Sanidad

Aumentan los casos de gastroenteritis en Málaga, pero con cuadros leves

Los cambios de temperatura han traído consigo un incremento de los virus intestinales que provocan diarrea, náuseas y vómitos durante unos cuatro o cinco días

Entrada del centro de salud Alameda Perchel

Entrada del centro de salud Alameda Perchel / Álex Zea

Arancha Tejero

Arancha Tejero

La llegada de la primavera ha traído consigo un aumento de los virus intestinales en Málaga. Una situación habitual en esta época del año debido al cambio de las temperaturas, según las explicaciones del pediatra y presidente del Colegio de Médicos de Málaga, Pedro J. Navarro, que confirma que en las últimas semanas se están dando “muchos casos” de este tipo de virus, aunque matiza que los cuadros que ocasiona son leves.

El doctor insiste en que, aunque no llega a ser una alerta sanitaria, ni el incremento de casos es exagerado, sí que se ha detectado que los pacientes afectados por virus intestinales están comenzando a repuntar. El motivo, según el presidente del Colegio de Médicos, no es otro que la alta contagiosidad de los mismos.

“El problema de los virus es que son muy contagiosos y cuando alguien de la familia tiene un virus intestinal hay que extremar muchos los cuidados con la higiene de manos y la limpieza de los inodoros y todos los utensilios de la casa porque pueden estar contaminados con gotitas que salen al respirar o al tocarte la boca, por lo que es muy fácil contagiar al resto de la familia”, señala el pediatra, que subraya la facilidad de contagio cuando se da un caso en una guardería, una casa o cualquier ámbito donde convivan muchas personas.

Síntomas

Los virus intestinales más frecuentes son el norovirus y, en el caso de los niños, el rotavirus y el adenovirus, que, a pesar de ser muy contagiosos, cursan cuadros leves con síntomas como náuseas, vómitos, deposiciones blandas o diarrea, cansancio, poco apetito y, a veces, fiebre no muy elevada. En el caso de los niños, el doctor Navarro también apunta que, en ocasiones, puede venir acompañado de dolor abdominal. 

Varias personas utilizan la mascarilla en el interior de los centros de salud por el repunte de gripe

Varias personas utilizan la mascarilla en el interior de los centros de salud por el repunte de gripe / Álex Zea

Más allá de los síntomas, que suelen desaparecer a los cuatro o cinco días, son virus que no tienen mayor impacto para la salud. “Los cuadros son leves y se pueden quedar en casa tranquilamente, cuidando la alimentación, la hidratación y la higiene, que tiene que ser lo más exhaustiva posible, sobre todo, de manos”, recalca el presidente del Colegio de Médicos, que añade que, si se tiene molestias, se puede tomar algún analgésico leve y “esperar unos cuantos días en casa porque suelen ser casos autolimitados”.

No obstante, en caso de que la fiebre, el dolor abdominal o cualquiera de los otros síntomas sean muy agudos o elevados, como una diarrea muy copiosa, sí que se debe consultar al pediatra o médico de familia. Pero si no, llevando una dieta blanda y ciudadano la hidratación, remitirá en pocos días. 

Cuidar la hidratración

“Cuidar la hidratación es fundamental”, afirma el doctor Navarro, que advierte que es frecuente deshidratarse debido a que se come poco, porque no se tiene apetito, y por la pérdida de líquidos que ocasiona la diarrea. Por ello, insiste en la importancia de tomar bebidas, como una limonada alcalina o un suero, para hidratarse bien. “Como todos los virus, no tiene tratamiento médico de antibióticos así que lo único que hay es los que llamamos tratamiento sintomático e hidratarse”, agrega el presidente del Colegio de Médicos de Málaga, que sostiene que, aunque los cuadros son leves y autolimitados, siempre hay que tener cuidado con los “extremos de la vida”, es decir, los ancianos, los niños más pequeños y las personas con patologías crónicas. 

Asimismo, aclara que, aunque es un virus que pueden coger tanto adultos como niños, es más frecuente que los más pequeños sean quienes contagien a los mayores, ya que suele estar en entornos más hacinados como guarderías o colegios donde la contagiosidad es más probable. “Si luego el niño va a casa, donde convive con los padres o abuelos, suele ser quien traiga el virus y contagie”, apunta el pediatra. 

Cambio de temperaturas

A pesar de que los virus intestinales están presentes durante todas las épocas del año, lo habitual es que se incrementen con la llegada del calor. Por ese motivo, las altas temperaturas de finales de febrero y principio de marzo han provocado este repunte de los virus intestinales en la provincia. “En la época de frío los virus que se incrementan son los respiratorios, pero con el calor los virus intestinales cobran más protagonismo”, destaca el doctor Navarro, que puntualiza que la estacionalidad de los virus está cambiando debido al cambio climático y las alteraciones bruscas de temperaturas.

“Hace diez o quince años la patología vírica estaba muy estipulada entre los pediatras y estaba muy clara la época de gripe, de bronquiolitis, etc., pero ahora todo está bastante más desorganizado porque las temperaturas están un poco anárquicas”, concluye el presidente del Colegio de Médicos de Málaga, que recuerda que, a pesar de la tendencia cambiante, la llegada de estos virus es habitual con la entrada de la primavera.