El Málaga CF vuelve a ilusionar

El Málaga CF ha conseguido en tiempo récord algo que parecía difícil hace solo unas semanas: volver a conectar con su afición. La hinchada blanquiazul acabó muy ‘quemada’ la pasada temporada y prueba de ello fue la tremenda bronca que se llevó el equipo en el último encuentro en La Rosaleda, pese a que acababan de lograr la permanencia. Los últimos meses del curso pasado acabaron siendo realmente insoportables, pero los seguidores ya han reseteado y cuentan los días para que el balón ruede en partido oficial, el domingo 14 de agosto, a las 22.00 horas, en El Plantío frente al Burgos.

Buena parte de la culpa de la ilusión generada entre los aficionados blanquiazules la tiene el gran trabajo que ha hecho el club en estas primeras semanas del verano, comenzando por la dirección deportiva. A la expectación creada tras el fichaje de Guede para el banquillo en el tramo final de la pasada campaña, se ha unido un tremendo entusiasmo por los jugadores que han llegado para reforzar la plantilla. Se han marchado muchos futbolistas que la afición ya los tenía atravesados y han llegado muchos otros que han caído de pie. Nombres como los de Rubén Castro, Manolo Reina, Fran Sol o Álex Gallar, y otro tipo de futbolistas con bagaje y experiencia en el fútbol español del más alto nivel, han servido para recuperar las ganas de la gente.

La mayor prueba de que los malaguistas han recobrado la ilusión es que el club ya se mueve en las cifras de abonados del curso pasado. Hace días que desde Martiricos no emiten una cifra oficial de abonados, pero a Manolo Gaspar se le ‘escapó’ en sala de prensa que ya había «13.000 y pico», un número aproximado a los que se abonaron a lo largo la temporada pasada. Y todo ello, a más de tres semanas para que comience LaLiga SmartBank y a más de un mes para que el conjunto blanquiazul juegue su primer encuentro oficial del curso en La Rosaleda: el lunes 22 de agosto, a las 22.00 horas, frente a la UD Las Palmas.

Otra prueba del entusiasmo que este nuevo Málaga ha generado es el anuncio que hizo a principios de semana la Grada de Animación: ya han agotado los 1.256 abonos que tienen a su disposición. ¡Lleno total en el pulmón de La Rosaleda! Y están en conversaciones con el club para ver si es posible ampliar la zona y que se sumen algunos seguidores más.

Y todo esto se ha producido sin que la plantilla esté configurada al 100% y sin que a los recién llegados les haya dado tiempo a demostrar prácticamente nada en los amistosos de preparación. Muy mal se tienen que dar las cosas para que cuando arranque el campeonato, el Málaga no sume una cifra superior a los 15.000 abonados. O quizás más.

A la dirección deportiva aún le falta por poner la guinda al equipo, pero los que han llegado ya han dejado claro el objetivo: pelear por el ascenso. El discurso de una plantilla mucho más madura que la del curso pasado ha cambiado y ya se habla sin tapujos de luchar por cotas mayores. La ambición de los nuevos fichajes también ha ayudado a generar ese clima de optimismo que vive el malaguismo desde que arrancó el mercado de veraniego.

Falta casi un mes para que arranque la temporada, faltan por llegar los últimos retoques a la plantilla, pero el club ya ha hecho lo más difícil, recuperar la ilusión de la afición. Ahora la pelota pasa al tejado de Pablo Guede y los jugadores, que serán los encargados de mantener viva esa llama durante los próximos meses.

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