David Lagos hace de La Desbandá una tragedia jonda

Continúa la programación de la Bienal de Arte Flamenco de la Diputación de Málaga con una de sus citas más apetecibles, el estreno del espectáculo Guernica Sonoro, coproducido por la cita jonda y protagonizado por el cantaor David Lagos, una de las gargantas renovadoras más interesantes del panorama nacional.

Cantes del silencio es la nueva aventura de Lagos, una evocación de la historia de Andalucía haciendo memoria de la represión. En su propuesta para la bienal malagueño, conserva el mensaje y concepto, fundiendo el cante tradicional con la música contemporánea con el hilo conductor a través de la pieza 'El Sur tiene su Guernica' y con presencia visual de Picasso en escena. La pieza se refiere, obviamente, a La Desbandá de Málaga, uno de los episodios más trágicos de la Guerra Civil Española y de nuestra historia reciente. El propósito del cantaor jerezano es contribuir a que no se silence ni se olvide algo así y recordar que el cante flamenco «es un cauce tan expresivo como rotundo para la protesta».

Alfredo Lagos es uno de los cantaores jóvenes más comprometidos con nuestro tiempo y con el legado del flamenco. Ha estudiado los cánones del jondo pero busca que el cante dialogue con otros sones y texturas musicales, como la música contemporánea y la electrónica.

Niño Josele

Un día antes del estreno de Guernica Sonoro, otro plato fuerte, también en el Echegaray, de la Bienal de Arte Flamenco de Málaga: el concierto de Niño Josele en el que presentará su más reciente trabajo discográfico, Galaxias. Es un álbum que define hoy en día a este guitarrista, flamenco de cuna que ha forjado su carrera con grandes músicos como Paco de Lucía, Enrique Morente, o Bebo Valdés, entre otros.

Su último trabajo cuenta con la colaboración de Chick Corea y Rubén Blades, rendidos admiradores del guitarristas. Un concierto que se convierte en una experiencia más allá del flamenco, con un repertorio rítmico de bulerías, rumbas y el palo más malagueño de todos, los verdiales.