Repostería

Confitería Daver: Arte pastelero

Si hablamos de pastelería y chocolate en Ronda estamos hablando de Daver, un espacio donde surgen innovadoras propuestas creadas por David Verdú y Patricia Benítez, quienes ya preparan sus archiconocidos zapatos de tacón de chocolate para el próximo Día de los Enamorados.

Propuestas para un San Valentín muy dulce.

Propuestas para un San Valentín muy dulce.

La altísima calidad de sus materias primas y la constante incorporación de técnicas innovadoras en los procesos de creación de pasteles, helados, chocolates, bollería, hojaldres, bizcochos, etc. han hecho de la confitería Daver, en la localidad de Ronda, un referente de los sabores más dulces malagueños y andaluces. David Verdú es la tercera generación familiar en Daver, creció entre olores embriagadores y se formó con los mejores maestros, como el asturiano de Gijón Salvador Álvarez Maño, quien le adoctrinó en su archiconocido y reconocido hojaldre de mantequilla, una de las piezas más exquisitas de la pastelería rondeña y uno de sus productos más reconocidos y demandados. Fue en 1998, cuando David Verdú, nieto de heladero artesano e hijo de un gran emprendedor que también regentó el negocio familiar, se hace cargo de la empresa junto a su mujer, Patricia Benítez, aportando un matiz diferenciador y reconvirtiendo la confitería en la primera sala de degustación de Ronda. Un espacio donde las innovadoras especialidades de pastelería fina y bombonería creadas por este gran maestro ocupan luminosas y apetitosas vitrinas. En la actualidad son dos los establecimientos que David y Patricia tienen en Ronda (Virgen de los Remedios, 6 y Espinel, 58) en las que trabajan un total de 18 personas, además de la tienda online (www.confiteriadaver.es), donde se puede realizar cualquier pedido, la confitería rondeña también surte a hostelería y a empresas de catering todo tipo de dulces y también unos sabrosos canapés salados artesanales. Entre sus productos estrella de temporada hay que mencionar todos los vinculados a la próxima celebración del Día de San Valentín (14 de febrero): la pastelería en esa fecha pasa por cualquier expresión de chocolate (muchas con forma de corazón, por supuesto), corazones de este ingrediente rellenos de bombones, postres individuales y tartas con mensajes escritos en exquisitos mousse hechos con varios tipos de chocolate (con leche, blanco, o chocolate negro). Pero si hay un producto que es santo y seña de Daver y muy representativo de la fiesta de los enamorados es su archiconocido zapato de tacón de chocolate, una pequeña obra de arte de orfebrería confitera que se ha convertido en un sello de identidad de la casa y que tiene gran aceptación por parte de la clientela. También muy cercana se encuentra ya la Semana Santa, y en Daver la celebran ofreciendo a su clientela productos tan característicos y exquisitos como los pestiños, las torrijas -haciendo especial hincapié en las rellenas con crema de naranja- los gañotes, los piñonates, la leche frita o las empanadillas rellenas con cabello de Ángel. Uno de los secretos de Daver es el producto: materias primas de gran calidad como la leche, la nata, la mantequilla, el aceite de oliva virgen extra y huevos de calidad excelsa de productores de cercanía forman parte de su oferta y se mezclan con el arte repostero de David y Patricia. La satisfacción que le procesan los clientes y el amor por la profesión de David Verdú provocó que en febrero del año pasado se alzara con el Premio Repostería de nuestro suplemento El Delantal de La Opinión de Málaga.

Confitería Daver: Arte pastelero

Confitería Daver: Arte pastelero