Novela

Stephen King: el rey del terror se pasa a la novela negra

El genio de Maine exhibe en ‘Holly’ su magisterio para abordar el terror más cotidiano, en esta ocasión con una pareja de ancianos como crueles villanos. Ambientada en plena pandemia, contiene también un furioso alegato contra los negacionistas y los seguidores de Trump

Stephen King.

Stephen King. / L. O.

José Vicente Rodríguez

José Vicente Rodríguez

Stephen King, autor de una obra ciclópea y multiventas (que para muchos es merecedora incluso del Premio Nobel) y forjador de varios (bastantes) de los terrores literarios que en los últimos 50 años se han sumado al imaginario colectivo del lector occidental, vuelve a la carga. Lo hace en esta ocasión con ‘Holly’ (Plaza&Janés), una novela (la número 65 del autor) que ratifica su magisterio para elaborar una de esas tramas de maldad opresiva, que hallan su punto más espeluznante en el hecho de circunscribirse en muchas ocasiones a una realidad cotidiana, casi costumbrista. En esta ocasión, son los Harris, un matrimonio de ancianitos, profesores universitarios jubilados, los que abren la puerta al horror, con un sótano que oculta secretos ignominiosos. Todo dentro de un ropaje de novela negra (que viene siendo más utilizada por King en estos últimos años en contraposición a su clásica apuesta por los elementos sobrenaturales).

Es bastante probable que, por mucho que el genio de Maine siga dejando muestras de su talento en cada nueva línea que escribe, las historias más memorables que haya podido pergeñar la fecunda mente de King que acaba de cumplir 76 años, se encuentren ya algo lejanas en el tiempo, pero es comprensible, dado que el listón, desde sus inicios, ha estado asombrosamente alto. ¿Cómo superar el impacto que dejaron en su día novelas como ‘El resplandor’, ‘Carrie’, ‘El misterio de Salem’s Lot’, ‘La zona muerta’, ‘It’ o ‘Misery’, amplificado por sus correspondientes y exitosas adaptaciones cinematográficas o televisivas? En cualquier caso, el escritor estadounidense ha mantenido una carrera tremendamente regular (por lo bueno de la inmensa mayoría de su producción), con espectaculares obras de madurez como aquel ‘22/11/63’ en torno a un viaje en el tiempo para evitar el asesinato de Kennedy.

Para su nueva novela, el también autor de ‘Christine’, ‘El cementerio de animales’ o la saga de ‘La Torre oscura’ ha querido dar el protagonismo absoluto (de hecho, incluso el título) al personaje de Holly Gibney, que ya había aparecido como secundaria en varios de los últimos relatos del autor. A King le gusta mucho entrelazar tramas y personajes de sus libros y ‘Holly’ es, sin duda, un claro exponente de ello, ya que son múltiples las referencias a la llamada Trilogía de Bill Hodges (‘Mr. Mercedes’, ‘Quien pierde paga’ y ‘Fin de guardia’). Esto no impide disfrutar de ‘Holly’ como obra independiente pero, sin duda, sí hace recomendable la lectura previa de estas obras para compartir plenamente la psicología de los personajes, dado que son varios los que proceden de libros anteriores.

Holly, la detective

El planteamiento de ‘Holly’ no es el de un libro de misterio, sino el de una novela policial. Desde los primeros capítulos King le revela al lector que los Harris son los autores de varias desapariciones de personas en la tranquila localidad de Red Banks, además de desvelar las siniestras motivaciones por las que realizan estos secuestros (que aquí omitimos para no fastidiar al lector). La trama se centra así en seguir las andanzas de la detective Holly Gibney, contratada por la madre de una de las desaparecidas, en su camino por esclarecer la verdad. Cabe decir que el personaje de Holly, con su constante monólogo interior en el que repasa su vida y explora la compleja relación con su difunta madre (fallecida en la pandemia de Covid) es, de largo, el gran logro del libro y donde King deja las mayores muestras del gran narrador que es. Personalmente, destacaría además aquellos pasajes donde el escritor plasma el dolor que la ausencia de las víctimas de los Harris deja en sus allegados, como esa visita que un amigo de Holly, durante la investigación, realiza a la casa de una madre alcohólica que sufrió años atrás la repentina desaparición de su hijo.

Hay que resaltar también que la trama de ‘Holly’ se desarrolla en el verano de 2021, con algunos saltos temporales al pasado donde se narran los sucesivos secuestros desarrollados por los Harris. Siempre atento a la actualidad política y social de Estados Unidos, Stephen King introduce, por un lado, varias reflexiones en torno a los sangrantes casos de brutalidad policial que originaron el movimiento Black Lives Matter y, por otro, críticas aceradas a las teorías negacionistas sobre las vacunas y a la etapa presidencial de Donald Trump.

En este último caso, y sin compartir las delirantes posiciones del trumpismo, sí da la impresión de que King gasta demasiado tiempo (y páginas) alertando una y otra vez, quizá de una forma excesivamente cansina, al lector sobre los equivocados planteamientos del expresidente y sus seguidores. Buscando ese objetivo, el escritor se esmera en dibujar a todos los personajes obtusos, estúpidos o malvados de la novela como negacionistas de la vacuna o votantes de Trump, algo que termina chirriando un poco (pese a que el propio King insiste, en las notas finales del libro, que no ha querido sermonear al lector).

El rey del terror se pasa a la novela negra

Portada de 'Holly', de Stephen King. / L. O.

Holly

  • Autor: Stephen King
  • Editorial: Plaza & Janés
  • Traducción: Carlos Milla Soler
  • Precio: 22,70 euros