Sanidad

Las mujeres malagueñas retrasan cada vez más la maternidad

Un 10% de las mujeres que han dado a luz a durante los primeros ocho meses de 2023 lo han hecho con más de 40 años

La edad media de maternidad en Málaga se sitúa en 32,2 años

Recien nacido en un hospital junto a su madre

Recien nacido en un hospital junto a su madre / La Opinión

Arancha Tejero

Arancha Tejero

Las mujeres malagueñas cada vez tienen menos hijos y mucho más tarde. Así lo confirman los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) y los especialistas de la provincia, que señalan que este aumento de la edad de la maternidad está íntimamente relacionado con la caída de la natalidad.

Entre enero y agosto de este año nacieron en Málaga 7.688 bebés. Durante ese mismo periodo en 2016 hubo 9.801 nacimientos en la provincia. Rodrigo Orozco, jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia de Quirónsalud Málaga, confirma que este descenso de la natalidad se trata de una tendencia de las últimas dos décadas que no solo no remonta, sino que va en ascenso. «Tal vez el dato más alarmante es que la edad media en España para tener el primer hijo supera ampliamente los 30 años ahora mismo», añade. Según los últimos datos publicados por el INE, la edad media de maternidad en Málaga se sitúa en 32,2 años.

Razones del descenso

Una de las principales razones de esta caída de los nacimientos es que las mujeres deciden ser madres cada vez más tarde, según el doctor Orozco, que afirma que la edad media es el factor más predisponente en la disminución de la natalidad. «Aproximadamente, el 18% de nuestros embarazos son de mujeres mayores de 40 años», añade. A nivel provincial, durante los ocho primeros meses de este año, 793 mujeres malagueñas han sido madres con más de 40 años, lo que representa el 10% del total de mujeres que han dado a luz. En concreto, 74 de ellas superaban los 45 años y nueve tenían más de 50 cuando se convirtieron en madres, según las últimas estimaciones del INE. 

Una madre con su recién nacido

Una madre con su recién nacido / La Opinión

Para el jefe de ginecología de Quirónsalud Málaga, no existe una sola causa que explique el retraso en la maternidad, sino que tiene un origen multifactorial. «Uno de los principales motivos es el acceso a los estudios especializados, sobre todo a la universidad, y el ambiente laboral en el que vivimos, altamente competitivo, que hace que una mujer no se plantee buscar el primer embarazo hasta que ha logrado una estabilidad familiar, social y laboral», reflexiona el especialista. En este sentido, destaca que también existen una serie de factores multi etiológicos que justifican que una pareja que se plantee empezar a buscar embarazo pueda no encontrarlo en un tiempo prudencial y tenga que recurrir a otros métodos como la técnica de reproducción asistida.

«Hay una serie disruptores endocrinos, como pueden ser todas aquellas sustancias alimenticias, ambientales y de nuestro día a día, que van en contra de los hábitos saludables y que afectan al final negativamente para el poder tener óvulos de calidad, en el caso de la mujer, o espermatozoides de calidad en el caso del hombre», explica el ginecólogo

Inconvenientes

Retrasar la edad de la maternidad puede tener una serie de limitaciones y riesgos, comenzando porque condiciona el número de hijos que puede llegar a tener una mujer, ya que la edad biológica es la que pone el límite a la hora de poder quedarse embarazada de forma espontánea. Por otro lado, cuanto más mayor es una mujer, mayores son los embarazos de alto riesgo. «Sabemos que según avanza la edad tenemos peores resultados perinatales desde el punto de vista de mayor tasa de abortos del primer trimestre, de desarrollo de enfermedades hipertensionas del embarazo, de metabolopatías como puede ser la diabetes gestacional, e incluso de complicaciones dentro del propio parto», subraya el especialista.

Aproximadamente, uno de cada tres embarazos, por encima de los 40 años, acaba en un aborto espontáneo, según el doctor Orozco, que indica que de los dos de cada tres embarazos restantes que siguen adelante es bastante frecuente el desarrollo de complicaciones, tanto a lo largo del embarazo,  como en el propio parto, pues según avanza la edad es más difícil conseguir un parto vaginal.