La empresa de telemarketing ICCS, con centros en Málaga, Sevilla y Granada, ha anunciado su intención de realizar un total de 328 despidos a través del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que presentó el pasado mes de agosto. El periodo de consultas entre la dirección de la empresa y los representantes de los trabajadores ha terminado finalmente sin acuerdo, según ha informado este lunes a la plantilla el sindicato CCOO, que valora la interposición de una posible demanda colectiva de impugnación del expediente.
"La falta de voluntad negociadora de la empresa durante el último mes ha imposibilitado un acuerdo que aminorar el impacto de este ERE, y en esta situación se ha cerrado el proceso de negociación", ha comentado el sindicato. El criterio que aplicará la empresa para decidir las rescisiones de contratos será el las personas "con menor productividad".
La indemnización mínima legal será de 20 días por año trabajo. Tanto la indemnización como otros conceptos económicos (finiquito, atrasos,...) se abonarán a lo largo de tres trimestres.
"Con estas medidas salvajes ha sido imposible el acuerdo y, por tanto, desde CCOO se analizará toda la información en profundidad para valorar la interposición de demanda colectiva de impugnación del ERE", afirma CCOO, que lamenta "profundamente" la situación en la que quedan las personas afectadas y las anima a contactar con los servicios jurídicos del sindicato.
Afectados por provincias
El ERE, de entrada, planteaba el despido de 375 trabajadores (más de 200 en el caso del centro de trabajo situado en la capital malagueña, donde hay más de 500 personas). Finalmente, ha habido una reducción a los 328 mencionados al suprimir del ERE a algún colectivo de situaciones especiales. Todavía no se conoce el número de afectados que, con esta cifra final, corresponderán a Málaga.
La plantilla ha secundado paros de 24 horas durante este pasado viernes, 15 de septiembre, y hoy lunes, 18 de septiembre, en rechazo al ERE.
La empresa justifica el ERE en razones "económicas, productivas y organizativas" y alega que la plantilla creció mucho durante la época del Covid y que, ahora, necesita reducir personal, según explicó en su momento Cristina Chinchilla, representante de CCOO.