Málaga de un vistazo

Vértigo

Angelines de Lorenzo

Angelines de Lorenzo

Película de Hitchcock cuyo protagonista padece fobia a las alturas. Con el tiempo las fobias se pueden superar, pero también desarrollar, por lo que si se dice que el tiempo todo lo cura, también puede decirse que lo deteriora. Así, la variable tiempo es bastante puñetera, pero finalmente da sentido a nuestra vida que corre con él.

Muchas veces veo la belleza en personas ancianas, porque tuve la suerte de convivir con el adusto efecto del tiempo sin parches. Sin embargo, nos hemos obligado a ocultar la vejez que a muchos genera ya otro tipo de vértigo.

Málaga es cuna de variados vértigos, eminentemente a lo viejo, que descuidamos y desdeñamos, otro selectivamente a megaproyectos de grandes alturas pero bajas miras. No estaría mal tener un distrito con rascacielos junto al Tech Park y futura Expo 2027, por ejemplo, pero seríamos más originales si fuésemos capaces de desarrollar ciudades cuasi autárquicas, tras la experiencia COVID, guerra de Ucrania, etc., a modo de mini países o hábitats, no permitir que lo verde y lo rural desaparezcan con lo tecnológico, inmobiliario y turístico (¿veremos el Proyecto Cinturón Verde de Málaga de 7.600 hectáreas?). Bill Gates ha invertido muchísimo en cultivos, ¿una epifanía?; quizá sepa vivir sin tecnología pero no sin comida y agua, tendrá depauperación-fobia.

El vértigo malacitano podría ser una nueva patología: miedo del político a no ser quien desarrollare las obras civiles más bestias en la historia de la ciudad.

Leí que el PSOE recriminó al alcalde la construcción de VPO, por ser competencia de la Junta de Andalucía (PP) pero no calibran que el tiempo pasa, no la Historia, y anteriores Juntas del PSOE tampoco atinaron con sus deberes y dejaron guetos como Cruz Verde… Hay retos por resolver, algunos heredados, otros recurrentes y actuales, principalmente vivienda y fondos de inversión.

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