tiros desde el triple, juego en la pintura y mucho movimiento de balón. El equipo verde siempre lideró el marcador (15-9, min. 6:30). Sin embargo, el Betis siempre se mantuvo en el marcador con esas ocho faltas que de los cajistas. A pesar de ello, el partido lo parecían tener controlado los de Ibon Navarro.

El Unicaja, sin tiempo que perder, ya dio un golpe sobre la mesa en el primer minuto del segundo cuarto para colocar una ventaja de +11 (30-19). Desde entonces, todo fue a mejor. El equipo no se relajó en ningún momento por el resultado (42-28, min. 16:30). La dureza mental estaba siendo una de las grandes protagonistas. Rebote, pase, anotación... todo estaba yendo a dos velocidades superiores al rival. Sin embargo, el punto de inflexión del partido lo marcó la lesión de Shannon Evans a 2 minutos del descanso -que volvió muy mermado-. 

Esto había que ganarlo y todo el mundo tenía claro que de cuanto más mejor. Por eso, en cuestión de 3 minutos, el Unicaja ya había aumentado la diferencia a +30 (65-35). Este equipo ya ha demostrado de qué pasta está hecho. Parece una frase hecha eso de que todo se construye desde la defensa, pero los jugadores pudieron correr y atacar con espacios. 79-45. Ya solo había que pensar en el average.

El partido ya estaba sentenciado -desde hací rato-. Las 8.030 personas que acudieron al Martín Carpena tuvieron tiempo de pasarlo bien. Cada acción era una fiesta, hubo tiempo de hacer la ola. El Unicaja, ante esto, solo hizo sumar, sumar y sumar. Es más, la "Marea Verde" tuvo tiempo de pedir la entrada de Saint-Supery e Ibon Navarro respondió. El joven canterano mismo se encargó de poner el punto 100. Anotó dos tiros libres. Después de brillar el sábado con el equipo de EBA, será un día que tardará en olvidar. Todo el mundo sabe el talento que tiene ante sus ojos.

Así que el primer derbi andaluz de estos 8 días acabó por todo lo alto. 106-60. El +46 del average, la otra gran noticia. Que pase el siguiente.

Suscríbete para seguir leyendo