Religión

La lluvia impide a los malagueños reunirse en la calle con sus Patronos

La lluvia intermitente durante toda la jornada obligó a suspender la procesión de San Ciriaco y Santa Paula

Los patronos permanecieron en la iglesia de los Mártires.

Los patronos permanecieron en la iglesia de los Mártires. / L.O.

La lluvia intermitente que cayó todo el día de ayer sobre la capital arruinó las expectativas de la Congregación de San Ciriaco y Santa Paula, que tenía todo preparado para celebrar una brillante procesión de los patronos de Málaga, por las calles de la ciudad.

Al no ser festivo local, el hecho de que la festividad cayera en domingo había multiplicado las expectativas de malagueños y devotos de ver a los santos patronos en una procesión que tenía previsto partir a las siete de la tarde de la iglesia de los Mártires.

A la hora señalada, decenas de malagueños esperaban en vano, paraguas en mano, en la plaza de los Mártires. La congregación retrasó su decisión para ver si el tiempo acompañaba. Pero no fue así.

La lluvia intermitente, más propia de un clima tropical, obligó a la congregación a suspender la salida para preservar las imágenes que tallara Jerónimo Gómez de Hermosilla y el trono de Manuel Toledano, restaurado en 2016 por Antonio Berdugo, bellamente adornado.

En su lugar, se realizó un acto de oración, al que asistió la corporación municipal encabezada por el alcalde, Francisco de la Torre, y las imágenes, mecidas por los hombres de trono a los sones de la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora del Carmen y la Banda de Música de Zamarrilla, quedaron expuestas hasta las once de la noche.

La lluvia fue escasa, alcanzando de máxima los 14,3 litros en el canal de la Encantada (El Choro), al cierre de esta edición, y 11,1 en el repetidor de la Encantada, seguida a distancia por los 4,2 litros en Colmenar, pero lo justo para impedir que los malagueños pudieran encontrarse con los patronos por las calles de la ciudad.