Tecnología

Así se imagina la Inteligencia artificial cómo será Málaga en el 2100

Imaginar el mundo en el futuro ha sido una interrogante recurrente en la mente de muchos. Sin embargo, gracias a la Inteligencia Artificial se puede predecir cómo será la ciudad de Málaga en el año 2100

La tecnología estará presente en el funcionamiento de la capital, que se convertirá a finales de siglo en un ejemplo de sostenibilidad

Chaima Laghrissi

Chaima Laghrissi

Imaginar el mundo en el futuro ha sido una interrogante recurrente en la mente de muchos. Aunque anticipar con certeza lo que ocurrirá en las próximas décadas es un desafío, debido a la multitud de variables desconocidas y cambios impredecibles que podrían surgir.

Sin embargo, gracias a la Inteligencia Artificial se puede predecir cómo será la vida en un futuro en Málaga. Aunque esta tecnología apunta que «es difícil predecir con certeza en unos años», así se ha imaginado la IA cómo será Málaga en el 2100.

Los robots harán vida con los malagueños. | L.O.

Los robots harán vida con los malagueños. / L. O.

Urbanismo y arquitectura

Si las Torres de Martiricos y la futura Torre del Puerto han generado debate entre los malagueños, parece ser que el futuro de la capital pasará por los rascacielos.

Los edificios de grandes alturas serán los protagonistas de la Málaga de finales de siglo. Esto posiblemente se deba al crecimiento de la población y la necesidad de optimizar el uso del espacio. Aún así, las imágenes muestran que los edificios bajos, que conocemos hoy en día, convivirán con esta arquitectura.

Asimismo, Málaga será un ejemplo de innovación sostenible. Actualmente, la capital es la segunda ciudad europea donde más personas mueren debido al efecto isla de calor. Diversos estudios advierten de la necesidad de implantar más árboles y espacios verdes, para conseguir reducir las temperaturas en las ciudades. Dada la creciente conciencia sobre el cambio climático, la capital buscará soluciones más sostenibles.

Renaturalización del Guadalmedina. | L.O.

La marina de megayates de Málaga. / L. O.

Por lo que las islas de calor se intentarán combatir mediante construcciones y diseños biolíficas, por lo que las zonas verdes y la presencia de árboles estará presente a lo largo de las calles y a través de los edificios, para conseguir así ciudades más ecológicas.

Cada edificación incorpora avanzados sistemas inteligentes para la gestión de energía, aprovechando fuentes como la energía solar y eólica. Estas construcciones también cuentan con áreas verdes estratégicamente ubicadas en sus terrazas, contribuyendo así a la creación de entornos más sostenibles y amigables con el medio ambiente.

Por otro lado, la IA muestra una renaturalización del río Guadalmedina. Las calles tendrán un aspecto muy futurista, donde los robots también compartirán espacio con las personas.

Así se imagina la IA cómo será Málaga en el 2100

Renaturalización del Guadalmedina. / L. O.

La tecnología también se imagina cómo será el Puerto de Málaga dentro de 76 años. El muelle de la capital continuará manteniendo su marina de megayates y los cruceros que llegarán tendrán aspectos futuristas. Además de servir como puerto para drones.

La lonja pesquera de la ciudad seguirá siendo una de las arterias principales para la entrada de mercancías. Un espacio que se adaptará a la sostenibilidad de la ciudad e incluirá placas solares y molinos eólicos.

En cuanto al transporte, la IA muestra una red de transporte público eficientes y sostenibles, como vehículos autónomos. El metro atravesará el corazón de las ciudades y compartirá calle con los coches. Automóviles que no cambian su aspecto del todo, solo más sofisticados y eléctricos.

Paseo marítimo de Málaga. | L.O

Red de transporte en el 2100. / L. O.

A la red de movilidad se incluyen los drones, que se convertirán en habituales, tanto para las personas como para transportarmercancías.

La Inteligencia Artificial se aventura a predecir cómo será la economía y el empleo en 2100, en la capital: «Las ciudades tienden a evolucionar en función de la economía global. Málaga podría especializarse en nuevas industrias o tecnologías emergentes, afectando la estructura económica y la demanda de habilidades laborales», indica.

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