Sanidad

La Junta redobla los esfuerzos para atajar el repunte de tuberculosis

Málaga, con un incremento de los casos del 18%, ha sido una de las provincias en las que se ha detectado un mayor aumento de la incidencia tras la pandemia

Sanitarios sostienen una ecografía de unos pulmones

Sanitarios sostienen una ecografía de unos pulmones / La Opinión

Arancha Tejero

Arancha Tejero

Hasta la llegada del covid–19, los esfuerzos realizados por el conjunto de actores involucrados en el control de la tuberculosis había logrado doblegar la incidencia y que en la última década la tasa nacional pasase de los 19,4 casos por cada 100.000 habitantes en 1999 a los 6,1 en 2020. Sin embargo, el inicio de la pandemia, con todos los trastornos que ocasionó, hizo descarrilar los avances conseguidos y que hubiese un retroceso en la lucha global contra esta enfermedad, incluido en el territorio andaluz.

Según informó la Consejería de Salud y Consumo en el último Consejo de Gobierno, entre 2019 y 2023, se ha observado un aumento de la incidencia de la tuberculosis en Andalucía, sobre todo en las provincias de Sevilla y Málaga. En concreto, en el caso de la provincia malagueña ha habido un incremento del 18,7% en los últimos cinco años, al pasar de los 107 casos en 2019 a los 127 en 2023, según los datos publicados por la Dirección General de Ordenación Pública y Ordenación Farmacéutica. 

Durante los años de pandemia, debido a las medidas higiénico sanitarias, distanciamiento social y uso de mascarillas, las cifras bajaron notablemente hasta los 74 casos en 2020, los 93 en 2021 y los 105 en 2022. Sin embargo, una vez se puso fin a estas medidas, se detectó que los casos volvieron a subir, revirtiendo el descenso continuado que se venía consiguiendo en las dos últimas décadas e impidiendo que se alcanzasen los objetivos fijados en 2018.

Objetivos incumplidos

Tampoco se pudo cumplir con las dos metas planteadas en el ‘Plan Nacional para la Prevención y el Control de la Tuberculosis’ en 2007, en las que se proponía alcanzar una tasa de éxito en el tratamiento del 95% para los casos sensibles a fármacos y del 75% en casos con resistencias. Y es que, según señala la Consejería, debido al coronavirus, no se pudo cuantificar la tasa de éxito, ni en 2021 ni en 2022, por falta de información sobre las resistencias durante esos dos años.

Por otro lado, ante este repunte de tuberculosis, la Junta de Andalucía ha anunciado que “ha redoblado los esfuerzos” para atajar este aumento de los casos y alcanzar los objetivos marcados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que la pandemia impidió conseguir. 

Ecografía de unos pulmones

Ecografía de unos pulmones / La Opinión

Medidas de actuación

Entre las actuaciones realizadas entre 2019 y 2023 para alcanzar los objetivos de la ‘Estrategia Fin a la Tuberculosis’, la Consejería destaca el seguimiento que se realiza de los casos para conocer la infección, el estudio de los contactos y el control sobre las explotaciones ganaderas. 

Por ejemplo, resaltan que, con el fin de recabar la información necesaria para la investigación de la posible fuente de infección, el paciente se somete a una encuesta epidemiológica y se le hace un seguimiento del caso hasta el fin del tratamiento.

Asimismo, para mejorar los condicionantes de salud de los pacientes de tuberculosis, la Consejería de Salud se coordina con organizaciones no gubernamentales, como Cruz Roja, y los Servicios Sociales, para aportar alimentos, productos de higiene, ropa de abrigo, ayuda para transporte, acompañamiento al hospital, ayuda para medicación, mejora del entorno o búsqueda de alojamiento alternativo. Una labor que realizan a través del mapa de recursos de cada zona geográfica con el que trabajan los respectivos trabajadores sociales del sistema sanitario público, que también se encargan de realizar informes de arraigo y habitabilidad, así como de informar al paciente sobre el procedimiento de regularización por enfermedad sobrevenida e incapacidad laboral transitoria.

Tuberculosis en animales

Una acción fundamental en la lucha contra la tuberculosis es su control en los animales para evitar su transferencia a humanos. Por ello, la Consejería de Salud, en colaboración con la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, chequea las explotaciones bovinas para detectar animales positivos a tuberculosis y obligar al sacrificio de los reaccionantes positivos, indemnizando al ganadero.

En esta línea, para evitar que la leche pueda ser un vehículo de transmisión, la Consejería resalta que se verifica, por parte de los inspectores de salud pública, que la leche “es tratada térmicamente a una temperatura que elimine la presencia de micobacterias y que solo se usa leche cruda (para consumo y queso) de rebaños libres de esta enfermedad”. 

Según se recoge en el informe que la consejera compartió en el Consejo de Gobierno con motivo del Día Mundial contra la Tuberculosis, que se celebra el próximo 24 de marzo, dicho control se realiza en las 260 empresas transformadoras de leche ubicadas en Andalucía.

Reducción a la mitad en dos décadas

Aunque la pandemia ha supuesto un retroceso en la lucha contra la tuberculosis, cabe destacar que en las últimas dos décadas se han reducido prácticamente a la mitad los casos de esta enfermedad. En 2004, primer año del que se tienen registros, se notificaron 1.208 casos de tuberculosis en Andalucía, mientras que en 2023 se recogieron 618 casos en toda la comunidad, según los datos publicados por la Consejería de Salud.