Málaga encabeza las agresiones a sanitarios en Andalucía con casi 200 casos entre enero y julio de este año

Málaga encabeza las agresiones a sanitarios en Andalucía. La provincia es el territorio andaluz en el que más casos se han registrado entre los meses de enero y julio de 2022. Según los datos registrados en el Servicio Andaluz de Salud (SAS), en Málaga se han producido 187 agresiones a personal sanitario, 46 de ellas físicas. Por ello, el Sindicato de Enfermería SATSE solicita a la consejera de Salud y Consumo, Catalina García, una reunión urgente de seguimiento del plan de prevención y atención frente a las agresiones a estos profesionales.

Esta petición se produce tras conocer que cerca de 900 trabajadores de la sanidad pública andaluza han sido víctima de algún incidente violento. En concreto, en los primeros siete meses de este año se han contabilizado 898 agresiones, de las cuales 730 han sido de carácter verbal -amenazas, críticas humillantes o insultos graves- y 168 han llegado a la agresión física. Málaga es la que más casos registra, seguida de Sevilla, con 175 casos; Cádiz, con 153 casos; Huelva, con 93 incidentes; Granada, con 85; Almería, con 80 agresiones; Jaén, con 62 casos y, por último, Córdoba, con 62 incidencias.

Con estas cifras sobre la mesa, SATSE apela a la sensibilidad de la consejera para atender sus peticiones y seguir implementando medidas "que son de vital importancia para continuar mejorando las condiciones laborales y de prevención de todos los profesionales del sistema sanitario público de Andalucía".

Si bien ya se han conseguido grandes avances en la prevención y protección de los profesionales sanitarios, explica la organización sindical, "es urgente seguir implementando nuevas medidas en esta materia". El sindicato puntualiza que desde su entrada en vigor el 10 de octubre de 2020, "siguen sin desarrollarse todas las medidas y modificaciones normativas recogidas en el plan de prevención y atención frente a las agresiones a profesionales del SAS".

Medidas pendientes

Entre las medidas pendientes de poner en marcha destacan las relacionadas con los derechos y deberes de los ciudadanos, que incluyen promover un cambio normativo que establezca un régimen sancionador para los usuarios del sistema sanitario público que los incumplan, incluyendo sanciones económicas proporcionadas al daño ocasionado. De igual forma, SATSE considera como medida de protección "fundamental" que las tarjetas identificativas del profesional no recojan información adicional del profesional que permita que los agresores puedan identificarlos en redes sociales o por cualquier otro medio.

Además,  el sindicato sostiene que sigue pendiente implantar el software de alerta en todos los ordenadores de los trabajadores susceptibles de sufrir una agresión, debido a su contacto directo con los usuarios o incrementar la presencia de cámaras de seguridad y de vigilantes de seguridad en los centros, así como mejorar la formación de estos profesionales en materia de prevención de agresiones.

Por otro lado, la organización sindical  ha propuesto además algunas medidas adicionales como "constituir un Observatorio de Agresiones del que puedan formar parte todas los agentes implicados que tendrían mucho que aportar, como los jueces, fiscales y abogados en aras a conseguir medidas factibles, acordes y pertinentes contra las agresiones".

Asimismo, desde el sindicato se ha insistido en que sería de utilidad implementar en Diraya --Sistema de información asistencial corporativo del SAS-- algún sistema de identificación para agresores, accesible para todos los profesionales. A su vez, insisten en la necesidad de regular por ley el reconocimiento de delito a la autoridad pública la agresión al personal sanitario.