Opinión | El Palique

El PSOE aprende Kung-fu

Juan Espadas

Juan Espadas / L. O.

Susana Díaz se resiste. No importa cuando lea esta frase. Antes de ir al Senado y dejar la secretaría general del PSOE-A quiere decidir a quién sustituye y dejar a algunos colocados o en la calle, según sean fieles o afines. Para que ella ocupe escaño de los de designación autonómica en la Cámara Alta han de largar a Marisa Bustinduy, Miguel Ángel Vázquez o Fernando López Gil. Ella quiere laminar a Vázquez, que ha sido muy anti susanista y que fue consejero de Cultura con ella. Hay odio ahí. Quiere morir matando. Aunque el Senado más que la muerte sea el paraiso. Pero los espadistas le han dicho que nones. Que es ella la que ha de ‘matar’ a uno suyo. Y le sugieren: que haga dimitir de parlamentario andaluz a Juan Cornejo, uno de sus íntimos, para que corra la lista (Cádiz) y entre Miguel Ángel Vázquez, que así a su vez deja el Senado para ella. No hay nada decidido pero es una posibilidad. Entre tanto, crece la idea de que María Gámez, actual directora general de la Guardia Civil, sea la uno al Congreso por Málaga en las generales y se atisba un enfrentamiento entre dos por la secretaría provincial en un cónclave que está por definir en cuanto a fecha, dado que (ya han adelantado el comité director los federales para arramblar cuanto antes con Díaz) el congreso regional podría adelantarse.

Los más aguerridos susanistas de la provincia están a la espera. Unos apuestan por la integración, otros por la rendición y no falta quien recuerda que, aunque sea un vano ir contracorriente, han ganado en la provincia. Resituar (se) es el verbo. Un acreditado sanchista malagueño se está interesando por cómo están los alquileres en Madrid. Se le ve hasta más joven en esta etapa.

Estas primarias han servido para comprobar (se lo recriminan unos a otros) qué secretarios generales de agrupación controlan de verdad la suya y quienes la han pifiado prometiendo a la dirección un resultado y obteniendo otro.

Todo esto cuenta mucho, por ejemplo para hacer las listas al Parlamento andaluz, primeras elecciones que enfrentar seguramente. Lista plagada de susanismo. Ahora que está tan de moda la palabra indulto, algunos espadistas piden tal cosa para fontaneros susanistas, «que siempre hacen falta». Espadas se ve esta semana con Juanma Moreno. Será la foto que institucionalice al alcalde de Sevilla. Cada día que pasa le perjudica más ese cargo. Los que esgrimen la peregrina idea de que estar fuera del Parlamento andaluz le perjudica para hacer oposición al Gobierno del PP olvidan dos cosas: que nadie presta atención a ese Parlamento y que la principal opositora a Sánchez es Ayuso, que no necesita estar en el Congreso. Sí en las teles y las redes. A Espadas, como si fuera un aprendiz de Kung-Fu, le están aconsejando que sea más agresivo y más occidental. Paciencia ya ha tenido.