Patrimonio

La continuidad del Museo de Historia Militar, en peligro

Sus responsables piden ayuda para continuar en otro lugar, debido a que el contrato finaliza este 2024

Trajes en el Museo de Historia Militar de Málaga.

Trajes en el Museo de Historia Militar de Málaga. / L. O.

José Manuel Gutiérrez

El Museo de Historia Militar de Málaga abrió sus puertas a los visitantes en 2021 y se encuentra ubicado en la plaza de San Francisco. Sin embargo, el contrato de alquiler del local termina este 2024. Debido a este problema, los responsables del museo solicitan la ayuda del Ayuntamiento de la capital para que se le busque otro lugar más amplio y puedan continuar en la ciudad.

Bernardo de Haro, responsable del museo, asegura que llegó a un acuerdo con el alcalde, Francisco de la Torre, para un plan de colaboración que consistía en hacerse cargo del centro de interpretación del Castillo de Gibralfaro. Dicho acuerdo, según declara De Haro, se hizo con la promesa del alcalde de que les iba a buscar un nuevo sitio donde continuar con la exposición.

Sin embargo, el gerente del museo afirma que el tema de Gibralfaro se encuentra parado: «Llevamos un año sin tener contacto con nadie».

Dificultades en este espacio

El museo expone una recopilación de la colección de uniformes militares originales de Javier Chaos. Actualmente, puede exponer a sus visitantes solo 70 uniformes, debido al insuficiente espacio del que dispone para poder colocar las 350 piezas que tiene la colección.

Para poder mostrar todas sus piezas, las instalaciones tendrían que contar con más de 400 metros cuadrados y ahora mismo el lugar en el que se encuentra ubicado el museo cuenta con tan solo145 metros cuadrados.

Haro destaca que acuden al museo una media de 20 visitantes por día, un cifra muy baja que le dificulta pagar el alquiler.

Próxima apertura

Bernardo de Haro asegura que si el Ayuntamiento de Málaga no interviene para encontrar una solución, se llevará todas las piezas de la colección a Granada, donde afirma que ya tiene cerrado un acuerdo, aunque aún prefiere no decir dónde. Recalca, no obstante, que su objetivo principal es quedarse en Málaga.

«No estamos pidiendo dinero, pedimos el apoyo del Ayuntamiento como a los demás museos», añade.

Tras mantener nuevas conversaciones con representantes del Ayuntamiento y mostrarle su ‘compromiso’, Bernardo de Haro sigue sin ver una solución y el futuro del museo podría encontrarse en otro destino.