El PSOE repite victoria electoral con idéntico resultado, triple empate en el segundo lugar y la suma de los apoyos recabados por PP y Ciudadanos no son suficientes para alentar un cambio de Gobierno en Andalucía. El barómetro del Centro de Investigación Sociológico (CIS), publicado a dos días del comienzo de la campaña electoral, descarta una ruptura en canal con lo establecido y arroja un mapa político que no deja grandes alternativas al PSOE a partir del 3 de diciembre, el día después de la llamada a las urnas.

Las elecciones del próximo 2 de diciembre concluirán con un escrutinio que se parece bastante -cuasi idéntico- al del 22 de marzo de 2015. Al menos, en lo que se refiere al partido más votado y con una foto fija que no deja lugar a dudas. Con un total de 4.895 entrevistas como aval científico, el CIS da al PSOE como la fuerza más votada (37,41%), seguida de Adelante Andalucía (19,34), PP (18,66) y Ciudadanos (18,55). Unos valores, sin embargo, que permiten hablar de triple empate entre los tres partidos que persiguen al PSOE, por un lado, y que otorgan a Susana Díaz la misma consideración que en 2015, por otro.

En número de escaños, el PSOE sacaría de 45 a 47 (en 2015 obtuvo 47). El PP se desangra y estaría entre 20 y 22. Una pérdida de hasta 13 escaños, comparado con los 33 que tiene ahora. Adelante Andalucía, aunque segunda fuerza en valores porcentuales, saca 20 escaños. Ciudadanos obtendría entre 20 y 22 escaños. Vox se estrenaría en el Parlamento, aunque con poca relevancia. La formación de extrema derecha obtendría un parlamentario por Almería.

Las lecturas que deja este CIS son varias. Destaca, por encima del resto, la manifiesta duda de cómo traducir estos resultados en una gobernabilidad efectiva. Esta será la principal preocupación de Díaz a partir del 3 de diciembre. Ciudadanos queda descartado como nuevo socio de gobierno. El candidato naranja volvió a dejarlo claro este martes en Málaga, donde reforzó su veto a una posible alianza postelectoral: «Ciudadanos no va a llegar a un acuerdo con Susana Díaz».

Descartado el PP de antemano, el foco se pondrá en Adelante Andalucía. La confluencia entre Podemos e IU, liderada por Teresa Rodríguez, será determinante. Las relaciones personales, dicho de manera suave, no son las mejores entre Díaz y Rodríguez. Aunque el rechazo rotundo a cualquier presidente que pueda salir del PP o de Ciudadanos podrían facilitar una abstención para que Díaz pueda repetir en solitario. Un escenario que ya se contempla por muchos socialistas como única posibilidad para echar a andar lo que sería la undécima legislatura en Andalucía. Hasta ahora, ni Rodríguez ni Antonio Maíllo, número dos de Adelante Andalucía, han aclarado qué harán al respecto. La entrada en un gobierno con el PSOE parece inviable. A las malas relaciones en el plano personal, hay que sumar la experiencia negativa, a ojos de IU, del último cogobierno entre las tradicionales fuerzas de izquierdas, antes de que irrumpieran con las formaciones de nuevo cuño.

La transformación del mapa sociopolítico en Andalucía se manifiesta según este CIS en la existencia de un partido mayoritario (PSOE), y un reparto del voto que se fragmenta entre el resto de partidos. Despojada la incógnita sobre un posible castigo a Díaz por su intento de liderar al PSOE nacional, inexistente, también se constata que las mayorías absolutas ya pertenecen definitivamente al pasado. Malos tiempos para el PP y su candidato andaluz, Juanma Moreno. Después de perder 17 escaños en 2015, ahondaría la sangría y volvería a sufrir una nueva caída, quedándose en 20 parlamentarios y marcando un nuevo registro histórico por lo bajo. Unos resultados que arrojarían serias dudas sobre su futuro político.

De replicarse estos resultados el 2 de diciembre, en Ciudadanos pueden festejar la consolidación de su partido en Andalucía. La formación naranja y su aclamada «oposición útil» duplicarían apoyos, pasando de los 9 escaños en 2015 a los 20, ahora. Por último, el resultado de Adelante Andalucía deja claro que Podemos e IU tienen una conexión en el territorio de la que carecen en otras comunidades autónomas.