Novela

Ilusiones perdidas la «novela total» de Balzac

Ediciones Akal ofrece una impecable edición de ‘Ilusiones perdidas’, donde Balzac volcó por entero su caudal de experiencias, de observaciones de novelista absoluto

Honoré de Balzac.

Honoré de Balzac. / WIKIPEDIA

Francisco Millet Alcoba

‘Ilusiones perdidas’, publicada en tres partes entre 1837 y 1843, quería ser, en palabras de Honoré de Balzac «la obra capital» de su monumental ‘Comedia humana’. Se cuenta la historia del joven Lucien desde su Angulema natal, provinciano y tranquilo hasta el tumultuoso, capital y siempre extraño París. El héroe de Balzac persigue no sólo la gloria del poeta, el prestigio, el reconocimiento de un incierto título nobiliario y, por todo ello, hasta la inmortalidad sino también, y esto es lo importante, el amor.

Leer a Balzac es siempre un acto literario de primer orden. Ediciones Akal ha querido contribuir a ello publicando una edición magnífica de ‘Ilusiones perdidas’ con excelente traducción e introducción de Francisco López Martín.

Balzac no quiere limitarse a contar historias, sino que busca configurar un mundo en el que cuente y recree toda la verdad sobre su época. Con una meticulosa exactitud y un detallismo del que cuentas sus extensas descripciones, no siempre bien entendidas. Para lograrlo parte de dos principios la búsqueda de la verosimilitud y de la mutua interdependencia de todos los elementos.

Hasta que llegó Balzac, los escritores omitían, por considerarlos zafios y carentes de interés, los detalles de la vida cotidiana, pero él los utilizó como una parte esencial de la verdad, de la realidad. Él abrió esa puerta y de ahí esa descripción de un París decimonónico, corrompido, exuberante y bullicioso, a la vez escondrijo maloliente y paraíso señorial, que es verdadero y fiel de principio a fin. Pero no basta el acierto en la observación, hay que acertar en el modo de contar.

Ilusiones perdidas

  • Honoré de Balzac
  • Editorial Akal
  • Traducción: Francisco López 
  • Precio: 24,00 €

En la primera parte, ‘Los dos poetas’, vemos a Lucien que llega a París desde su Angulema natal para cumplir sus sueños de gloria literaria, de ser un gran poeta, y se cobija en brazos de una dama casada y mucho mayor que él. Se enfrenta al impresor David Sechard que seduce a Lucien con sus elucubraciones sobre nuevos métodos de fabricar papel.

En la segunda parte, ‘Un gran hombre de provincias en París’, que contiene las páginas mas decisivas y hondas del libro, las pretensiones de Lucien encuentran una plataforma adecuada. El incauto aprendiz de escritor es introducido en los tres negocios asociados al quehacer literario: la librería, el periodismo y el teatro. No tarda en advertir la amenaza. El débil y voluble Lucien acabara envilecido por las artimañas de sus nuevos amigos. Después de traicionar todos sus ideales, fracasado y amargado vuelve a Angulema con sus ilusiones perdidas.

En la tercera parte, ‘Los sufrimientos del inventor’, Lucien se presta en Angulema a seguir renunciando a su ética para lograr así un efímero y último reconocimiento local.