Opinión | Memorias en blanco y negro
Madrid F.C. vs Galia Sport, 23 de octubre de 1905
Invitación al partido Madrid Football Club - Gallia Club.
La sed insaciable de los hermanos Padrós por expandir la popularidad del football, en especial la de Carlos –ya no solo por todo el territorio nacional sino a nivel internacional–, hizo que en apenas 3 años de vida con los que contaba la nueva sociedad, organizase el primer partido internacional de la historia del club blanco.
Y fue en concreto un 23 de octubre de 1905, frente al conjunto francés del Galia Sport de París. El motivo para el encuentro fue inmejorable tras recibir la visita en la capital del presidente de la República Francesa, Émile Loubet. Para tal ocasión, el club realizó un gran esfuerzo económico al responsabilizarse del gasto que ocasionaría el desplazamiento del conjunto francés a tierras españolas, los cuales ascendieron a la nada despreciable cifra de 2500 francos de la época. El enfrentamiento entre los campeones de países vecinos en el Hipódromo de Madrid causó, como no podía ser de otra manera, una gran expectación. Fue, pues, gracias a este castizo mecenas catalano-madrileño que el fútbol de la capital comenzaba a tejer relaciones internacionales que con el paso de los años llegarían a ser extraordinarias.
Aquel partido para la historia presentó las siguientes alineaciones: por parte del Madrid jugaron Bisbal, Berraondo, Arsuaga, Yarza, Gallardo, Normand, Parages, Prast, Alonso, Revuelta y Yarrza. El Galia francés presentó la siguiente formación: Pougnet, Luck, Raymond, Dizi, Bally, Bertic, Bally G., Moreno, Bayron, Nicolet y Cristiano (nada que ver con el Cristiano actual).
El partido mostró cordialidad hasta en el resultado final: 1-1. En un extracto de Arte y Sport, podemos destacar a modo de resumen el siguiente comentario acerca del desarrollo del match:
«Aunque otra cosa se diga, y a despecho de los que aseguran que dominó en todo momento el team francés, yo creo honradamente que no hubo tal dominio, sino un equilibrio de fuerzas, que explica perfectamente las alternativas del juego, tan pronto en un campo como en el otro, y el escaso número de tantos que se hicieron en los dos tiempos».
El encuentro fue calificado como un verdadero hito histórico para el Madrid y para toda la sociedad española por todo lo que significó por aquel entonces, no solo en el plano deportivo, sino y casi más importante por la época en la que se vivía, en lo institucional, sirviendo para unir fuertemente los lazos entre España y Francia.
Algo más de un año después del encuentro contra el equipo parisino, exactamente el 5 de enero de 1907, el Madrid tendría menos fortuna y perdería por 0-2 en su segundo encuentro internacional contra el conjunto portugués del Internacional de Lisboa, en su visita al país luso.
La expansión de la marca Madrid Football Club, había traspasado fronteras sin apenas ser conscientes de los niveles de popularidad que lograría alcanzar con el paso de los años, hasta casi un siglo y cuarto después, ser reconocida como la institución deportiva más importante de la historia a nivel mundial.
