Los grandes retos de la educación de 0 a 3 años

Las guarderías han perdido peso en favor de las escuelas infantiles. Aunque habrá quien piense que es lo mismo, un concepto está muy alejado del otro. Y no es sólo una cuestión cuantitativa pese a que hay datos que confirman el auge de la primera etapa de la Educación Infantil: el año pasado se batió el récord histórico de matriculaciones en Andalucía con 102.328 menores escolarizados, de ellos 20.350 en Málaga.

La importancia que se le da al carácter educativo de esta etapa viene refrendada por un real decreto aprobado por el Gobierno central en 2022, que equipara la educación para los menores de 0 a 3 años con la que reciben entre los 3 y los 6 años. Las escuelas infantiles no realizan ya solo una labor asistencial y de cuidados, sino que atienden al desarrollo integral del niño en todas sus vertientes.

Más allá de la conciliación, la escuela infantil es importante porque «brinda al alumnado la posibilidad de desarrollar sus esquemas internos sobre el mundo que le rodea, explorar en entornos seguros o consolidar patrones de conducta», detalla Laura Vela, maestra de Educación Infantil y especialista en Educación Emocional.

Igualmente, «es un factor clave para evitar situaciones de exclusión social y desigualdades», además de ayudar a prevenir algunas patologías en el desarrollo del niño que los educadores infantiles pueden detectar precozmente.

Según esta experta, «han surgido muchas escuelas con el paso de los años que han incorporado nuevos enfoques y metodologías más cercanas al niño, que garantizan aprendizajes reales y efectivos».

Maribel Uncala, presidenta de la asociación Ecuelas Infantiles Unidas (EIU), coincide con la docente en que «no se trata sólo de conciliación, sino que los beneficios de la educación temprana en los pequeños están más que demostrados».

Comienzo de curso

En Málaga, este curso han sido 17.616 los menores que han entrado en las aulas el 1 de septiembre, 383 más que el anterior año académico en estas fechas, según los datos de la Consejería de Desarrollo Educativo y Formación Profesional.

Las plazas ofertadas este curso para los menores de tres años son 23.639 y el plazo para solicitar un puesto escolar se mantiene abierto durante todo el curso, por lo que la Consejería prevé que las matriculaciones podrían superar las 20.757 en los próximos meses.

La tasa de escolarización en el primer ciclo de Infantil podría llegar al 56% según las estimaciones de la Junta de Andalucía, que subraya que la región ya es una de las que tienen mayor porcentaje de menores de 0 a 3 años escolarizados.

El gran reto, según recuerdan desde la asociación Escuelas Infantiles Unidas, es la gratuidad total de esta etapa. Una promesa que lleva años sobre la mesa de los distintos gobiernos pero que no acaba de llegar.

«Cuando hemos terminado el proceso de escolarización estábamos aproximadamente en un 40% de vacantes y muchas se cubrirían si las familias vinieran a los centros y les dijéramos que la plaza es gratuita», explica Maribel Uncala.

Por ello, el principal objetivo para este curso de la mesa técnica de trabajo en la que participan las diferentes organizaciones patronales y sindicales junto a la administración andaluza es avanzar en la gratuidad. «Esperamos que no se demore mucho más del curso 24-25», apunta la presidenta de EIU.

Hay comunidades en las que los plazas de 0 a 3 años ya son gratuitas como Galicia, espejo en el que se mira Andalucía, según explican desde la asociación, «porque están utilizando toda la red de centros tanto pública como privada para poder dar la gratuidad».

El sector defiende el sistema de la primera etapa de Educación Infantil en Andalucía, donde hay más de 126.000 plazas y 2.160 centros autorizados, la mayoría privados adheridos al programa de la Junta para el fomento de la escolarización. En Málaga son 373 centros entre los de la Junta y los públicos o privados.

Por ello, Escuelas Infantiles Unidas critica que el Gobierno central usara en la pasada legislatura parte de los fondos Next Generation para «crear plazas públicas para este etapa», aprovechando centros que se están quedando vacíos «para meter a niños de dos años con calzador».

«Los centros exclusivos de 0-3 años hay que mantenerlos porque es el lugar específicamente creado para ellos y que cumple con todos los requisitos», afirman. Además, alertan de que se pondría en peligro el empleo de unas 15.000 mujeres que trabajan en las escuelas infantiles.

En el plano económico también hay otra reivindicación. Aunque para este curso se han actualizado las subvenciones por los gastos de gestión de las escuelas infantiles en Andalucía, subiendo la cuantía por alumno de 100 a 115 euros, el sector quiere que estas subidas queden regularizadas y no sean puntuales.

Otro de los problemas con los que tienen que batallar es el intrusismo, aunque Maribel Uncala destaca que no está tan acentuado como hace unos años. «En 2015, cuando fundamos la asociación, llegamos a denunciar a más de 200 centros», recuerda. Ahora, en la mesa técnica con la Junta se busca establecer «de forma clara» un protocolo para poder «cerrar estos establecimientos o por lo menos acabar con la actividad ilegal».

No menos importante es, según Escuelas Infantiles Unidas, cambiar el decreto que regula esta etapa educativa en Andalucía, «que es de 2009 y está muy derogado».

Menos niños por aula

En Educación Infantil la ratio también importa y mucho. Actualmente, en el nivel de 0 a 1 año, puede haber un máximo de 8 bebés, en el de 1 a 2 años, un máximo de 13 y en el de 2 a 3 años, hasta veinte menores. Como indica la maestra Laura Vela, «enfrentarse a aulas de 20 niños de 2 años dificulta mucho la labor docente». Por ello, para ofrecer una educación de calidad, ve necesario, o bien reducir el número de alumnos, o que la figura de apoyo al docente «sea real».

También cree que habría que establecer unos programas con criterios comunes para que los niños hicieran la transición de la primera a la segunda etapa de Infantil de la mejor forma posible.

Por su parte, Uncala pone el acento en la formación de los profesionales de las escuelas infantiles y señala que la Universidad está «muy enfocada al segundo ciclo de Infantil» y debería apostar más por el primero.

El objetivo de este y el resto de retos es que los menores reciban la mejor educación posible desde que pisan un aula. La escuela infantil es la primera y marcará el inicio de su camino hacia el futuro.

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