Virgen de Belén: 20 años de un enigma urbanístico

«Yo creo que aquí lo único que falta es voluntad política, que el Distrito, que Urbanismo -el que sea- diga: vamos a arreglarlo», sentencia Virginia Rodríguez, expresidenta de la Asociación de Vecinos Virgen de Belén y vecina del bloque de la calle Chico del Matadero, 10, un edificio que a sus pies tiene todo un enigma urbanístico: una parcela sin dueño oficial de 1.076 m2, calificada como viario público en el PGOU. 

Como recuerda, los vecinos comenzaron en 2004 a indagar por su propietario y tras 20 años, a pesar del auge de la informatización y la digitalización, han sido incapaces de localizarlo. 

Sí encontraron en el Registro de la Propiedad el documento que informa de que la finca es propiedad de la desaparecida Constructora Benéfica Virgen de Belén, que levantó este barrio de la Carretera de Cádiz en los 70. La constructora pertenecía a su vez a la Caja de Ahorros Provincial de Málaga, que también desapareció en los 90 para dar paso a Unicaja. 

En un informe de 2021 para el Ayuntamiento de Málaga, la abogada de los vecinos señaló que esta situación nace de un error jurídico: en 1986 la constructora benéfica cedió «de forma unilateral y gratuita» tres fincas al Ayuntamiento de Málaga. 

Una de ellas, por cierto, era la finca registral 40517, que pasó a propiedad municipal, pero no se cedió una cuarta finca colindante: la 40517/Bis, esos 1.076 m2 sin dueño. Esta finca, diferenciada de la anterior sólo por el ‘bis’ «parece ser era intención de las partes se incluyera en la cesión, pero que, por error, quedó fuera de la misma», concluye el informe. 

«Al tener el mismo número y el bis hubo esa confusión y no se cedió», considera Virginia Rodríguez, quien recuerda que en estos 20 años, los vecinos han removido Roma con Santiago y también se han dirigido a quien, por lógica, debiera ser el propietario de la parcela: Unicaja, dado que se trataba de un solar de la Caja de Ahorros Provincial de Málaga, uno de los bancos que se fusionaron para crear esta nueva entidad. 

Pero en 2018, tanto Unicaja Banco como la Fundación Unicaja informaron a este periódico de que no tenían esa parcela en propiedad y lo mismo contestó la Diputación, creadora de la Caja de Ahorros Provincial de Málaga. 

También se implicó en la búsqueda el anterior concejal de Urbanismo, Raúl López: Como trasladó a este periódico, para el Ayuntamiento el propietario de estos 1.076 m2 es la Fundación Unicaja y por eso le reclamó, sin resultado, que limpiara la parcela. Por este motivo, Virginia Rodríguez reitera que los vecinos están dispuestos a costearse el transporte a Ronda para, en los archivos de Unicaja, tratar de localizar el documento de la propiedad. 

Riesgo de incendio

El paso de los años sí ha hecho que el Ayuntamiento reivindique los terrenos aledaños que les cedió la constructora del barrio en 1986 y así, ganó un contencioso a la Fundación Prometeo por haber vallado y hecho uso de estos terrenos públicos, que el Consistorio recuperó en 2021 tras ordenar demoler además dos construcciones.

Los vecinos consideran que esta fundación se sigue extralimitando y haciendo uso de metros cuadrados que no le corresponden en la parcela sin dueño, lo que les pone en un serio aprieto, pues, como ya comentaron a este periódico, junto a los bajos del bloque, Fundación Prometeo ha colocado una techumbre que se ha convertido en refugio de indigentes y en permanente foco de basura. De hecho, la pasada semana podían verse huellas de dos fuegos sofocados en uno de los muretes.

Urbanismo limpia el solar sin dueño de Virgen de Belén

«¿Qué pasará el día que esto salga ardiendo y caiga sobre el bloque?», indica María Jesús Aliaga, vecina del bloque, que señala un árbol próximo, casi acorralado en una zona vallada y ajardinada que usa la Fundación Prometeo. 

Los vecinos denuncian que el árbol no se poda y que hay peligro de caída de ramas, además de riesgo de incendio por la acumulación de hojas secas, así como por la presencia en las inmediaciones de un transformador de luz. «Todo esto puede prender fuego cualquier día», alerta Juan Álvarez, también vecino del edificio.

María Jesús tacha la situación de «patética» y subraya que además es un foco de infección con ratas «que se suben al bloque».

En 2022, Juan Luis Miñano, responsable de la Fundación Prometeo informó a La Opinión de que esos anejos que traen de cabeza a los vecinos pertenecían a una sociedad mercantil y que la fundación los limpiaba de forma periódica. La pasada semana declinó hacer declaraciones alegando motivos de salud. 

Por su parte una responsable de la Fundación Unicaja remitió a lo que la entidad ya señaló en 2018: la parcela no se encuentra entre sus propiedades. 

Tras 20 años, el misterio urbanístico y los problemas continúan en Virgen de Belén. 

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