La Costa del Sol más negra en 10 crímenes

En Málaga se han producido en los últimos tres años y medio un total de 55 muertes violentas -tanto homicidios como asesinatos-, según los datos del Ministerio del Interior, pero en esta selección se ha prescindido de los asuntos de violencia de género, que tienen una evidente motivación machista y de sumisión de la mujer, y de los habitualísimos de crimen organizado por ajustes de cuentas; se han seleccionado aquellos que fueron perpetrados tras una planificación que debía coronar el dinero, los protagonizados por personalidades cercanas a la psicopatía, los llevados a cabo con el posterior desmembramiento del cadáver o los ejecutados con frialdad, sin rastro alguno de humanidad. Los más difíciles de explicar, en definitiva, y aquellos que más conmoción causaron en la opinión pública.

1. Un asesino en serie que se fijaba en los detalles

En su declaración ante la policía, Abdelkader S. narró cómo acabó a cuchilladas y asfixiándolas con hasta tres prostitutas. «Él tiene un gran asco y habla mal de las prostitutas, porque fue el motivo de la separación de su padre y porque éste era un gran asiduo a este mundo», dijo su novia. Los hechos ocurrieron durante el verano de 2011 en Mijas y Marbella. «Recuerdo haberle clavado el cuchillo en la garganta», dijo respecto de una y, relatando otra de sus siniestras hazañas, se fijó en que «la televisión estaba encendida». A partir del lunes, éste se sentará en el banquillo de los acusados. Fue detenido en Riviera del Sol (Mijas) gracias a un gran operativo policial. De origen alemán, ya cumplió casi dos décadas de prisión por matar allí a una mujer.

2. Toni Alexander King, el decano de la siniestra lista

Toni Alexander King, un británico que curiosamente trabajó en un bar de Riviera del Sol, donde fue detenido su ilustre colega Abdelkader S., acabó en 1999 con la joven de 19 años Rocío Wanninkhof y en el verano de 2003 con Sonia Carabantes, de 17 años, en la Feria de Coín. Conocido como el estrangulador de Holloway, por su afición a asfixiar mujeres sin matarlas para abusar de ellas en su barrio de Londres, los expertos coinciden en que se trata de un psicópata. Fue sentenciado por ambos casos, pero no pudo ser detenido hasta que una colilla que contenía su ADN en la escena del crimen de Wanninkhof arrojó coincidencias genéticas con el material hallado en las uñas de Carabantes. Dolores Vázquez, exnovia de la madre de Rocío, fue juzgada injustamente por estos hechos.

Para abordar a Carabantes, se escondió tras un árbol de madrugada, en agosto de 2003 y le salió al paso cuando ésta se despidió de sus amigas. La golpeó, abusó de ella y la estranguló hasta la muerte. Los peritos llegaron a determinar que era un psicópata pero no estaba enfermo. En este trastorno hay ausencia del sentimiento de culpa, egocentrismo, incapacidad para amar, para aprender de las experiencias y mantener relaciones afectivas y laborales estables, existe tendencia a transgredir la ley y a manipular a los demás en beneficio propio. King, según psicólogos y psiquiatras, fingía trastornos de personalidad. «Es bastante probable el riesgo de reiteración de actos delictivos y la posibilidad de una rehabilitación es casi nula». Los forenses hablaron de la brutalidad de los asaltos y del gran dolor causado a sus víctimas. Otro experto lo ha definido recientemente como un cazador.

3. Asesinó a golpes y descuartizó a una prostituta en Mijas Costa

Un vecino de Mijas Costa fue sentenciado en noviembre de 2011 por matar y descuartizar a una mujer ucraniana que ejercía la prostituciónuna mujer ucraniana que ejercía la prostitución. Tras llevarla a su casa en la madrugada del 6 de abril de 2010, se inició una discusión entre ambos y el procesado le dio varios goles en la cabeza. La sangre quedó esparcida por las paredes, el suelo y el mobiliario y el encausado trató de limpiar los restos. Un día después, compró un serrucho, seccionó el cuerpo, lo metió en seis bolsas de basura y las tiró en distintos contenedores. El jurado no se creyó que el alcohol ni la cocaína precipitaran el fatal desenlace.

4. El crimen de los Parrato, en Villanueva del Trabuco

Cuando el padre de la familia conocida en Villanueva del Trabuco como los Parrato murió en 2004, los tres hermanos varones y la mujer se repartieron la herencia. Los vecinos los describen como buena gente, callados y hacendosos labriegos. El menor de ellos, José, llevaba una vida licenciosa que le generó muchas deudas, frente a la monacal existencia de sus mayores, que eran solteros. Éste encargó la muerte de sus familiares a un conocido del pueblo, al que le debía dar 40.000 euros. A las 10.00 horas del 2 de marzo de 2008, el ejecutor se acercó a un olivar en el que trabajaban las dos víctimas y les descerrajó varios disparos mientras disfrutaban de un descanso y comían. «El trabajo está hecho», le dijo el sicario a su empleador.

5. El asesinato de una niña de 13 años por un móvil sexual

En enero de 2011 un joven vecino de Arriate, que contaba sólo 17 años, mató a una niña de 13Arriate, María Esther Jiménez, dándole un fuerte golpe con una piedra en la cabeza. El crimen tuvo un móvil sexual. Llamó la atención la frialdad del chico, que no fue detenido hasta dos semanas después. El cadáver de la menor fue localizado en el interior de la caseta de una piscina.

6. Un cliente asesina a su abogado por dinero

El 2 de marzo de 2012, un alemán se presentó en el despacho que el abogado Salvador Andrés Reina tenía en la capital. Quería contratarlo y, con el pretexto de pagarle, le pidió que lo acompañara a Marbella. Allá se fueron ambos en un coche. Luego, el autor le quitó la cartera amenazándolo con una navaja, le ató las manos y lo metió en el maletero, donde le dio varios puñetazos y navajazos en el cuello y la cabeza. Dejó el vehículo, con el cadáver dentro, aparcado junto a la Estación María Zambrano. Antes, extrajo dinero de varios cajeros con la tarjeta. Fue sentenciado a 25 años. Durante el juicio, el alemán trató de cambiar varias veces de abogado.

7. El descuartizador de Casares que "no era tontito"

Un hombre fue sentenciado a 17 años de prisión por golpear, apuñalar, asfixiar y descuartizar a una mujer finlandesa con la que había compartido piso en Casares en diciembre de 2007. La fallecida le dejó estar en su casa porque él, que trabajaba en el mantenimiento de una urbanización, no tenía dinero. Tras una discusión, la golpeó con un palo de escoba, la maniató con cinta adhesiva y la apuñaló en dos ocasiones por la espalda, para luego taparle la boca y la nariz y asfixiarla hasta morir. Poco después, la descuartizó en cuatro partes, que arrojó al mar. «Si yo la he matado, no voy a ser tan tontito de llevarme sus pertenencias», precisó al ser preguntado sobre por qué tenía enseres de la víctima.

8. Brutal asesinato de una turista sueca en Fuengirola

La Audiencia condenó a 35 años de cárcel a un magrebí por asesinar de múltiples cuchilladas a una sueca suecaque dormía en una habitación de un hostal de Fuengirola. Antes la violó, dado que yacía en el suelo adormilada. Luego trató de asesinar a su amiga, que ocupaba la cama. Todo ocurrió en la madrugada del 18 de junio de 2011.

9. Eric Wilson mató a su amigo tras una discusión

El autor de este asesinato está relacionado con el IRA Auténtico pero no se trata de crimen organizado. Eric Wilson asesinó en junio de 2010 de siete tiros a un joven británico en un pub tras discutir con él por una chica. Esto ocurrió también en la urbanización mijeña de Riviera. Pelearon, se marchó y volvió con una nueve milímetros parabellum que utilizó, a un metro de distancia del finado, sin mediar palabra. Dos disparos cuando se levantaba de la silla y el resto ya en el suelo. A Wilson, cuando fue detenido, se le intervino todo un arsenal. Asimismo, se le relaciona con otros diez crímenes. Actualmente cumple 23 años de cárcel por ese asesinato.

10. El parricida de Mangas Verdes casi acaba con su familia

Sufría de parasomnia, un subtipo de sonambulismo que le hacía tener graves alucinaciones. Así, en la madrugada del 11 de enero de 2011, asesinó a hachazos a su mujer y a su suegra y trató de acabar con sus dos hijos. Estaba soñando. La Sala entendió que sufrió una enajenación mental por trastorno de personalidad y decidió internarlo durante una década en un psiquiátrico. Fue absuelto de cuatro delitos de asesinato, dos consumados y dos en tentativa.

El asesino en serie de la costa

Un alemán se enfrenta a 63 años de prisión por asesinar a tres mujeres en el verano de 2011, dos de ellas ejercían la prostitución y la otra era masajista. Su novia aseguró que él sentía «mucho asco» por las trabajadoras del sexo.

King, un psicópata y estrangulador

Toni King fue definido por psiquiatras y psicólogos como psicópata por su ausencia de empatía. Cumple condena por asesinar a las jóvenes Sonia Carabantes y Rocío Wanninkhof. En Londres se le conocía como el estrangulador de Holloway.

El crimen de la familia 'Parrato'

El menor de cuatro hermanos encargó a un vecino de Villanueva del Trabuco el asesinato con una escopeta de dos de ellos por temas relacionados con la herencia. El ejecutor los sorprendió en el campo mientras descansaban del trabajo.

Un joven mata a una menor de 13 años

Un menor de 17 años mató a una niña de 13 en Arriate. El móvil era sexual. Le dio un fuerte golpe en la cabeza con una piedra. El cuerpo de la chiquilla fue hallado en la caseta de una piscina. El agresor fue sentenciado.

Asesina a su abogado para robarle

Un alemán acudió al despacho de su abogado en Málaga capital. Lo convenció para que lo acompañase a Marbella, donde debía pagarle, pero lo que hizo fue amenazarlo con una navaja, maniatarlo, quitarle la cartera, golpearlo y apuñalarlo.

Una carnicería en Fuengirola

Un magrebí cumple 35 años de cárcel por asesinar de múltiples cuchilladas a una sueca que dormía en una habitación de un hostal de Fuengirola. Antes la violó, dado que yacía en el suelo adormilada. Luego trató de matar a su amiga.

Siete disparos tras discutir con una chica

Eric Wilson discutió en un pub con un inglés, amigo, en principio; fue por una chica. Luego se marchó y volvió con una nueve milímetros parabellum que utilizó, a un metro de distancia del finado, sin mediar palabra. Le descerrajó siete disparos.

Un delirio le hizo matar a su suegra y su mujer

El parricida de Mangas Verdes mató a hachazos a su mujer y a su suegra y trató de hacer lo mismo con sus dos hijos. Está internado en un psiquiátrico porque una grave enfermedad le hizo confundirlos con avestruces.