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Pruebas de altura para soñar con algo más

Los próximos rivales del Málaga son Fuenlabrada, en mitad de la tabla, y los favoritos al ascenso directo: Espanyol y Mallorca - Caye sufre una sobrecarga aún pendiente de evaluación

Jairo Samperio, durante el encuentro del sábado en Gran Canaria

Jairo Samperio, durante el encuentro del sábado en Gran Canaria / LaLiga

Mar Bianchi

Mar Bianchi

Con 49 puntos en el zurrón blanquiazul y a falta de siete jornadas para la conclusión de la temporada 2020/21, el discurso sobre la permanencia se puede considerar algo cosa del pasado en Martiricos. El empate del pasado sábado en el Estadio de Gran Canaria, ante una UD que no lo puso nada fácil, dejó a jugadores, cuerpo técnico y afición con un regusto amargo, pero la ilusión seguirá siendo la que marque el final de campaña para los hombres de Sergio Pellicer.

Los últimos meses de junio vividos por los malacitanos han sido abruptos. Primero, el año del descenso, después el sufrimiento del play off ante el Dépor y por último el baile con la Segunda B que se tuvo el curso pasado hasta casi el último momento, además en aquel entonces la situación institucional y económica de la entidad estaba era más comprometida que a día de hoy y el fantasma del descenso administrativo sobrevolaba La Rosaleda. Las tornas, por suerte, han cambiado y mucho desde que Pellicer dirige a la plantilla, Manolo Gaspar recluta jugadores por el mínimo precio posible y José María Muñoz gestiona y supervisa cada documento y cada recoveco del club.

El equipo afronta la recta final de la temporada con el único objetivo de superarse a ellos mismos, hasta donde las matemáticas lleguen. Para avivar el sueño tendrán que superar los próximos partidos, encuentros de alto voltaje en los que los boquerones, entre otros, tendrán que medirse a los principales candidatos directo a la máxima categoría.

La cita de la semana que viene será contra el Fuenlabrada. El conjunto madrileño está situado en mitad de la clasificación, una posición de calma, a mucha distancia de la fase de ascenso a Primera División, pero también con un colchón importante para no caer en puestos de descenso. Un partido que supondrá el reencuentro con un exmalaguista hasta hace muy poco: Alex Mula.

Del partido ante los madrileños dependerá en gran parte las opciones de los de Pellicer hacia el play off, ya que justo después tendrá que enfrentarse a Espanyol y Mallorca, los favoritos al ascenso directo a la máxima categoría. Dos partidos de alto voltaje ya que catalanes y mallorquines querrán certificar cuanto antes el pase a Primera. En la primera vuelta, en ambos enfrentamientos el Málaga CF acabó recibiendo tres goles, cayó en casa ante los periquitos por 3-0 tras el doblete de Embarba y el gol de Raúl de Tomás y salió de Son Moix con derrota por 3-1: Ndiaye, Raíllo y Dani Rodríguez pusieron los tantos locales y Chavarría marcó el gol del honor blanquiazul.

Estado de la enfermería

A estas altura de la temporada y con una plantilla muy limitada, el desgaste físico se convierte en actor protagonista en el día a día del Málaga CF. En el partido ante Las Palmas, después de una hora de esfuerzo y sacrificio en el terreno de juego, Caye Quintana tuvo que sentarse en el banquillo por una sobrecarga muscular todavía pendiente de evaluación.

A falta de la revisión de los servicios médicos blanquiazules, y a la espera de que afecte lo menos posible al delantero, el de Isla Cristina engrosa una lista a la que también forman parte Escassi con sus molestias en el talón derecho, que no le dejaron llegar a tiempo al choque en Canarias, Luis Muñoz con una lesión muscular en los isquios de su pierna izquierda, Mejías tocado en el recto anterior de su cuádriceps izquierdo y los canteranos Ismael Casas, con un edema óseo en el tobillo e Hicham, que a penas ha tenido presencia esta temporada por continuas molestias en el bíceps femoral.

Cada recuperación será un alivio para el cuerpo técnico y un valor añadido al equipo. Aunque los canteranos sigue tirando del carro -y la última prueba de ello es el crecimiento que está experimentando Ale Benítez, la estabilidad que ofrecen jugadores como Escassi y el poder ofensivo de Luis Muñoz marcan diferencias,