Un ancla donada por la Autoridad Portuaria adornará el Paseo Marítimo

Un ancla donada por la Autoridad Portuaria de Málaga que ha pintado el artista local Curro Leyton ocupará la fuente de la glorieta de La Fontanilla, en el Paseo Marítimo.

La escultura cuenta con un diseño singular que refleja la importancia del sol y del mar para la ciudad y se sitúa en el mismo emplazamiento que ocupaba la estatua de La Venus, otro símbolo identitario de Marbella, hasta que fue retirada para repararla y reubicarla en el espigón de la playa de El Faro, a escasa distancia del mar.

Los colores que adornan el ancla cedida por la Autoridad Portuaria son el azul y el amarillo, ya que el primero simboliza «el celeste del cielo y el amarillo, el del sol porque son símbolos que, tanto los turistas como los residentes, asocian claramente con la localidad», señala el artista que ha decorado la pieza.

«Es un estilo que mezcla el cubismo con el pop art y que apuesta por la sencillez, porque es un ancla que ya llama suficientemente la atención y no era necesario recargarla», explica el autor, que, entre otras actuaciones, ha decorado la fachada del Palacio de Ferias y Congresos Adolfo Suárez de Marbella; y parte de las zonas de agua del Bulevar de San Pedro.

«Es un orgullo para mí que el Consistorio haya depositado su confianza en mí para transformar una pieza que se encuentra en un lugar tan destacado de Marbella como es el Paseo Marítimo», apunta el autor.

El concejal de Obras, Diego López, destaca que «cuando hace un mes se trasladó la emblemática estatua de La Venus a su nueva ubicación quedaba un vacío que era necesario llenar y creo que esta es una imagen atractiva y diferente que ha logrado aportar modernidad a un elemento tradicional que está muy vinculado a nuestra tierra».

La estatua de La Venus se reubicó hace un mes en el espigón circular de la playa de El Faro, próximo a la fuente que alberga el ancla donado por la Autoridad Portuaria.

La figura, creada por el artista granadino Francisco López Burgos, se inauguró en 1972 en el espigón de una playa del mismo nombre que la estatua -que representa a una mujer practicando esquí acuático- y que, a inicios de la década de los años noventa, se eliminó, por lo que el Ayuntamiento tuvo que encontrar otro emplazamiento para que, 30 años después, volviera a ubicarse cerca del mar.

El Consistorio habilitó una fuente con base de luces LED, de bajo consumo, y agua reciclada en el espigón de la playa de El Faro para reubicar la estatua elaborada en bronce y de unos tres metros de altura.

En su ubicación primigenia, La Venus miraba a Poniente y en su nuevo emplazamiento, lo hace a Levante.

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