Málaga presenta ya los mejores salarios de Andalucía pero persiste la alta rotación laboral y el "desajuste formativo"

El mercado laboral de Málaga presenta ya los mejores salarios de Andalucía (18.280 euros al año, según los últimos datos del IECA), superando el tradicional primer puesto de Sevilla, pero sigue mostrando problemas como la excesiva rotación de trabajadores, la persistencia de la brecha salarial por sexo y edad o el "desajuste educativo" existente entre oferta y demanda, que hace que muchos asalariados ocupen puestos de trabajo de menor cualificación a la que corresponde su formación. Esta realidad aparece reflejada en un informe presentado este miércoles por el sindicato CCOO de Málaga, que refleja, por ejemplo, que el 27% de los ocupados malagueños con educación superior está en empleos por debajo de lo que tendría que ser su categoría profesional

El estudio de CCOO recuerda que el Salario Bruto Anual, que es la suma de las percepciones salariales recibidas por cada asalariado, presentó una media de 18.280 euros en 2022, según los últimos datos del Instituto de Estadística y Cartografía de Andalucía (IECA). El nivel es superior al de la media andaluza (17.233) en 1.407 euros pero inferior a la media nacional (21.681) en 3.401 euros, como viene siendo habitual. Málaga está ya a la cabeza de Andalucía, seguida ahora por Sevilla (18.259).

La brecha salarial persiste en Málaga: las mujeres tendrían que ganar un 25% más para equipararse en ingresos al hombre

La mejora del nivel de salarios obedece a varios factores, según han explicado el secretario general de CCOO de Málaga, Fernando Cubillo, y la secretaria de la Mujer, Empleo y Formación del sindicato, María José Prados. Por un lado, a las sucesivas subidas del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), que han beneficiado a 80.000 trabajadores, y a los incrementos negociados en la negociación colectiva de los convenios y, por otro, el mayor peso del empleo tecnológico en el tejido productivo de Málaga, que tira al alza de la media salarial.

No obstante, CCOO lamenta que una parte significativa del empleo en Málaga sea a jornada parcial, lo que limita los ingresos de muchos trabajadores, en especial de las mujeres, donde este tipo de contratos son más frecuentes. Según el informe, y a partir de los datos del IECA, los ocupados de la provincia trabajan de media un 73,7% del tiempo que supone trabajar todo el año a jornada completa. La diferencia hasta el 100% representa los períodos cortos de trabajo, los períodos de interrupciones o suspensiones de contratos, y las distintas formas de temporalidad y/o parcialidad en las contrataciones. Este porcentaje de trabajo de Málaga es superior al andaluz (72,0%) e inferior al nacional (79,4%). 

Estas características provocan en buena parte la persistencia de la brecha salarial entre hombres y mujeres. En 2002, el salario bruto medio de ellos fue de 20.025 euros al año, superando en 3.629 euros al de las mujeres (16.396), lo que supone una distancia, expresada en porcentajes, del 22,1%. Según CCOO, la brecha también responde a la menor presencia femenina en los puestos de trabajo directivos y/o con mayor salario, a su mayor peso en puestos en sectores productivos con menores sueldos o, incluso, a "reglamentaciones o prácticas empresariales" en las que los salarios y los complementos salariales de la mujer son inferiores a los de los hombres en igualdad de condiciones profesionales.

"Reducir esta brecha supone llevar a cabo planes de igualdad y auditorias retributivas en las empresas”, han asegurado los responsables de CCOO Málaga.

Poca fidelización de las empresas

Otro factor diferencial es la edad. El salario medio oscila entre los 10.232 euros anuales de los menores de 30 años frente los 21.911 euros de los comprendidos entre 50 y 59 años. Y aunque el tiempo trabajado explica una parte de estas diferencias, el sindicato apunta también a otras causas que actúan "en contra" de los jóvenes en el mercado laboral, como "la falta de experiencia laboral, o en una cierta discriminación juvenil en el mercado de trabajo, de modo especial en contratos de trabajo como los de formación o los de los becarios".

"Es decir, quienes tienen los peores salarios son las personas jóvenes menores de 30 años, que ingresan una media de 852 euros al mes, donde sus jornadas en la gran mayoría son parciales. La falta de experiencia redunda también en la brecha salarial. A más experiencia, mejor salario, y suele ser por la antigüedad en la empresa donde se dan mejores salarios y se ocupan puestos de mejores categorías profesionales", señala el sindicato.

El estudio de CCOO también hace hincapié en que la antigüedad en la empresa tiene una estrecha relación con el salario percibido y lamenta, en este caso, la poca predisposición de las empresas a la hora de fidelizar a sus trabajadores. El sindicato destaca que sólo el 20% de los asalariados de Málaga lleva más de diez años en la misma empresa. La tasa se eleva hasta el 33% en el caso de empleados con más de cinco años de pertenencia en un mismo empleo. Visto desde la otra perspectiva se comprueba así que uno de cada cuatro trabajadores de Málaga únicamente tiene seis meses de antigüedad en su empresa y apenas un tercio alcanza el año, lo que refleja una alta rotación laboral.

CCOO cree, por tanto, que vincular la antigüedad en la empresa con la experiencia laboral es "fundamental" para estabilizar las plantillas, ya que así se garantizan mejores salarios y mejora la productividad. "No puede ocurrir que tengamos trabajadores y trabajadoras con gran experiencia laboral, pero poca antigüedad en la empresa, son personas a las que se les despide con frecuencia, ha denunciado Cubillo.

"Los empresarios dicen muchas veces que no encuentran trabajadores, pero tampoco hacen nada por fidelizarlos. Todo eso lleva al final a una baja productividad", opina Cubillo.

Reparto territorial de empleos y salarios

La observación de la estructura del empleo constata además que en Málaga, los municipios de menos de 40.000 habitantes presentan el menor peso de toda Andalucía (sólo el 21,4% del total de la provincia), frente a las altas proporciones de Huelva (77,3%), Jaén (74,2%) y Granada (71,0%). En cambio, en los municipios entre 40.000 y 100.000 habitantes la proporción de Málaga (35,4%) es la mayor de Andalucía, seguida de Cádiz (33,9%). Y en los municipios con más de 100.000 habitantes la proporción de Málaga (43,1%) vuelve a ser la mayor de Andalucía, seguida de Sevilla (40,5%) y Cádiz (36,0%).

"Esto quiere decir que la población asalariada en Málaga está más concentrada en los municipios de mayor número de habitantes que la media andaluza o nacional. Así, la población asalariada en los municipios de más de 40.000 habitantes representa el 78,5% del total de asalariados de la provincia, mientras que en Andalucía (51,7%) y en España (55,6%) apenas superan la mitad de los asalariados", apunta el informe. Hay once localidades con más de 40.000 habitantes en la provincia: Rincón de la Victoria, Alhaurín de la Torre, Málaga capital, Torremolinos, Benalmádena, Antequera, Estepona, Fuengirola, Marbella, Mijas y Vélez-Málaga

Esta mayor concentración de la población asalariada según el número de habitantes de los municipios también se comprueba calculando la media de asalariados por localidad. Así, en los 92 municipios malagueños con menos de 40.000 habitantes, la media es de 1.505 asalariados por municipio, mientras que en los nueve municipios entre 40.000 y 100.000 habitantes la media es de 25.430 asalariados.

CCOO añade que hay una relación "indudable" entre el salario y el tamaño del municipio. De menor a mayor número de habitantes, el salario medio de cada grupo es de 14.891 euros para los municipios de menos de 40.000 habitantes; de 18.776 euros para los municipios entre 40.000 y 100.000 habitantes; y de 19.557 euros para los municipios de más de 100.000 habitantes (en la provincia, sólo Málaga y Marbella) . "El salario medio aumenta a medida que aumenta el número de habitantes de los municipios. En la provincia el salario medio para los tres grupos de municipios antes señalados así lo muestra", apuntan. 

El problema del "desajuste formativo"

En cuanto a nivel formativo, la realidad el empleo malagueño se presenta en buena parte, según indica el informe de CCOO, como una estructura "dual", por cuanto que dos niveles formativos (primera etapa de Secundaria, con un 29,5%, y Educación superior, con un 40,6%) recogen el 70% del total de ocupados en la provincia. Respecto a la pasada década, se observa una caída importante de los trabajadores que sólo cuentan con estudios primarios (únicamente representan el 4%, frente al 11% de hace años), lo que indica una recuperación formativa después de aquellos años de la burbuja inmobiliaria, donde muchas personas jóvenes abandonaron los estudios para trabajar en la construcción.

Del análisis de CCOO sí se desprende que el mercado laboral malagueño adolece de "sobreeducación", término que hace referencia a cuando el nivel de formación de los trabajadores es superior a la cualificación exigida por la ocupación que realiza. Este "desajuste educativo" se refleja en que, por ejemplo, los ocupados con Educación Superior (262.000) superan a los ocupados como Directivos y técnicos (191.600) en 70.600.

"Quiere esto decir que, al menos, este número de ocupados con Educación superior están desarrollando ocupaciones en las que se exige un nivel formativo inferior. Y éstos representan el 26,9% de los ocupados con Educación Superior", detalla CCOO.

Del mismo modo, en Málaga hay 84.000 personas en puestos que no requieren cualificación, pero la realidad es que los trabajadores de la provincia que sólo tiene educación primaria son 27.900. Eso significa que hay muchas personas con mayor cualificación desempeñando esos trabajos.

La Málaga tecnológica tiene más del doble de empleo que hace una década y se acerca a los 20.000 ocupados

"El problema que subyace en la 'sobreeducación' es que ésta representa un despilfarro social en cuanto que los requerimientos de nuestro aparato productivo de mano de obra entran en contradicción con los esfuerzos de la sociedad para incrementar la educación de sus miembros, haciendo que parte de esos esfuerzos, sociales y económicos, se tiren por la borda", lamenta CCOO.