Jorge Rando: de sus inicios a sus mariposas de madurez

El Museum Jorge Rando de Málaga presentó ayer una exposición que enfrenta el último ciclo de Mariposas de Jorge Rando con obras de los inicios de su trayectoria artística, pertenecientes a los años 60 y 70. La muestra estará en cartel hasta el 28 de febrero del 2023 y la entrada es, como siempre en este centro cultural, gratuita.

Desde 2019, Jorge Rando se ha guiado «por la crisálida en la consecución de unas obras convertidas en episodios de un testamento contemporáneo sobre la esencia de la vida desde una visión humanista, que sin necesidad de ser religiosa, evoca al espíritu», señalan desde el museo.

Así, en la Sala 9 un conjunto de obras evocan el relato bíblico del infierno, en palabras de Santo Tomás de Aquino, «el lugar de los condenados». «A lo largo de los siglos la filosofía, las artes o la teología han hendido en este concepto que Rando traslada al lenguaje contemporáneo para presentarlo ante la sociedad de su tiempo como símbolo del cautiverio del espíritu», añaden.

Las obras sobre lienzo destacan por su belleza y elegancia en contraste con la dureza de su temática. «Se alzan las mariposas con la perfección del trazo en tinta negra que define cada una de las partes de sus efímeros cuerpos». Rando, que bajo el lema También mis mariposas bajaron a los infiernos, alerta sobre la separación del ser humano de su espíritu a través de sus obras.

En la segunda parte, la de los inicios de su trayectoria artística, «la espátula vuelve a ser protagonista». En palabras de la poeta y crítica Carmen Pallarés «Rando, de joven, ya pintaba con la pericia y la experiencia de una madurez que le llevaba, por ejemplo, a elegir la herramienta de la espátula, un instrumento casi endiablado del que muchos no quieren saber nada, porque su impronta es siempre poderosa y parece tener voluntad propia».

Los cuadros se expresan como «mediatizadores de esas realidades en la que consigue Rando que las identidades vayan habitando en la pintura». De esta forma, Rando se decantó por el retrato durante sus inicios artísticos, pues le permitía «convertir el rostro humano en argumento, partir de las realidades mundanas para dar respuesta a la premisa principal de su pintura».

Asimismo, el Museo Jorge Rando anticipó ayer una de sus próximas muestras, Encuentro en la arena, en colaboración con el Museo Casa Natal de Picasso, ya que la muestra consiste en «un diálogo entre las obras de los dos pintores malagueños».

El jefe de Promoción Cultural de la Casa Natal, Mario Virgilio Montañez, indicóque «debido a la excelencia de este museo, el Museo Casa Natal de Picasso invitó al Museum a sumarse a los actos conmemorativos del cincuentenario de la muerte de Pablo Picasso». De esta forma, en primavera se inaugurará esta exposición inédita, «un mano a mano con dos maestros de la creación: Pablo Picasso y Jorge Rando».