Terremoto
Nuevo rescate de los bomberos de Málaga en Turquía: una madre y sus hijas atrapadas bajo los escombros
Llevaban sepultadas cuatro días y los efectivos lograron encontrar sus cuerpos con vida después de una intervención que duró once horas
La Opinión
Bomberos del Consorcio Provincial de Bomberos de la Diputación de Málaga, que forman parte del equipo de Bomberos sin Fronteras hicieron el viernes un rescate de personas con vida, concretamente en Kahramanmaras.
Se tratan de una madre con dos hijas sepultadas durante cuatro días por los escombros de un edificio de viviendas. La intervención duró 11 horas con la esperanza de encontrar a más cuerpos con vida. Por desgracia, la familia que vivía en el piso superior no sobrevivió.
Un total de cinco bomberos del CPB de Málaga continúan ofreciendo ayuda humanitaria al pueblo Sirio, tras finalizar el viernes por la noche las tareas de búsqueda de personas con vida en los escombros, tras el terremoto que ha azotado el sudeste de Turquía y norte de Siria.
El pasado 6 de febrero el primer contingente de bomberos del CPB de Málaga partió hacia Turquía con un vuelo hacia Estambul, donde tomarían otro vuelo a Adana para continuar otros 800 kilómetros hacia la zona cero. El día 7 se desplazaron los otros dos contingentes del Consorcio malagueño, para ayudar con las labores de búsqueda de personas con vida. De esta forma, junto a las ONG Bomberos Sin Fronteras, Bomberos por el Mundo y G.E.R.C.C.M.A, se han unido a compañeros de otras provincias, y provistos de perros, equipos de sonido y herramientas de desescombro y derribo, se han trabajando durante cinco días.
- Así serán las nuevas universidades privadas de Málaga
- Una borrasca barre la costa y deja lluvia en La Viñuela
- Los embalses de Málaga ganan otros 0,7 hectómetros
- Cuatro platos malagueños, entre los peor valorados para los extranjeros
- El Puerto de Málaga se centra en su proyecto estrella: la construcción del muelle 8
- Un siglo de la Casa de las Palmeras de Guerrero Strachan
- «Esto es lo que hay»: ¡bang! ¡bang! ¡bang!
- Asfixia erótica: «La gente está obsesionada con llegar al orgasmo»