Colectivos de reparto de alimentos, inquietos por el fin de los fondos FEGA

Curro López, presidente de la Asociación de Vecinos de Lagunillas e impulsor de Arealma, la Asociación de Reparto de Alimentos de Málaga, que agrupa a seis asociaciones de la capital, criticó ayer la falta de noticias ante el que será el último envío de alimentos de los fondos FEGA (Fondo Español de Garantía Agraria), la ayuda europea a través del Ministerio de Agricultura, después de que la UE haya anunciado para el próximo año un nuevo modelo de reparto de alimentos. 

«No sabemos nada, en unas dos semanas recibiremos el último de los fondos FEGA y no sabemos qué va a pasar el año que viene. Somos asociaciones independientes que llevamos muchos años haciendo un servicio y esto es una incertidumbre total», lamentó el responsable vecinal de Lagunillas y portavoz de Arealma. 

La Subdelegación del Gobierno defiende la gestión de los fondos FEGA

Curro López subrayó que «no es de recibo» tener a las asociaciones que prestan este servicio sin información, «a dos meses escasos de que termine el año», por eso reclamó una reunión entre los colectivos y las tres administraciones, para que estas detallen cómo será el reparto de alimentos a partir de 2024.

La preocupación, recuerda, es compartida por la Junta de Andalucía, a través de la delegada de Inclusión Social, Ruth Sarabia, quien como adelantó La Opinión, en agosto pasado manifestó que poner en marcha por parte del Gobierno central el nuevo modelo que propugna la Unión Europea, podría retrasar el reparto de alimentos hasta septiembre de 2024 por motivos burocráticos.

«De enero a septiembre»

«Si esto ocurre, ¿qué pasará de enero a septiembre?, ¿qué va a pasar con las familias el año que viene?», se preguntó y recordó: «Aquí quien entra por la puerta viene pidiendo un lote de alimentos, la ayuda más básica y principal de una familia». Curro López explicó que en la actualidad, la Asociación de Vecinos de Lagunillas atiende a unas 1.125 familias que son enviadas por los servicios municipales. 

Las familias, precisó, reciben un lote mensual de alimentos perecederos, así como fruta y verduras por parte de la Junta de Andalucía una vez a la semana. 

Además de los fondos FEGA y la ayuda de la Junta, el Ayuntamiento de Málaga también colabora con lotes de comida y reciben aportaciones aisladas, como una reciente donación económica de la Fundación La Caixa que les ha permitido comprar alimentos aunque, señaló, «ahora mismo nos faltan leche y aceite».

El futuro de los colectivos

El portavoz de Arealma también quiso saber qué papel tendrán a partir de 2024 los colectivos que reparten comida, toda vez que la delegada Ruth Sarabia expresó en agosto en este diario que, dado que habrá un único receptor de un contrato marco para toda España, «no se tendría en cuenta la experiencia de entidades que llevan 20 años repartiendo alimentos y que desaparecerían porque no tendrían sentido en este modelo». 

A este respecto, Curro López recordó que «mientras estábamos en pandemia con todo el mundo encerrado en casa aquí estábamos y ahora que hemos luchado por una red municipal de entidades para que no haya duplicidad, para que haya transparencia, ¿qué pasa con esa lucha?, ¿eso desaparece?», se preguntó. 

Respuesta de la Subdelegación

Ayer, un portavoz de la Subdelegación del Gobierno informó de que ahora mismo están centrados en «la segunda fase» de los fondos FEGA y se remitió a las declaraciones de agosto, cuando se preguntó «qué están haciendo la Junta, la Diputación y los ayuntamientos, sobre todo en Málaga, en un tema que es de su competencia». 

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