Marbella pone en marcha medidas de emergencia para hacer frente a la sequía

El Ayuntamiento de Marbella anunció ayer una batería de medidas de emergencia, buena parte de ellas con severos efectos sobre el día a día de los vecinos, para tratar de alcanzar el 20 por ciento en el ahorro de agua que reclama la Junta de Andalucía a los consistorios para hacer frente a la crisis hídrica que padece la región ante la escasez de lluvias.

Las medidas, orientadas a evitar posibles restricciones en el consumo de agua potable y garantizar la próxima campaña estival, establecen la prohibición de regar jardines, huertos, praderas, parques o zonas verdes y deportivas, públicos y privados; y baldear calles, aceras o fachadas, públicas y privadas, salvo las autorizadas por razones sanitarias y, en ningún caso con agua apta para el consumo humano.

Se deniega también el llenado o rellenado de piscinas privadas; el uso de duchas y surtidores públicos; el lavado de coches, salvo en establecimientos autorizados que tengan sistemas de reciclado y recirculación del agua; y las fuentes y lagos ornamentales lúdicos o deportivos, públicos o privados, salvo que tengan sistemas de recirculación.

Se impide además la utilización de agua de las bocas de riego e hidrantes sin autorización expresa y por escrito de la entidad suministradora o el Ayuntamiento, salvo en caso de incendio, mientras que las fuentes para consumo humano se destinarán exclusivamente a este uso y se restringe cualquier otro.

La Policía Local realizará las tareas de vigilancia y control del cumplimiento de las medidas y las conductas infractoras podrán ser sancionadas con multas económicas.

Las calles no se baldearán

El Ayuntamiento limitará «al máximo» el uso del agua, señaló el concejal de Servicios Operativos, Diego López, lo que supone eliminar los baldeos de los espacios públicos -una medida de calado en un municipio turístico a semanas de la época navideña- y restringir el riego de las zonas verdes, que se hará con sólo con tres camiones de 10.000 litros y otros tres de 8.000 litros.

Las medidas, sin embargo, serán insuficientes para alcanzar el ahorro que reclama la Junta, ya que el Ayuntamiento gasta cerca del siete por ciento del agua que se consume en el municipio, por lo que López apeló a la «colaboración expresa» de los vecinos.

«Estamos ante momentos muy delicados. Si la ciudadanía no colabora, la ciudad nunca estará limpia», advirtió.

El pantano La Concepción, que abastece de agua a Marbella, cuenta con reservas para garantizar el suministro durante siete semanas si persiste la situación de sequía, según el Ayuntamiento.