SAS y listas de espera en Andalucía: S.O.S.

Tras más de 4 años del «Gobierno del cambio» creo que es conveniente y necesario hacer balance de la situación actual en la Sanidad Pública Andaluza dejando a un lado dogmas y discursos ideológicos, centrándonos en datos y más datos para que cada lector pueda llegar a sus propias conclusiones.

Empezando por lo más importante, seguimos disfrutando de un Sistema Sanitario publico, universal y gratuito como garantía fundamental de nuestro estado del bienestar. No obstante, tal y como veremos a continuación, se está produciendo un deterioro progresivo en la calidad asistencial de la atención sanitaria, percibida claramente por los ciudadanos y profesionales (fundamentalmente en Atención Primaria), así como un crecimiento «insoportable» en las listas de espera, derivado de estrategias erráticas en la política sanitaria.

Según datos del Gobierno Andaluz, en los últimos años se ha producido un incremento en el presupuesto destinado a la sanidad pública, pasando de 10.300 millones de euros en 2019 a 12.300 millones de euros en 2023. En concreto, en el último año, de 2021 a 2022 ha crecido el presupuesto en más de 700 millones de euros (pasando de 11.629 millones a 12.350 millones). Se ha producido un salto cuantitativo, no solo desde el punto de vista presupuestario, sino también en el número de profesionales tal y como viene repitiendo reiteradamente la Consejería de Salud. En concreto, más de 30.000 nuevos profesionales se han incorporado al Servicio Andaluz de Salud en los últimos 4 años (según la Administración autonómica).

Teniendo en cuenta los datos presentados previamente es difícil entender y asumir la evolución de las listas de espera en Andalucía, precisamente en un contexto de incremento presupuestario y de más profesionales.

Poniendo el foco en el último año, y centrándonos en los últimos datos publicados por el Servicio Andaluz de Salud, debemos conocer lo siguiente:

CONSULTAS EXTERNAS: El número de pacientes pendientes de ser atendidos por un médico en Consulta ( incluye los pacientes procedentes de Atención Primaria al hospital y las consultas entre especialidades del propio hospital) ha crecido en 186.000 personas en el último año. En junio de 2021 había 720.000 pacientes pendientes de ser atendidos en consultas externas y en junio de 2022 había 906.000. Es decir, un incremento del 25% SOLO en el último año. Es importante destacar que este incremento se ha producido en TODAS Y CADA UNA de las 8 provincias andaluzas. En Málaga, concretamente, el incremento es de 40.000 pacientes.

LISTA DE ESPERA QUIRÚRGICA: El número de pacientes pendientes de ser sometidos a una intervención quirúrgica en Andalucía ha crecido en 26.600 pacientes en el último año. En junio de 2021 había 123.339 pacientes pendientes de ser intervenidos quirúrgicamente y en junio de 2022 había 150.034. Es decir, un incremento superior al 20%, SOLO en el último año.

A la vista de estos datos, cabe hacerse algunas preguntas. ¿Cómo es posible tal incremento en las listas de espera en Andalucía con más presupuesto disponible? ¿ Por qué no mejoran los indicadores de accesibilidad al sistema sanitario para los pacientes que se encuentran en lista de espera?

Las respuestas a estos interrogantes se complican, aún más si cabe, dado el crecimiento que se ha producido en los conciertos sanitarios en nuestra comunidad autónoma en los últimos años. Incremento que ha supuesto una inyección de cientos de millones de euros al sector privado y una derivación masiva de pacientes a clínicas privadas concertadas.

¿Cómo es posible que un incremento de los conciertos sanitarios no haya aliviado, sino empeorado, la situación de las listas de espera en Andalucía?

A pesar de disponer de más presupuesto que nunca para la sanidad pública andaluza, de más profesionales que nunca trabajando en el sistema sanitario público andaluz y a pesar de haber realizado la mayor transferencia conocida de dinero público y pacientes al sector privado hemos constatado que no sólo NO se han aliviado las listas de espera quirúrgica y de consultas externas, sino que se ha producido un incremento inasumible de las mismas en tan solo 12 meses.

Mi conclusión es muy clara: necesitamos cambios urgentes en la política sanitaria andaluza para facilitar y mejorar la ACCESIBILIDAD de los ciudadanos al sistema público de salud. Veremos si quienes están obligados a corregirlos son capaces de asumir sus errores primero y cambiar de estrategia después, con un objetivo prioritario y fundamental: reducir las listas de espera.

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